Ponerte o no 5G en tu móvil: ¿de verdad va a revolucionar tu vida o exageran?

  • ¿De verdad se nota tanta diferencia en navegar por la web, revisar Facebook o ver programas de Mitele?

  • Si vives a las afueras o en medio del campo, el 5G sí puede cambiar tu vida.

  • Una tecnología que afecta, para muy bien, a ámbitos como la medicina, el ocio y la conducción autónoma.

Si no lo ha hecho ya, en breve tu operadora de telefonía móvil te llamará, como siempre, a la hora de la siesta, para ofrecerte una oferta irrechazable: que disfrutes de la tecnología 5G en tu móvil. "¿Cómo? ¿Que Ud. no tiene un móvil 5G?", fingirá sorprendido el amable agente; "le puedo ofrecer uno tirado de precio o bien puede financiarlo en unas cuotas que ni se dará cuenta", te seducirá. Dicho agente, además, te describirá las múltiples bondades de la tecnología de comunicación y conectividad 5G. Si aguantas el relato, es posible que llegues a la conclusión de que tu vida carece de sentido si no tiene 5G.

Un argumentario diseñado por expertos en marketing que seguro que no miente, pero tampoco te cuenta toda la verdad sobre este tema. Tú, que viviste en primera persona aquellos ruidosos routers con el tamaño de una caja de zapatos, y que has experimentado el 1G (1981), 2G (1991, con el que ya podías enviar y recibir SMS), 3G (2005, que permitía hacer videollamadas…. ¡Qué peligro!) y disfrutas del 4G (desde 2013, con velocidades de descarga de hasta 1 GBps), ¿realmente necesitas el 5G?

5G sí, por estas razones

¿Que si necesitas el 5G para tu vida cotidiana? Es como ir de Cádiz a Barcelona en coche: puedes ir en un pequeño y vetusto utilitario, en una berlina normal o en un gran y moderno Mercedes-Benz; con los tres llegas al destino, pero el disfrute es diferente. Quien escribe estas líneas ha probado el 5G en su faceta más avanzada (luego se explica) y te asegura que la experiencia de esta conectividad con un móvil u ordenador supone un punto y aparte respecto al 4G que conocemos hoy. Estas son las razones:

Velocidad de descargas:

El 5G proporciona descargas de contenidos (canciones, películas, multimedia de todo tipo, navegación web en general, etc.) a una velocidad de hasta 10 GBps; esto es 20 veces más que la mejor que proporciona el actual 4G. Esto se traduce en que puedes tener en tu móvil listos para ver dos capítulos de tu serie favorita en 10 segundos. En resumen: velocidad estratosférica en todo lo relacionado con la descarga y/o interacción de contenidos que se encuentren en la nube, por muy grandes y complejos que sean.

Cobertura:

Si con 4G ya hay en España muy pocos lugares sin cobertura móvil, con 5G se eliminarán por completo. Es una cobertura plena y estable, sin "bajones" de potencia. Además, tu propio smartphone puede funcionar como replicador/extensor de señal, lo que beneficiaría a los que te rodean, y viceversa. Desde otro punto de vista, la tecnología 5G es capaz de dar cobertura "con todas las rayitas" a cien dispositivos por metro cuadrado. Esto último está relacionado con la llamada "saturación móvil", de la que el 4G adolece en ocasiones, sin embargo, no existe con el 5G.

Demora, lag o latencia:

Se trata de la diferencia de tiempo en la propagación de una señal de audio o de vídeo, la carga efectiva de una web o entre que le das al gatillo y efectivamente sale la bala si juegas con el móvil online. La virtud del 5G en este aspecto es que, mientras en la red 4G esta demora es de 20 milisegundos, en 5G es de 4. Inapreciable, prácticamente instantánea.

Más autonomía de los equipos 5G:

Un dispositivo permanentemente conectado a 4G consume mucha energía, sin embargo, si lo está a 5G, ese consumo es mucho menor, lo que redunda en su autonomía.

La fibra, en entredicho:

Cuando contrataste el Internet para tu casa, tuvo que acudir un operario para instalar un cable y un router. La potencia de cobertura de un emisor 5G cercano a donde vives es tal que no harían falta cables ni routers para abastecer de conexión a todos los productos conectados del hogar, por muchos que tengas.

¿Facturas del móvil más baratas?

En palabras populares, "producir" 5G supone para las operadoras, a medio plazo, muchos menores gastos de infraestructuras, emisión y mantenimiento. Esto, en principio, debería tener su reflejo en una disminución de las facturas de los clientes. Ve bajando del guindo. Quizá en un futuro, cuando la competencia entre las operadoras sea aún más feroz…

Pero, ¿cómo está el 5G hoy en España?

El último paso burocrático para el 5G data de julio de 2018, cuando el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital llevó a cabo la última subasta de las frecuencias 5G. A principios de 2019 se inició la diversificación técnica de esta tecnología y, para 2020, estaba prevista su generalización económica y social. Pero la pandemia por culpa de la COVID-19 ha paralizado gran parte de los planes previstos. A día de hoy, los ciudadanos de varias ciudades españolas (las "grandes" sobre todo) pueden disfrutar de la conectividad 5G. Pero, ojo, disfrutan de un 5G que tiene truco.

¿Qué tipos de redes 5G hay?

La tecnología de conectividad y comunicación 5G es de una complejidad técnica extrema. Una de sus facetas que más te debe interesar es que existen, en líneas generales, dos tipos de 5G: NSA y SA. 5G NSA (Non-Standalone) emite a través de las mismas antenas del 4G y, aunque sí ofrece más velocidad y cobertura, y menos retardo que el 4G, no proporciona el potencial que atesora la 5G SA (Standalone), que es la modalidad avanzada.

Concretando: 5G NSA, hasta 3 GBps; 5G SA, hasta 20 GBps (recordamos que 4G alcanza 1 GBps en circunstancias óptimas). La conexión que te venden hoy las operadoras de móvil es 5G NSA, que está muy bien, pero no es la fetén; para esta, aún debe pasar al menos un año porque necesita antenas propias.

¿Y en otros países?

También es importante conocer que, técnicamente, el 5G no es el mismo en todos los países del mundo. Cada ámbito territorial, como por ejemplo, la Unión Europea, ha optado por un estándar 5G a partir de las opciones disponibles, más allá de las citadas NSA y SA; las distinciones, en este caso, se basan en las especificaciones técnicas. El 5G europeo no es el mismo que el que funciona en EEUU o en Asia. No es que tu móvil 5G no vaya a servirte allí, sino que no podrá aprovechar su verdadero potencial.

5G: un mundo híper conectado

El 5G no se refiere solo a una mayor velocidad de descarga de contenidos en tu móvil y a una cobertura plena y estable. Esta tecnología facilita que todo, absolutamente todo, esté conectado: edificios, vehículos, infraestructuras del Estado, ciudades al completo e, incluso, las personas. La vinculación global entre todos estos entes abre una nueva realidad social; ponemos unos ejemplos:

• Hogar inteligente: controlar el robot aspirador, las cámaras IP o el equipo de música con el móvil de hoy da paso, con el 5G, a un hogar donde la realidad virtual y aumentada son protagonistas.

• Sanidad: las manos de un cirujano en Tokyo manejan de manera remota a un robot que está realizando de facto una intervención de apendicitis a un paciente de Huelva; la ausencia total de retardo en los gestos es la clave.

• Justicia: el Juez y el Fiscal pueden estar viendo desde el Juzgado cómo los policías detienen a los sospechosos, sometiéndoles a un primer interrogatorio. Hoy, esto es factible con 4G; con 5G, dada la calidad de la imagen y la instantaneidad, podría constituir prueba. ¿No te recuerda al Juez Dredd de Stallone?

• Formación: salto exponencial en la formación online, con la recreación de escenarios históricos o generación de contenidos (realidad virtual) en las habitaciones interactivas de centenares de alumnos de manera simultánea.

• Ocio: mediante un complejo equipo de producción y la ayuda de la realidad aumentada, es posible "asistir" en directo a un macro concierto o a la final de la Champions sin salir del salón. En cuanto a las consolas de videojuegos, el 5G va a suponer otra forma y nivel de ocio virtual.

• Transporte: todos los vehículos conectados entre sí y con las infraestructuras viales propician el escenario idóneo para la conducción y/o el transporte 100% autónomo (y seguro).

• Smart Cities: de paseo por las calles, recibes la información que quieras o necesites de manera inmediata y personalizada; información de… todo.

Lo descrito no solo no es ciencia ficción sino que está más próximo a ser realidad en tu vida cotidiana de lo que supones. Como seguro que has advertido, el 5G puede ser también un modo muy interesante de control social, para conocer tendencias y anticiparse a sucesos. ¿De qué sino crees que viene el boicot comercial de Donald Trump a Huawei, la compañía de 5G más poderosa en la actualidad?

¿Y los dispositivos 5G?

Para disfrutar del 5G es condición sine qua non que el dispositivo receptor de la conexión sea compatible con esta tecnología. El caso más común y socorrido de un dispositivo 5G es un smartphone, junto con un tablet y un ordenador portátil. Estos gadgets precisan integrar la tecnología que se entienda con el 5G incrustada en su circuitería y recurrir a una tarjeta SIM 5G, bien física o virtual. Es decir, el 5G tiene en los dispositivos móviles su objetivo prioritario, para que puedan intercambiar contenidos en la nube a una velocidad extraordinaria.

Pero el 5G va a tener absoluta influencia en todos los productos conectados: desde los citados robots aspiradores o cámaras WiFi hasta el televisor, equipos de sonido, cerraduras inteligentes, frigoríficos y resto de electrodomésticos… Absolutamente todo lo que funciona asociado a Internet en pro de una gestión remota avanzada.

Excepto casos rarísimos, todos los smartphones 5G que puedes comprar hoy son compatibles con los protocolos descritos, NSA y SA. Los primeros terminales 5G, hace unos dos años, mostraban unos precios sensiblemente superiores en comparación con modelos 4G de segmento técnico similar. En la actualidad, la gran mayoría parte de los 300 euros y todos los modelos premium (de 800 euros en adelante) son 5G. No obstante, empiezan a aterrizar en Europa móviles 5G por 250 euros, cómo no, procedentes de Asia.