La realidad sobre la complicada relación de Jamie Lee Curtis con sus padres, Tony Curtis y Janet Leigh

Por primera vez, Jaime Lee Curtis ha sido nominada a los Premios Oscar 2023 como Mejor Actriz de Reparto por su actuación en Todo a la vez en todas partes. La película aspira a otros diez premios en esta gala que se puede ver en directo en España a las 2:00 del 13 de marzo y que se celebra en el Dolby Theatre, de Los Ángeles, California.

En Uppers hemos dirigido todos los focos hacia esta actriz de 64 años. La difícil relación de Jamie Lee Curtis con sus padres ha sido una pesada mochila de la que nunca se ha desprendido debido a cómo fue el matrimonio de Tony Curtis y Janet Leigh, dos de las estrellas indiscutibles del Hollywood de los sesenta.

Jamie Lee Curtis lleva al pie del cañón en la gran pantalla desde hace décadas, es escritora de cuentos infantiles, productora y activista comprometida con el feminismo. Su papel como Laurie Strode con solo 20 años en La noche de Halloween a las órdenes de John Carpenter la convirtió en “un icono del cine de terror”. Nunca se ha apartado de las cámaras, sin embargo, desde hace unos 10 años su carrera cinematográfica pisa más fuerte todavía. En 2022 recibió el León de Oro Honorífico en Venecia, subió descalza a recoger el premio y lo dedicó a las personas que sufren violencia.

La imparable carrera de Jaime Lee Curtis

El cine de terror siempre le ha acompañado pero igualmente resulta perfecta y muy divertida en cintas como Entre pillos anda el juego, Un pez llamado Wanda o Mentiras arriesgadas. En 2015 Jamie Lee Curtis se convirtió en una malvada decana de la universidad en las dos primeras temporadas de la exitosa serie Scream Queen.

El año pasado además de estrenar Todo a la vez en todas partes, el público la disfrutó en Borderlands y encarnó de nuevo a la famosa Laurie Strode en la cinta Halloween: El final. Ya la había revivido con Halloween Kills en 2021 y en La noche de Halloween en 2018. En medio de tanto terror grabó Puñales por la espalda, una cinta donde se resuelve un entretenidísimo misterio. De cara a la galería parece que para Jamie Lee Curtis todo ha sido un camino de rosas, pero nada más lejos de la realidad.

El matrimonio de sus padres se rompe tras su nacimiento

Su historia empezó el 22 de noviembre de 1958 cuando llegó al mundo en Santa Mónica, California. Dos años antes nació su hermana Kelly Curtis. Sus padres, Tony Curtis y Janet Leigh eran dos grandes del cine, se habían casado en 1951 y eran considerados la pareja perfecta y más feliz de Hollywood.

Janet Leigh nació en California en los años veinte y su fama se extendió gracias a su papel en la terrorífica película Psicosis de Alfred Hitchcock en 1960. Se convirtió en leyenda e hizo que su hija, que en aquel entonces solo tenía dos años, mucho más tarde siguiera sus pasos en este género cinematográfico. El matrimonio con Tony Curtis debió de ser lo contrario a una relación idílica.

Tony Curtis en realidad se llamaba Bernard Schwartz, nació en 1925 y era hijo de un matrimonio de inmigrantes que intentaba salir adelante en el barrio del Bronx. Cuando se casó con Janet Leigh también era un fenómeno de la gran pantalla. En 1959 se estrenó la increíble y fabulosa película Con faldas y a lo loco, de Billy Wilder, donde conoció a Marilyn Monroe. Un año antes había nacido Jamie Lee Curtis, que ha contado en varias ocasiones que fue un intento de salvar una relación que hacía aguas por todas partes. Tony y Marilyn se siguieron viendo después del rodaje, incluso ella quedó embarazada, pero perdió el bebé.

Pocos años después Tony se enamoró de la actriz alemana Christine Kaufmann, que en aquel momento tenía 17 años, durante el rodaje de Taras Bulba en Argentina. En 1962 le pidió el divorcio a Janet Leigh. Se casó con aquella joven en cuanto cumplió la mayoría de edad y tuvieron dos hijas: Alexandra y Allegra. Jamie se había quedado con su hermana y su madre, que además se volvió a casar por cuarta vez con Robert Brandt ese mismo año del divorcio.

Las dos hermanas vivieron bajo las estrictas normas de su madre y de su padrastro, que era corredor de bolsa, pero tuvieron una infancia privilegiada y estable además de asistir a las mejores escuelas de Los Ángeles y Connecticut. Eso sí, desde el divorcio estuvieron alejadas totalmente del famoso actor mientras él empezaba a acumular matrimonios. Se casó cuatro veces más y sumó otros dos hijos a la familia, Nicolás y Benjamin.

A los 85 años, Tony Curtis murió de una insuficiencia cardiaca. Sucedió en octubre de 2010. Pocos meses antes había desheredado a sus seis hijos sin una explicación. Presuntamente, la mayor parte de su patrimonio fue para Jill, su última mujer con la que contrajo matrimonio en 1998.

Tony Curtis nunca ejerció como padre

El mismo mes de octubre, tras el fallecimiento del actor, el programa de entrevistas The View de la cadena ABC invitó a Jamie Lee Curtis al plató. Ella confesó que “no fue un padre y no estuvo interesado en serlo. Hizo lo que se suponía que debía de hacer desde un punto de vista financiero, lo cual fue honorable. Pero no era un padre involucrado y, por lo tanto, lo miro desde la misma perspectiva que todos ustedes: una fan de él”. También señaló que sus padres “se odiaron” toda su vida y ella tuvo que crecer con ese odio a su alrededor.

Un año después de la muerte de Tony Curtis, Allegra, una de las hijas de su segundo matrimonio, publicó el libro Mi padre y yo. En él narra que era “un hombre divertido, cariñoso, siempre me apoyó y me animó a afrontar los desafíos; pero nunca quiso enfrentarse a los problemas, ni a los de su mujer ni a los de sus hijos y, tampoco, a los suyos. Siempre le tuvo miedo a envejecer, temía que su carrera terminara”.

A esas inseguridades y a los episodios depresivos se añadió el consumo de alcohol, drogas y otras sustancias desde muy joven con las que intentó compensar todo aquello. Muchos compañeros de profesión le acompañaban en esas experiencias, el problema es que a él le costó demasiado tiempo salir. Según aseguró Allegra Curtis durante la presentación del libro, desde los 7 a los 16 años vivió con su padre o más bien lo cuidó de sus costumbres. “A finales de los 70 y principios de los 80 era completamente normal que todo el mundo fumara hierba y tomara anfetaminas y tranquilizantes”, señaló Allegra.

Jamie Lee Curtis he explicado más de una vez que conocía las adicciones de su padre. También contó que ella estuvo enganchada durante diez años al Vicodin, un analgésico que empezó a consumir para apaciguar el dolor que le produjo una operación de cirugía plástica para eliminar las bolsas de los ojos. En esa época, según publicó una revista, ella llegó a compartir drogas con su padre en una ocasión. Él había estado ausente toda la vida, pero en ese momento Jamie era la única de esa familia variopinta con la que mantenía una relación. Las drogas golpearon al clan Curtis duramente porque Nicholas, el quinto hijo de Tony Curtis, murió de una sobredosis de heroína con 21 años.

La actriz Jamie Lee Curtis se casó con Christopher Guest en 1984 y tienen dos hijos, Annie y Ruby. Ambos muestran en público todo lo que les une. Incluso, él grabo un video de Jamie, que después han colgado en sus redes sociales, del momento en el que ella se entera de que ha sido nominada al Oscar como Mejor Actriz de Reparto de esta 95º edición. En una de sus declaraciones más recientes, subrayó que estos últimos años siente “la libertad de vivir auténticamente el momento y estar abierta a cualquier cosa que surja” y que ahora transita ante una “metamorfosis constante”.