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'El Padrino' la clásica cinta de Francis Ford Coppola no sería lo mismo sin la memorable escena final con el rostro atribulado de Kay Adams, mientras los esbirros de Michael Corleone le cierran literalmente la puerta en la cara. Todo un símbolo de la mentira levantada como un muro entre uno y otro personaje. Un abismo. Solo por esa expresión de revelación, desasosiego y dolor, merecería Diane Keaton todos los reconocimientos. Poco se dice, sin embargo, que el rol de Kay Adams fue el primero de relevancia en la pantalla grande (lo repetiría en las secuelas de 1974 y 990) y que en su elección para la película tuvo un papel insospechado otra leyenda del cine: Fred Astaire.
Cuatro años antes del estreno de la que sería una de las obras maestras de la historia del cine, los ejecutivos de la Warner Bros. convencieron a la Fred Astaire para regresar al género músical después de más de una década y cuando ya contaba con 69 años. La cinta llamada 'Finian's Rainbow' no ha pasado a la historia, pero fue dirigida por un impetuoso y joven realizador llamado Francis Ford Coppola, con quien Astaire entabló amistad rápidamente.
El año del estreno, 1968, Astaire invitó a Coppola a ver, precisamente, un musical, 'Hair' y ahí estaba ella, Diane Keaton, parada por primera vez en un escenario de Broadway. Un hecho por lo demás azaroso porque Diane era, de hecho, la suplente de un personaje secundario. Como sea, su presencia quedaría grabada en la retina del realizador. "Tú estabas en ella, y recuerdo tu preciosa voz al cantar” ha recordado Coppola esta semana en Instagram, en una respuesta directa a Keaton.
Este intercambio empezó hace unos días cuando Coppola, que se abrió una cuenta en la popular red social con 84 años, decidió pedirle a sus seguidores que le hagan preguntas random. La sorpresa se la llevaron todos cuando apareció por ahí Diane Keaton con la pregunta “¡¿Por qué diablos me escogiste a mí para ‘El Padrino’?!” así, con sus signos de exclamación bien puestos. A lo que el cineasta rápidamente contestó: “te elegí porque, aunque ibas a interpretar a la esposa más heterosexual/vainilla, había algo más en ti, más profundo, más divertido y muy interesante (y tenía razón)”.
A tenor de la carrera que ha desarrollado la actriz desde entonces, desde luego Coppola no se equivocaba. Keaton no solo encarnaría a la legendaria Annie Hall, cinta que, dicho sea de paso, la convirtió casi instantáneamente en ícono de la moda, sino que de la mano de Woody Allen tendría un puñado de papeles memorables en películas como 'Interiores', 'Días de radio' o 'Misterioso asesinato en Manhattan'.