Cómo son, seguridad y curiosidades: todo sobre la polémica de los móviles de última generación de los diputados

  • La Cámara Baja solicita 550 smartphones de gama alta para los diputados y otros 275 móviles de Android

  • Los actuales móviles de los parlamentarios se adquirieron hace 5 años y su seguridad ya no está garantizada

  • Algunos grupos parlamentarios creen que no son necesarios dispositivos tan caros en un contexto de crisis económica

El Congreso de los Diputados ha decidido renovar los dispositivos móviles de diputados y personal de la Cámara Baja. Y para ello destinará algo más de un millón de euros, según se desprende del Boletín Oficial del Estado (BOE). ¿El motivo? Sus terminales actuales, unos iPhone 8 comprados en 2017, ya han cumplido cinco años y Apple no garantiza actualizaciones a partir de ese tiempo, lo que podría poner en riesgo la seguridad de los teléfonos. La medida ha sido recibida con división de opiniones en un contexto de recesión económica como el actual.

¿Son necesarios móviles tan caros?

El concurso al que concurrirán las compañías de telecomunicaciones tiene como premio un contrato de 1.078.000 euros por la adquisición de 550 smartphones para los diputados y 275 móviles del sistema operativo Android para el personal que trabaja en la Cámara, en total 175 dispositivos más que hace cuatro años. El terminal promedio sale a casi 1.500 euros.

El portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, se ha preguntado: "¿deben tener los diputados un terminal moderno y seguro? Sí. Pero no hace falta que tengan un móvil carísimo”. Más lejos ha ido el portavoz de Cs, Edmundo Bal, quien se ha referido al anuncio del contrato como “una sinvergonzonería” y “una ofensa a los ciudadanos”, y ha abogado por adquirir, en todo caso, dispositivos más baratos.

¿Para qué se usan estos dispositivos?

Cuando alguien es nombrado diputado, el Congreso le ofrece un ‘kit tecnológico’ para ejercer sus funciones conformado por un móvil, una tablet y una línea ADSL en su domicilio que puede aceptar o rechazar. Desde hace años estos dispositivos son de Apple, y no de gama media, porque las aplicaciones que se utilizan en el Congreso están hechas para iOS y estas solamente son compatibles con los iPhone y los iPad.

Estas cuatro aplicaciones son el voto telemático, para que un diputado pueda votar de forma no presencial en una sesión plenaria usando una firma digital, la denominada Agenda del diputado, una app que informa al diputado de los actos institucionales a los que está convocado, el control del tiempo de palabra en intervenciones y el acceso al sistema informático en movilidad.

¿Los quieren todos los diputados?

Edmundo Bal ya ha adelantado que los diputados de Ciudadanos van a rechazar estos móviles, y es que no es obligatorio utilizarlos. Sin embargo, la mayoría de los parlamentarios suele aceptarlos. Asimismo, el Congreso permite instalar "bajo responsabilidad del usuario" las apps que quieran en vez de limitarles a las cuatro que se supone sólo deben usar. Por ello, ha sido posible ver a políticos jugando al Candy Crush o consultado sus redes sociales en plena sesión parlamentaria.

Al término de la legislatura, a cada diputado se le da la posibilidad de quedarse con el iPhone y el iPad s si abona la cantidad que la Mesa de la Cámara establezca por ellos.

¿Y la seguridad?

Al Congreso le preocupan posibles ataques como el protagonizado este año por Pegasus, un programa de origen israelí que afectó a políticos como Gabriel Rufián, Aitor Esteban y el mismísimo Pedro Sánchez. Tal fue el revuelo en la seguridad de los terminales móviles que el Centro Criptológico Nacional anunció en mayo que los revisaría en busca de posibles programas espía. En ese sentido, una de las novedades del nuevo contrato se refiere a la posibilidad de los diputados de borrar la memoria del teléfono a distancia en caso de pérdidarobo extravío.

Además, como parte del acuerdo de los nuevos móviles, la Cámara exige disponer de un soporte técnico durante dos años que en horario de 9 a 6 de la tarde de lunes a viernes esté en disposición de reparar averías o daños no cubiertos por la garantía. Superada esa garantía de dos años, las roturas o fallos en los terminales obligarán a un nuevo desembolso de dinero público para su reparación.

¿Exactamente qué dispositivos quiere el Congreso?

La oferta publicada en el (BOE) desglosa que la compañía que gane el concurso deberá otorgar 550 dispositivos de gama alta, cuyas características se corresponden específicamente con el iPhone 13 Pro, que en el contrato publicado se denomina como teléfono de perfil 1. Entre otras funciones que se requieren están que use iOS 15 o superior, que incluya un chip A15 Bionic y que ofrezca videollamadas FaceTime.

Los 275 dispositivos Android (perfil 2) requeridos se corresponden, también ateniéndonos a las características señaladas, a la descripción del Samsung Galaxy A53 5G, uno de los últimos modelos de la marca surcoreana.

En el caso de los terminales de Apple, se pide que estén dotados con cargador con el cable de conexión correspondiente y auriculares con cable, ambos originales, así como funda transparente de protección. Además, entre las especificaciones de los teléfonos se pide una capacidad de memoria que debe ser de 512 GB o una pantalla OLED de 6,06 pulgadas entre otras características.