Paloma Concejero, directora del documental ‘Soy rebelde’ sobre Jeanette: “Tras su imagen lánguida descubrí una rockera"

Recorrer el camino que llevó a España del tardofranquismo a la democracia de la mano de la historia y las canciones de Jeanette, la musa 'rebelde' por antonomasia del pop español. Ese ha sido el empeño que ha impulsado a Paloma Concejero para llevar a buen puerto 'Soy rebelde', documental producido por Rodando Voy que se presenta este viernes en la 67 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).

La película propone un viaje histórico a una época convulsa y también ilusionante, marcado por el despertar del feminismo y la necesidad de toda una generación de avanzar hacia la modernidad. Jeanette puso voz a esa generación y lo hizo rompiendo moldes, llegando desde la soleada California de los 60 a una Barcelona ávida de transformación, y regalándonos ese himno, 'Soy rebelde', que supo capturar el espíritu de su tiempo, pero también un buen ramillete de clásicos ('Cállate niña', 'Por qué te vas', 'Frente a frente', 'Corazón de poeta') que han quedado para siempre en la memoria colectiva.

Concejero, que entre otros muchos proyectos ya profundizó en el alma de otro icono del pop patrio con 'Antonio Vega. Tu voz entre otras mil' (2014), se acerca al mito de Jeanette con profunda admiración y voluntad de reivindicar una historia que también es la de todos. La cineasta ha hablado con Uppers sobre un proyecto que comenzó a desarrollar hace más de cinco años y que ahora por fin ve la luz.

¿Por qué hacer ahora un documental sobre Jeanette?

Jeanette es un referente incluso en nuestros días para músicos muy jóvenes que la siguen imitando e incluso versionando. Sin embargo, es una gran desconocida. Sus canciones nunca pasaron desapercibidas pero su vida guarda algunos misterios fascinantes que vamos desvelando siempre con su voz, cantada y contada, como fondo.

Cómo la definirías en tres palabras ahora que la conoces más

Autenticidad, belleza y generosidad.

¿Te la imaginabas diferente?

Para mí era completamente un misterio y fue una sorpresa absoluta descubrir que detrás de esa imagen lánguida y melancólica había una rockera, con mucho nervio.

¿Cómo surge la idea de vincular su trayectoria al camino hacia la Transición?

Una mujer fascinante que “nos puso en Europa” a golpe de canción mucho antes de entrar en la Comunidad Europea, y un hecho histórico, La Transición, que nos puso definitivamente en el mapa como europeos.

¿Por qué el mundo hizo rebelde a Jeanette?

Llegar de la California hippie a España, concretamente a Barcelona, en pleno franquismo siendo además adolescente…creo que deja poco lugar a otra posibilidad que la rebeldía.

¿Cómo fue para ella pasar de la California hippy a aquella Barcelona de los 60?

Traumático y desolador.

¿Es cierto que al principio Jeanette no quiso grabar ‘Soy rebelde’ porque no le gustaba?

Sí. Le pusieron una versión muy diferente que había publicado una cantante mexicana y pensó que poco o nada tenía que ver con ella, por entonces una cantante folk.

El régimen prohibió que ‘Soy rebelde’ fuese interpretada ante menores de 16 años. ¿Cómo se sentía ella con esa situación de ser considerada ‘subversiva’?

Le dejaba perpleja por lo absurdo que era ya que no había forma de controlar aquello.

Pese a empezar muy joven en la música, nunca dio la impresión de ser un juguete en manos de las discográficas, como sí pasó con otras compañeras de generación. ¿Por qué ella fue diferente?

Con una personalidad completamente arrolladora, Jeanette siempre ha tenido muy claro lo que quería y lo que no. Además, siempre tuvo al lado al amor de su vida, una historia de amor como pocas he conocido. Ambos con los pies muy firmes sobre la tierra.

¿Ha seguido sus pasos musicales su hija?

No, nada que ver.

Albert Pla dice en el documental que viendo a Jeanette sintió por primera vez “mariposas extrañas en el estómago” ¿Estaba cómoda ella con la imagen de mito erótico generacional?

No era consciente para nada de las pasiones que despertaba. Pero lo cierto es que así fue y curiosamente tanto en niños como gente muy joven y también madura. La “eterna Lolita” para varias generaciones.

Una anécdota que nos puedas contar de la grabación del documental

La verdad es que en estos años tan difíciles hemos vivido juntas tantas cosas fascinantes. Me pareció muy curioso el día que en un camerino me confesó que los lugares que más le gustan del mundo son las ferreterías y las papelerías. Me quedé helada porque eso mismo confesaba en sus memorias el anterior protagonista de mi primer largo documental: Antonio Vega. Nos reímos mucho e inmediatamente le dije no puede haber dos personas más diferentes que a su vez declaren una pasión incondicional por lápices, cuadernos, tuercas y cables.

¿Le gusta más a ella ‘Soy Rebelde’ o ‘Por qué te vas’? 

Eso mejor que te lo diga ella, aunque estaría un poco feo porque adora a Manuel Alejandro y también a José Luis Perales.

¿Y a ti?

A mí me gustaría destacar canciones de su propia autoría como “No digas nada”, “En mis noches”, “Precious Little” o “Gracias a ti”. Son composiciones maravillosas a las que no se les ha dado el valor que merecen y no sé por qué. Me emociona especialmente ver lo grande que es como compositora y más en un tiempo en el que parecía una misión imposible para una mujer componer sus propias canciones. Mi deseo es que mucha gente descubra también a la gran autora que, sin duda ninguna, ella es.

Jeanette sigue en activo y aparece en festivales como el Sonorama. ¿Es hoy más rebelde que en el pasado?

Segurísimo. Cumplir años ayuda y también los tiempos.

Rozalén, Amaia, Beatriz Luengo, Bunbury… muchos artistas la han versionado y la reivindican ¿Qué significa Jeanette para las nuevas generaciones?

Es una musa, es inspiración. Marcó una nueva forma de interpretar canciones, sin estridencias ni adornos y florituras. Ella es pura sensibilidad. Una caricia que siempre emociona. En el fondo…¡Lo más difícil del mundo!