No sin mi música: auriculares sumergibles premium no solo para deportistas

Hay gente que se pone música para absolutamente todo. Puede que uno de tus hijos o nietos sea incapaz de concentrarse en sus estudios si de fondo no tiene puesta su banda sonora favorita, que cuando tú sales a caminar necesites escuchar tu playlist para relajarte, que sea tu acompañante para cocinar tranquilamente o que sea indispensable cuando sales a correr para motivarte al 100%. Esto puede llegar a ser un problema para algunos deportistas o aficionados: los de los deportes acuáticos, como la natación. Escuchar música mientras das cada una de las brazadas parecer prácticamente imposible, pero lo cierto es que existen auriculares sumergibles perfectos para ir a echar unos largos a la piscina mientras escuchas a tu grupo favorito. ¿Quieres conocer algunos?

Ahora bien, la resistencia al agua es una cosa pero que estén preparados para funcionar bajo el agua es otra. La mayoría de los auriculares tienen esa resistencia al agua necesaria para poder seguir funcionando con normalidad ante el sudor, la lluvia o tras un despiste al meterlos en la lavadora. Si de verdad quieres usarlos en natación debes hacerte con unos que estén preparados y diseñados para mantenerse en contacto directo con el agua y que cuenten con una gran durabilidad y autonomía.

Por supuesto una de las marcas insignia en todo tipo de aparatos electrónicos no podía dejar escapar la oportunidad de tener sus auriculares destinados para los deportes acuáticos. El NWWS413 Walkman cuenta con un buen diseño de lo más cómodo para que no interfiera en tus entrenamientos. Además, funciona en temperaturas bajas de hasta -5 grados hasta temperaturas calurosas más extremas de 45 grados, con un límite de profundidad de dos metros. Son inalámbricos pero también cuenta con 4 GB de capacidad interna de almacenamiento.

El diseño de estos auriculares de Bragi bastante minimalista pero efectivo, al estilo in-ear. Tiene todas las funciones que se buscan hoy en día en unos auriculares, con posibilidad de conexión bluetooth pero también con su propia memoria interna. Además cuenta con cancelación del ruido para concentrarse en la música y en el ejercicio y, por supuesto, es resistente al agua hasta un metro de profundidad. Además de poder cambiar de canción mediante gestos con la cabeza, también se puede hacer en su superficie gracias a que es táctil y mediante toques se pueden realizar esos cambios. Su autonomía es de unas cinco horas, así que es perfecto para comenzar tus entrenamientos.

Su diseño es muy similar a los auriculares sumergibles de Sony, con un diseño cómodo que se adapta perfectamente a los oídos y a la forma de la cabeza de cada persona, lo que lo convierten en unos auriculares ideales para nadar. Tiene dos capacidades, de 4 y 8 GB para el almacenamiento de tu música preferida y una autonomía de unas ocho horas. Además, en solo dos horas puede estar al 100% de su carga para poder lanzarse al agua y comenzar el entrenamiento.

Con una batería de carga rápida estos auriculares son perfectos para los deportistas que entrenan en agua si quieren conectar su música por bluetooth y tener una autonomía de ocho horas. Es más, cuenta con carga rápida, pues en solo diez minutos se puede tener ya capacidad para una hora de uso. Además de su conexión inalámbrica cuenta con su propia memoria de almacenamiento y un diseño perfecto que se adapta adecuadamente a la oreja de cada usuario, que se activan y desactivan cuando la persona se los quita o se los pone.

Estos auriculares cuentan con las implementaciones de todos los que hemos ido viendo a lo largo de esta lista, pero si para alguien son idóneos es para los nadadores profesionales debido a que permite una conexión entre el auricular y el teléfono del entrenador para que este pueda ir dando indicaciones o correcciones al tiempo que se está nadando. Esto se produce gracias a una aplicación que debe ser descargada en el smartphone para usar esta función. Además de los cascos cuenta con el reproductor que tendrá que engancharse en la goma de las gafas. En cuanto a su autonomía puede llegar a las seis horas, aunque todo depende del uso y de la configuración.