Y tú te preguntarás: ¿qué vicios, si no fumo, no bebo, no…? Ni que el Bosco pudiera conocerte mejor que tú mismo. Basta con observar detenidamente las cientos de figuras que aparecen en el tríptico del 'Jardín de las delicias' para confirmar que, en realidad, el pintor flamenco sabía de buena tinta cómo era el ser humano. Por eso ilustró uno a uno, en este cuadro, todos los pecados capitales. ¿Quiénes y de qué manera se representan? Eso te lo cuenta, por supuesto, nuestro experto en arte, García Villarán, en este nuevo episodio de 'Vaya cuadro'.
Jheronimus van Aken, que en español llamamos El Bosco, nació en los actuales Países Bajos. Aunque se conoce poco de su vida, siempre se ha tenido claro que la obra del artista es excepcional, no solo por su técnica sino por su extraordinaria inventiva de los personajes. Uno de los coleccionistas que apreció el trabajo del pintor fue el monarca Felipe II. Y algunos críticos, como el jerónimo Fray José de Sigüenza, aportó una buena razón por la cual el Bosco es verdaderamente singular: "Los demás procuraron pintar al hombre cual parece por de fuera; este solo se atrevió a pintarle cual es dentro".