Desde Bonanza hasta Dinastía: las series que marcaron a la generación 'baby boomer'

  • El western y el policíaco son dos de los grandes géneros que marcaron la infancia y adolescencia de la generación boomer

  • Los nacidos entre 1946 y 1964 vivieron enganchados a series marcadas por la intriga, las aventuras y los crímenes imposibles

  • Muchas de estas series han pasado a formar parte de la historia de la televisión y siguen conquistando a miles de espectadores en todo el mundo

Mal que nos pese, el tiempo pasa, y todo aquello que alguna vez marcó el mundo desaparece para dar paso a lo nuevo. Así es la vida. Sentir nostalgia por el pasado, pese a que en ocasiones puede llegar a ser peligroso, es algo prácticamente inevitable. Al envejecer y comprobar cómo el mundo que conocíamos ha cambiado, es casi imposible no mirar atrás con cierta melancolía, recordando los momentos en los que éramos nosotros quienes quemábamos las calles y cerrábamos los garitos.

Recordamos, por ejemplo, la ropa que llevábamos entonces, la moda que marcaba las tendencias, los garitos que frecuentábamos y los amigos que nos acompañaban en nuestras gestas, y también las películas y series que veíamos en televisión.

¿Alguna vez te ha preguntado tu hijo o nieto qué era lo que veías en la tele cuando eras joven? Si es el caso, hoy te traemos una lista bien cargadita de nostalgia con algunas de las series que marcaron la infancia y adolescencia de la generación boomer, es decir, de aquellos nacidos entre 1946 y 1964 para que puedas rememorar esas tardes pegadas a la televisión y darle una pequeña clase de historia. Al menos, de historia audiovisual.

Bonanza

Una de las series que marcaron la historia de la televisión y de un género concreto: el western. Emitida entre 1959 y 1973 en la cadena estadounidense NBC, Bonanza fue la primera serie con capítulos de una hora de duración que se grabó y emitió a todo color por televisión y una de las ficciones más populares de la época, manteniéndose durante años en el ranking de emisiones más vistas de Estados Unidos.

En sus catorce temporadas, Bonanza narró la vida diaria del tres veces viudo Ben Cartwright, interpretado por Lorne Greene, y sus tres hijos, Adam Cartwight (Pernell Roberts), Eric Cartwight (Dan Blocker) y Joseph Francis (Michael Landon), en “La Ponderosa”, un rancho de 2.500 km2 situado en la costa oeste del Lago Tahoe, en Nevada. Con tramas sencillas, centradas muchas veces en la protección del rancho familiar, una exaltación de los valores familiares y una buena dosis de tiros y puñetazos, la serie conquistó a millones de personas en todo el mundo, convirtiéndose, así, en una leyenda de la pequeña pantalla.

Curro Jimenez

Si hay una serie que mantuvo a los españoles pegados a la pequeña pantalla durante los años 70, esa fue Curro Jimenez, una ficción creada por Antonio Larreta y emitida en TVE entre 1976 y 1978.

Basada en el bandolerismo andaluz del siglo XIX y, en concreto, en la figura de Andrés López, un bandolero conocido como el barquero de Cantillana, la serie narra las aventuras del bandolero Curro Jiménez (interpretado por Sancho Gracia) y sus tres acompañantes (El Estudiante, interpretado por Pepe Sancho, el Algarrobo, interpretado por Álvaro de Luna, y el Gitano, personificado por Eduardo García) en la Andalucía de la Guerra de la Independencia.

Con capítulos independientes en los que la ficción se combina con sucesos que ocurrieron en realidad, un espíritu inspirado en la leyenda de Robin Hood, tintes de western y un fotografía cuidadísima que sacaba todo el encanto a sus fantásticas localizaciones, entre las que se encontraban la Serranía de Ronda, Doñana o el Cabo de Gata, Curro Jimenez revolucionó la televisión nacional. Como curiosidad, en 2020 La 2 decidió recuperar la serie para su parrilla veraniega y logró reunir, de lunes a viernes, a más de 400.000 espectadores deseosos por revivir la historia de este icónico bandolero.

Colombo

Además de westerns, uno de los géneros más populares de la televisión durante los años 70 fue el policíaco, pero de entre todos los agentes y detectives que habitaban la pequeña pantalla, nunca hubo ninguno tan popular como Colombo, el personaje interpretado por Peter Falk que da nombre a una de las series más famosas de la década.

Creada por Richard Levinson y William Link y emitida entre 1971 y 1978 en la cadena estadounidense NBC, la serie sigue al teniente Colombo, un desaliñado detective del departamento de policía de Los Ángeles capaz de resolver los crímenes más perfectos sin utilizar la violencia ni ningún tipo de arma. A diferencia de otras series del estilo, los capítulos de Colombo comenzaban mostrando tanto a la víctima como al asesino, que normalmente pertenecía a las altas esferas, pero el público se quedaba enganchado esperando ver cómo Colombo lograba desentrañar estos crímenes aparentemente perfectos.

La Casa de la Pradera

Otra serie que mantuvo a toda la España de los 70 pegadita a la pequeña pantalla. Basada en la saga de libros homónima escrita por Laura Ingalls Wilder, La Casa de la Pradera sigue las andanzas de los Ingalls, una familia de colonos que se estableció en el Medio Oeste de Estados Unidos en la década de 1870.

Protagonizada por Michael Landon, quien también fue productor de la serie, La Casa de la Pradera fue un gran éxito que permaneció en la pequeña pantalla entre 1974 y 1983. Hoy en día se la conoce como un ícono de la historia de la televisión, y aún permanece en la memoria de aquellos que crecieron entre los años 70 y los 80.

Dinastía

Cerramos esta pequeña lista con Dinastía, una de las series de televisión más populares de la década de los 80. Creada por matrimonio Richard y Esther Shapiro y emitida entre 1981 y 1989 en el canal estadounidense ABC, Dinastía se centra en las vicisitudes de una poderosa familia, los Carrington, y tiene todos los ingredientes de un buen culebrón: romance, drama, rivalidades entre hermanos, celos, intriga, poder, lujo y una sensacional villana encarnada por Joan Collins. Vamos, que lo tenía todo para mantenernos pegados a la pantalla.

Como curiosidad, en 2017 la CBS estrenó su propio reboot de la serie. La nueva Dinastía, que puede verse en Netflix, lleva ya cuatro temporadas y ha sido renovada para una quinta. Y es que donde esté un culebrón, que se quite todo lo demás.