Las diez preguntas más importantes a un coach de voz para aprender a cantar mejor

  • "Es mucho mejor practicar canto durante 20 o 30 minutos, tres veces al día, que practicar 90 minutos seguidos"

  • "Se puede aprender a cualquier edad. Las personas mayores tienen más tiempo y más entusiasmo y es más fácil"

  • "Para desarrollar una buena voz, es necesario un gran compromiso y dedicación"

¿Cuántas veces te han dicho que no valías ni para cantar el día de la lotería con los niños de San Ildefonso? ¿Cuántas veces has cantado en la ducha cuando nadie te escuchaba? Pues no te quedes en que la canción sea tu vocación o en tu hobby frustrado. Los coaches Carlos Campaña y Esther Justel de Vokalo aseguran que sí es posible. Su premisa es que es posible cantar de la misma manera que hablamos, sin forzar las cuerdas vocales y evitando problemas futuros y restaurando problemas presentes.

Ambos, cuentan con una amplia experiencia y formación recibida de vocal coaches de élite, como Seth Riggs y Greg Enriquez, cuyo método han seguido Michael Jackson, Stevie Wonder, Whoopi Goldberg, Barbra Streisand, Cristian Castro, Tina Turner, Ozzy Osborne, Prince o Madonna. Con su veteranía y la comprensión que poseen de la voz, responden a las diez preguntas más importantes sobre cómo aprender a cantar a cualquier edad y en especial cuando eres mayor.

 

1. ¿Todo el mundo puede aprender a cantar? ¿Tengo voz para cantar o mejor me dedico a otra cosa?

Muchas personas vienen a nosotros para que les digamos qué limitaciones tienen y así saber “su sitio”. La realidad es que las limitaciones se las ponen ellos. Obviamente siempre habrá limitaciones marcadas por la genética, pero no suelen ser para nada relevantes.

¿Eres un chico y no puedes cantar notas de soprano? Todo tiene su lugar, pero por lo general, algo así no es relevante para ser un grandísimo cantante. ¿No puedes afinar y por eso crees que no tienes oído musical? El oído no suele ser el problema. El no saber cómo usar la voz correctamente lo es. Si el oído fuese el problema, no te gustaría la música. La gran mayoría de las veces la gente se pone limitaciones que no existen, o tienen limitaciones que no son para nada infranqueables.

 

2. ¿Tengo que estudiar solfeo?

No, en absoluto. Aunque cantar sea una actividad musical, en primera instancia es una actividad física. Hay que aprender a utilizar el aparato fonador de la forma correcta, y ahí no va a ser de utilidad entender la teoría musical. De hecho, hay muchas personas que cantan bien sin saber nada de teoría musical.

Dicho esto, entender cómo funciona la música no es un lastre, y puede facilitar mucho el trabajo a la hora de componer y de trabajar con otros músicos. Al final, la música es un idioma, y cuanto mejor lo hables, mejor músico serás.

 

3. ¿La edad es un factor a la hora de aprender a cantar?¿Es demasiado tarde para cantar mejor?

Sí, pero más edad no siempre significa que es peor. Empezar desde muy joven es muy bueno, porque hace que cantar y la música en general sea algo muy natural. Es como quien aprende a hablar un idioma de pequeño o quien lo aprende de mayor. Cuando eres pequeño, aprendes muy rápido y cuando creces es algo muy natural. En cambio, cuando eres mayor, tienes que hacer un esfuerzo más consciente, sobre todo al principio. El problema es que, por lo general, cuando somos pequeños, nuestra capacidad de concentración y de compromiso es mucho menor que cuando somos mayores.

Y, para desarrollar una buena voz, es necesario un gran compromiso y dedicación, ya que hay que practicar muchas horas, y muchas de ellas se dedican a hacer ejercicios que suelen aburrir a la mayoría. Por eso pensamos que, con una gran dedicación, la edad no es un problema.

Nosotros mismos trabajamos y hemos trabajado con muchas personas que, cuando se jubilan, quieren cumplir ese sueño de cantar. Como tienen tiempo para dedicarle y muchas ganas, los progresos se hacen visibles muy rápido.

 

4. ¿Cuál es mi tipo de voz?

Generalmente hablando, las voces se pueden categorizar en uno de estos seis tipos: Para los hombres, de grave a agudo: bajo, barítono y tenor. Para las mujeres, de grave a agudo: contralto, mezzosoprano y soprano.

Muchas personas que cantan o empiezan a entrenar sus voces quieren saber qué tipo de voz tienen. Nuestra respuesta siempre es la misma: “No importa qué tipo de voz tengas. Lo importante es que tengas acceso a todo tu rango de notas de forma fácil y sana”. Por ejemplo, si tienes una voz de soprano, no importa lo que hagas ni cuánto lo desees, a día de hoy no hay forma de cambiar eso y convertirte en contralto. Así que es mejor aprender a utilizar lo que tienes de la mejor manera posible, porque la realidad es que no hay un tipo de voz mejor que otro. Simplemente son diferentes.

 

5. ¿Qué debo sentir cuando canto?

Las sensaciones internas de una persona cuando canta pueden ser muy diferentes a las de otra persona. Por eso, las sensaciones que siente una persona no tienen por qué ser útiles a otra. Lo ideal es huir de la subjetividad y centrarse en la objetividad, en el comportamiento de la voz, desde un punto de vista anatómico. Como vocal coaches estamos entrenados para oír lo que está haciendo una voz y saber qué está pasando anatómicamente, sin tener que depender de descripciones y sensaciones subjetivas.

Por otro lado, tenemos herramientas para cambiar ese comportamiento y así cambiar el sonido. Al enfocar el entrenamiento vocal de esta forma, es muy fácil entender por qué creemos que cualquier persona puede aprender a cantar. Al final, todo se reduce a cambiar el comportamiento de la voz a través de herramientas que producen resultados reproducibles una y otra vez, porque se basan en cómo funciona la voz de todos los seres humanos.

 

6. ¿Cuál es el proceso normal de una evolución vocal?

Nosotros tenemos un lema: cantar tiene que ser fácil. Tiene que ser igual de fácil que hablar. No tenemos que sufrir ni forzar la voz para cantar notas agudas, ni apagarla para cantar notas graves.

Por eso el primer paso, siempre, es trabajar para que la voz funcione correctamente según su diseño. En este paso no importa que la voz suene fea. De hecho utilizamos ejercicios que suenan mal a propósito, porque hay ciertos sonidos que propician ciertos comportamientos musculares que estamos buscando.

A medida que el funcionamiento de la voz se acerca al deseado, empezamos a trabajar en que el sonido sea más bonito y rico.

A su vez, también buscamos que no haya ningún cambio brusco en la calidad del sonido cuando se cantan notas agudas para que sea una voz homogénea.

 

7. ¿Cuánto se tarda en aprender a cantar mejor?

Primero hay que definir qué es “cantar mejor”, porque para una persona puede significar una cosa diferente que para otra. No es igual de fácil cantar canciones de 'Jarabe de Palo' que canciones de 'Bruno Mars'. No es que un artista sea mejor que otro. Es que un artista es más complicado técnicamente que el otro. Por eso se tardará menos en cantar canciones de 'Jarabe de Palo' y que suenen bien, que canciones de 'Bruno Mars'.

Dicho esto, unos aprenden más rápido que otros, como en todo en la vida, y también hay quien empieza con una habilidad natural que le facilita el proceso, al menos al principio. De manera general y basándonos en nuestra experiencia, alguien que no afina al cantar necesitará un año de trabajo para afinar. Para alguien que ya puede afinar, le espera una media de 2 años para empezar a cantar canciones difíciles desde un punto de vista técnico. A partir de ahí, es toda una vida de aprendizaje, como con cualquier instrumento.

 

8. ¿Cuánto y cómo debo practicar?

Es importante dedicar tiempo de práctica si quieres mejorar como cantante para llegar a cantar mejor. Pero no es cuestión de estar tres horas seguidas cada día. Lo que buscamos al practicar es cambiar hábitos, y los hábitos se cambian con la práctica frecuente. Es mucho mejor practicar canto durante 20 o 30 minutos, tres veces al día, que practicar 90 minutos seguidos.

Por un lado, porque lo que estamos haciendo es recordarle, varias veces al día, a nuestro aparato fonador cómo queremos que se comporte.

Por otro lado, porque si practicamos tanto rato seguido, es muy fácil fatigar la voz. Cuando se llega a ese punto, cada minuto más de práctica puede ser contraproducente.

Sobre el “cómo practicar”, lo ideal es con una rutina creada por un vocal coach que conozca tu voz y que tenga un objetivo claro en mente. Tú también debes saber cuál es el objetivo, para buscarlo activamente durante la práctica.

Lo mejor es que esa rutina esté en formato audio o vídeo y que tengas cada ejercicio grabado y con ejemplos de cómo debe hacerse correctamente para que puedas copiarlo.

 

9. Yo no quiero ser cantante profesional, solo lo hago porque me gusta. ¿Cómo debo entrenar mi voz?

Si lo que quieres es disfrutar de cantar, da igual que no quieras ser profesional. Las voces de los profesionales no tienen músculos ni cartílagos que el resto de la gente no tiene. Cada uno tiene su voz, pero el equipamiento funciona igual. La única diferencia es que la exigencia que tiene un profesional es más alta (varios conciertos a la semana, grabaciones en estudio, etc.), pero la dificultad técnica de las canciones que canta pueden ser las mismas que las de un cantante de karaoke. Al fin y al cabo, muchas veces son exactamente las mismas canciones. Por eso lo mejor es recibir un entrenamiento vocal profesional.

Si tratas de cantar canciones difíciles sin una técnica profesional, es muy fácil que te hagas daño y sufras las mismas lesiones que puede sufrir un cantante profesional.

 

10. Desde la pandemia ha habido un boom de formación on-line. ¿Se puede aprender a cantar por Internet?

Sí se puede. Los resultados son los mismos que con el entrenamiento vocal en persona, y es bastante más conveniente en la mayoría de ocasiones. La pandemia no ha hecho más que acelerar lo que ya estaba pasando en el ámbito formativo. Para nosotros no es algo nuevo, ya que llevamos desde el 2013 formando a cantantes a través de Internet.

Nosotros mismos nos hemos formado mayormente por este medio con Seth Riggs y Greg Enriquez (vocal coaches que han trabajado con Michael Jackson y Celine Dion, por ejemplo), ya que ellos residen en Estados Unidos. A día de hoy seguimos formándonos a través de Internet.