Decisiones que salvan vidas: cómo escapar de un incendio

Las llamas siguen devorando todo a su paso. Galicia, Castilla y León, Extremadura, Andalucía y Cataluña siguen sin ser capaces de controlar unas llamas que ya han arrasado más de 30.000 hectáreas en menos de una semana. La Unidad Militar de Emergencias (UME) tiene desplegados a más de 370 efectivos en los incendios de toda España para intentar contener su expansión y ayudar a los vecinos afectados a abandonar las zonas críticas sin poner en riesgo su vida. 

La bajada de temperaturas de este martes y miércoles parecen darnos un pequeño respiro y, de acuerdo con la AEMET, pasamos de riesgo extremo a riesgo muy alto. Sin embargo, esta situación solo durará hasta el jueves. Las imágenes en los medios de gente huyendo despavorida del fuego son estremecedoras y es que, en una situación de ese tipo, el modus operandi y la capacidad de reacción son vitales. Te explicamos cómo debes actuar si te ves envuelto en una situación de este tipo. 

Lo primero de todo, si nos encontramos cerca de cualquier incendio en el que no vemos efectivos, hay que llamar al 112 a la mayor brevedad posible, igual que si vemos una columna de humo y no estamos seguros de si está controlada o no lo está. Es importante describir a los servicios de emergencias cómo es la columna, su color, intensidad, inclinación y viento. 

Qué pasa si las llamas nos sorprenden in situ

La voracidad de los incendios puede pillarnos desprevenidos, sobre todo cuando hay viento y avanza a toda velocidad. Si en esa situación estamos en casa, es importante refrescar el entorno con una manguera y quitar todos los toldos, sombrillas, pérgolas, muebles del jardín o cualquier objeto hecho de material que prenda con facilidad.

Una vez que lo hemos hecho, el Cuerpo de Bomberos de Santiago nos explica que hay que asegurarse de que todas las puertas y ventanas están bien cerradas, para intentar que el humo y posibles llamas lo tengan complicado para colarse dentro del hogar. También las buhardillas, si las hay o cualquier respiradero de la casa. 

“Es importante desconectar el suministro de gas butano, gas natural, gasoil, parafina etc. Y llenar la bañera de agua y si hay estanques también, por si fuera necesario”, apuntan. Si el fuego ya está en la vivienda, hay que apagar cualquier chispa o partícula encendida y utilizar toallas, alfombras o trapos húmedos para ello.

Si estamos en carretera 

En el caso de que las llamas nos sorprendan circulando por la carretera, debemos salir del coche inmediatamente. Por más pena que nos dé, lo correcto es abandonar el vehículo y caminar en dirección a alguna zona desprovista de vegetación, nunca ladera arriba, para esperar a los servicios de emergencia. 

Si por el contrario, podemos seguir circulando, desde el Club Europeo de Automovilistas recuerdan que lo primero es llamar al 112 o a la guardia civil y seguir sus instrucciones. Es de vital importancia mantener la calma, encender los faros y las luces de emergencia para facilitar nuestra localización. Es recomendable reducir la velocidad, una conducción similar a la que llevamos a cabo cuando hay niebla y debemos alejarnos siempre del foco.