John Waters, el irreverente 'rey del trash': "Ahora para rodar un cunilingus tiene que haber una vagina de plástico"

  • El 'rey del cine basura' presenta en Madrid su monólogo 'Falso negativo' dentro del Festival Rizoma

  • “Lo que hago es reírme de las cosas que amo, pero no de las que odio", confiesa el mítico cineasta

  • "Siempre me he ganado la vida, incluso en este mundo de corrección política actual tan grotesco", dice el director de 'Pink Flamingos'

El legendario John Waters, uno de los grandes exponentes del cine underground, está en Madrid con su monólogo 'Falso negativo', dentro de la programación del Festival Rizoma. Ya no encuentra fácilmente financiación para sus películas, pero sigue hallando la manera de contar sus historias y hacer gala de esa irreverencia que le convirtió en el 'rey del trash'.

En su nuevo monólogo habla de "Covid, sexo, humor, moda... de todo menos de deportes". “Lo que hago es reírme de las cosas que amo, pero no de las que odio. Ser mezquino puede ser divertido 20 minutos, pero no dos horas. Así es como siempre me he ganado la vida, incluso en este mundo de corrección política actual sigo trabajando", ha contado Waters, según recoge El diario.

50 años de 'Pink Flamingos'

Este año se cumplen 50 años de su emblemática 'Pink Flamingos', famosa por el momento en el que Divine, amiga y musa suya, se come una caca de perro real. “En aquel momento había una falta de provocación y tenía un propósito, era un ejercicio de mal gusto y todavía es una rareza. Ahora es peor que antes por ese clima de corrección política. Te ponen anuncios de que puedes herir sensibilidades. Ahora, si tienes una escena de sexo y alguien practica un cunnilingus primero tiene que haber un 'entrenador para las escenas de intimidad' y después tienen que poner una vagina falsa encima de la real para hacerlo, y eso creo que lo hace incluso más siniestro. Es grotesco”, se lamenta.

De ' Pink Flamingos' tiene muchas anécdotas. Tuvo cinco cortes de la censura: por una felación, por una inseminación artificial, porque se comía mierda y por un pollo al que mataban. “Cuando la hicimos acababan de estrenar 'Garganta profunda', el porno era legal… ¿qué quedaba por hacer, qué más podíamos hacer? Pero hicimos algo que es lo único que el porno no puede hacer, y es escatología. Lo hicimos por pura anarquía".

Más difícil para el cine independiente

Waters es de los que cree que el cine ha cambiado tras la pandemia y el arte y ensayo está sufriendo más que nunca. "Hay que llevar a la gente a los cines. Los jóvenes están viendo 'Top gun' o 'Spiderman', pero no van a volver a ver otro tipo de películas. Ahora es más difícil para el cine independiente. Hollywood esta buscando al nuevo niño que vaya al cine", insiste.

A él no le gustan las películas románticas porque le dejan "en shock", pero lo que realmente aborrece son "las películas que le gustan a todo el mundo, esas que ganan el Oscar”, y lo que de verdad le va es el cine europeo. Directores como Sean Baker, Gaspar Noé, Bruno Dumont y, por supuesto, Almodóvar. Aunque no dirige una película desde 2004, cuando estrenó 'Los sexoadictos', ha dejado claro que ni se ha retirado ni piensa hacerlo. “No parpadees porque siempre hay alguien esperando para ocupar tu espacio”, finaliza.