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Según datos del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, Fundación Mapfre y EU Kids Online, la edad media de iniciación en las nuevas tecnologías es de siete años; el 63% de los niños entre nueve y 16 años dispone de un teléfono móvil; y el 91% de los niños de esa edad tiene un perfil en redes sociales que usa habitualmente. La conectividad y la telefonía móvil nos hace estar conectados con el mundo y con las personas de nuestro entorno. Para los padres es, incluso, un alivio saber que podemos comunicarnos con nuestros hijos en cualquier momento.
Pero también hay peligros: un uso incontrolado del móvil en niños y adolescentes los expone a riesgos como el sexting, el grooming o el cyberbulling. Además, un uso excesivo de Internet puede afectar al adecuado desarrollo de las habilidades sociales e incluso puede llegar a crear adicción. La ciberseguridad, en especial para los usuarios más jóvenes y vulnerables, es el eje del Día de Internet Segura 2020. Por esta razón, OCU, en colaboración con Google ha creado una página web que pretende ayudar a resolver todo tipo de dudas sobre el uso responsable de la red. Estas son sus diez recomendaciones top:
Educa a los más pequeños, enséñales a utilizar las tecnologías con inteligencia, respeto y precaución. Dedica tiempo a navegar con ellos explicándoles los peligros que pueden encontrar y minimizando los riesgos a los que pueden exponerse.
El sentido común y la sensatez son las primeras herramientas para protegerse en la red. Además, hay antivirus y programas de control parental que pueden ser de gran ayuda. Custodio, Tiempo de Uso o Family Link están entre las más útiles. Muchas de estas apps son gratuitas y recuerda que no son para espiar, sino para proteger. Estas son algunas de sus mejores funcionalidades:
Las fotos y los vídeos no son para inmortalizar ni compartir situaciones ridículas o bochornosas. Siempre hay que pedir permiso para tomar o difundir imágenes de terceros y exigir el mismo trato cuando tomen imágenes nuestras o de nuestros hijos. Es importante insistir en no mandar fotos a personas que no conocen. Es recomendable tapar la cámara del ordenador para evitar que un software malintencionado pueda grabarles o grabar lo que hacen sin que se enteren.
Instagram, Facebook, Twitter y TikTok son algunas de las redes sociales en las que todos participamos. Si queremos que sean seguras, lo mejor es que sean privadas y que utilicemos contraseñas seguras. Por ello, es importante revisar los ajustes de privacidad periódicamente. Y sobre todo hay que enseñarles a ser selectivos con lo que comparten en redes: borrar algo de internet es difícil y una mala decisión puede perjudicar nuestra reputación durante años.
WhatsApp no sólo es la puerta de entrada de las fake news, y, por tanto, una herramienta de manipulación. También puede ser el canal para la comisión de algunos ciberdelitos. Entre las cosas que no hay que hacer:
Un mensaje que llega de una dirección desconocida o de una compañía de teléfono o suministro que no es la tuya, o del banco, o de la Agencia Tributaria o un organismo de la Administración con el que no tratas habitualmente… Pueden ser intentos de phishing, los que están detrás son ciberdelicuentes que buscan conseguir tus datos personales, o incluso los bancarios, a través de páginas web falsas. Siempre hay que confirmar logos, dominios y, a veces, el tipo de lenguaje utilizado puede indicar que estamos ante un intento de estafa.
Proteger tus cuentas personales, tus perfiles de redes y tus dispositivos con contraseñas seguras es fundamental para tu ciberseguridad y la de toda la familia: no lo pases por alto. Evita las combinaciones numéricas predecibles (cumpleaños o DNIs) y crea combinaciones complejas con números y letras que tengan sentido para ti. Y cámbialas siempre que el sistema te lo pida.
No sólo hay que actualizar el software de seguridad, antivirus y cortafuegos, sino también los sistemas operativos. Es importante que todas las apps y programas que descarguemos tengan totales garantías de seguridad. Fundamental también explicarles a los más jóvenes que deben usar fuentes fiables, y no descargar ni abrir ficheros que no conocen.
Evita divulgar fake news o bulos. Si queremos una internet segura, es importante identificar estas noticias falsas y dejar de propagarlas y difundirlas entre nuestros contactos. Una vez más, el mismo sentido común que nos guía en el mundo real debe hacerlo en el virtual.
Las reglas básicas de educación y convivencia que sirven en la vida real son las mismas del mundo virtual. Faltar el respeto, insultar o humillar a nadie aprovechando el anonimato de la red o consentir que otros lo hagan con nosotros o con otras personas es inadmisible.
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