Londres-Nueva York en tres horas y con 50 asientos: los vuelos post pandemia serán supersónicos

  • El coronavirus trae cambios en la aviación global, como el auge de una nueva generación de aviones supersónicos, herederos mejorados del Concorde

  • Se estudia una nueva legislación y nuevos avances técnicos para vigilar muy de cerca sus emisiones, el alto consumo de combustible y el ruido que hacen al romper la barrera del sonido

  • No serán billetes lowcost, pero estos jets supersónicos alojarán, en butacas individuales, a no más de 50 pasajeros. Unirán Londres y Nueva York en tres horas y quince minutos.

Poco después del 50 aniversario del lanzamiento del mítico Concorde, una nueva saga de aviones súper veloces está a punto de surcar los cielos, empujados por los cambios que trae el coronavirus a nivel global. El fatídico accidente que sufrió el avión más célebre del mundo, sumado al desorbitado precio de sus billetes y su alto impacto medioambiental acabaron por relegarlo a los museos de aviación. Hoy, gracias a las nuevas tecnologías, una nueva legislación sobre los vuelos ultrarrápidos y una mayor eficiencia a nivel medioambiental parece que es, definitivamente, su momento. Sí, has leído bien, dentro muy poco tu modo de viajar en avión será su-per-só-ni-co. Te contamos por dónde van los tiros y los nuevos modelos (AS2, Spike S-512 y Overture) que podrás disfrutar en breve.

El accidente del Concorde que unía París con Nueva York hace veinte años fue un jarro de agua fría para lo supersónico, es decir, los aviones que superan la velocidad del sonido. Sin embargo, en dos décadas de avances técnicos, la aerodinámica ha mejorado considerablemente, así como el rendimiento de los nuevos propulsores, carburantes menos contaminantes y materiales más ligeros. Todo esto hará, según los expertos, que estos aviones de reducido tamaño puedan surcar nuestros cielos a una velocidad de Mach 2.2, el doble de la velocidad del sonido.

Por otra parte, a diferencia de los aviones tradicionales donde volamos hacinados más de trescientos pasajeros, estos jet supersónicos alojarán, en butacas individuales, a no más de 50 pasajeros. Un dato muy a tener en cuenta con las fuertes restricciones impuestas por la covid-19. ¿Quién podría imaginar que este virus que ha venido a parar el mundo dará alas a los aviones comerciales más rápidos de la historia?

El efecto boom ya no será un problema

Los detractores del célebre Concorde acusaban a sus diseñadores de haber creado una bestia que rugía en el cielo como ninguna otra. El ruido (boom) que ocasionaba cuando entraba en modo supersónico era tan estruendoso que se le prohibió sobrevolar zonas habitadas. Eso limitó sus vuelos a las zonas oceánicas.

A día de hoy los vuelos supersónicos siguen prohibidos en países como Estados Unidos, aunque hay voluntad de revisar la legislación. Máxime cuando los nuevos aviones que se están desarrollando vigilarán muy de cerca sus emisiones, el consumo de combustible y el ruido que harán al romper la barrera del sonido. De momento, hasta que se regulen los vuelos continentales, algunas compañías centrarán sus rutas en sobrevolar los océanos con líneas como Nueva York-Londres o San Francisco-Tokio y pasarán a modo subsónico cuando sobrevuelen tierra firme. Está previsto que más de 500 rutas se beneficiarán de manera inmediata de las velocidades supersónicas.

Tecnología y diseño de vanguardia

Cuando hablamos de velocidades como Match 2, lo expertos no sólo se refieren a volar más rápido sino al efecto que causa en la percepción humana el hecho de sentir los lugares lejanos más cercanos. Por eso, cuando se plantean los vuelos transoceánicos no se miden tanto en millas, sino en horas de vuelo. Las previsiones son optimistas: estos aviones podrán unir Londres y Nueva York en tres horas y quince minutos. Menos de la mitad de lo que se tarda ahora. Al doble de velocidad, el mundo está el doble de cerca.

Pero si los ingenieros están dando forma a exteriores que serán sorprendentes para lograr los menores cocientes de resistencia, los diseñadores de interiores están dando rienda suelta a su creatividad. Su objetivo: crear cabinas donde lujo, practicidad, conectividad y confort alcancen cotas nunca antes vistas abordo.

Cada pasajero tendrá una gran ventana personal, acceso directo al pasillo y espacio de almacenamiento propio debajo del asiento. Sin duda, un entorno covid-friendly. Por si fuera poco, las dimensiones de los asientos serán comparables a los que vemos hoy día en primera clase, pero con muchas mejoras de diseño en cuanto a ergonomía.

Y, como curiosidad, un dato llamativo: a 60.000 pies sobre el suelo (que es la altura que alcanzan estos bólidos con alas) sus afortunados pasajeros podrán contemplar la curvatura de la Tierra.

A punto de despegar

Ya hay tres modelos que están a punto de comenzar sus vuelos de prueba, antesala de su comercialización. Muy diferentes entre sí, cada uno aporta brillantes soluciones que reflejan el nivel de desarrollo tecnológico aplicado. Aquí te los presentamos.

AS2, el más exclusivo

Aunque se trata de un proyecto enfocado a la aviación privada, la firma Aerion Supersonic está planteando desarrollar variantes más grandes y aún más rápidas para aerolíneas comerciales.

En concreto, el AS2 cuenta con espacio para tan solo 12 viajeros y una autonomía suficiente para volar de Nueva York a Sao Paulo o de Londres a Beijing. Hoy, recorrer estas distancias cercanas a los 8.000 kilómetros implica un vuelo de unas dieciséis horas, incluida alguna tediosa escala. A bordo de esta maravilla técnica se tardarán poco más de cuatro horas.

Se espera que la fase de diseño preliminar concluya en 2021. Para darle más visos de realidad al proyecto, Aerion se ha asociado con Boeing. El AS2 viajará en crucero a Mach 1.4, lo que equivale a 1.000 millas por hora. Lo más destacable es que está siendo diseñado para volar con biocombustibles. Está previsto que despegue en 2023.

Spike S-512, silencio supersónico

Según Spike Aerospace, su modelo S-512 será el avión civil más rápido y silencioso del mundo. Con capacidad para un máximo de 18 personas, los ingenieros prevén que pueda hacer el trayecto Nueva York-Dubai en la mitad de tiempo y ¡sin escalas!, lo que reduce aún más el tiempo de viaje.

El proyecto tiene un coste aproximado de 125 millones de dólares. Ya han probado su prototipo y están en el proceso de selección del motor más eficaz, en una joint venture de lujo con Rolls Royce.

Su cabina incorporará ventanas-pantalla que podrán tanto reflejar el exterior como servir como espacio de trabajo. Los más optimistas creen que en 2023 el S-512 podrá levantar el vuelo por primera vez.

Overture, el más elegante

Los creadores de esta joya aeronáutica, la compañía Boom, espera que su avión, de 55 plazas, sea 30 por ciento más eficiente y 30 veces más silencioso que el Concorde. El truco está en el tamaño y en la elegante aerodinámica con la que cuenta.

Su primera ruptura de la barrera del sonido se espera para este año. Y unos meses más tarde llegarán las pruebas a velocidad Mach 2.2. Será la mitad de pequeño que el avión francés y conseguirá volar a 2.335 kilómetros por hora. Tanta expectación ha generado que Sir Richard Branson, dueño de Virgin, ha brindado personalmente respaldo financiero al proyecto y Japan Airlines ya ha hecho sus primeros pedidos.

Según fuentes de la compañía apuntan a que el precio será un cuarto de lo que costaba el Concorde, (ida y vuelta salía, en su día, por 12.000 €). Eso sí, si viajas en clase business, el billete costará lo mismo que a bordo del avión de Air France. Pero en este caso olvidarás el precio volando, literalmente.