Subastado un Rolex Daytona de oro que cuesta tanto como un piso de lujo

  • Aunque parezca mentira, muchos relojes se revalorizan con el tiempo, llegando a venderse en subastas por encima del millón de euros

  • Los Rolex son algunos de los más codiciados, esas piezas limitadas sobre las que los coleccionistas siempre están al acecho

La relojería de lujo es un mundo apasionante al que muy pocos tienen acceso pero al que muchos otros tienen que conformarse con observar desde fuera como meros espectadores mientras millonarios pujan cifras estratosféricas por esas piezas que nos encantaría llevar en la muñeca. Porque sí, los relojes de lujo cuestan lo suyo, pero esas piezas antiguas o limitadas que salen a subasta pueden llegar a cifras millonarias que no todo mortal puede pagar. Esto es lo que ha ocurrido hace apenas unas semanas con uno de los Rolex Daytona más top, que ha sido subastado en cifras de récord.

Un reloj de oro puro

Que Rolex es la marca más elegante capaz de unir diseño, modernidad e identidad es algo indiscutible. La firma suiza cuenta con grandes piezas del tiempo que cualquier amante de los relojes querría tener en su colección. Y esta pieza recién subastada estamos seguros de que es una de ellas. Este reloj está inspirado en los coches Lotus de Fórmula 1 y su nombre oficial es Rolex Cosmograph Daytona Paul Newman “John Player Special” Referencia 6264.

La producción de este reloj no fue muy abundante, de ahí que sea tan especial, ya que solo se fabricó durante unos pocos años entre finales de la década de los 60 y principios de los 70, siendo la mayoría confeccionados en acero inoxidable, aunque algunas piezas se hicieron en oro amarillo de 18 quilates como la que se ha subastado. Según Shoteby’s, encargada de la subasta, tan solo existen 10 piezas de este reloj de oro, por ello cuando uno aparece la puja se convierte en todo un evento por ser un tesoro del que no se sabe si se tendrá una nueva oportunidad para hacerse con uno.

El aspecto de este reloj es una de las cosas que lo hace especial, completamente bañado en oro amarillo pero con un espectacular contraste con el negro de la esfera frente a las tres más pequeñas doradas y el bisel también negro que equilibra perfectamente la elegancia con ese toque ostentoso del oro. Y ojo, porque la subasta se esperaba que llegase a los 700.000€, pero el interés de varios compradores hizo que poco a poco la cifra fuese subiendo como la espuma hasta que se vendió por un total de 1’3 millones de euros, una cifra verdaderamente estratosférica hasta para los millonarios.

Subastas desorbitadas

Si esta cifra te ha parecido excesiva, en 2017 también se subastó otro Rolex, el Daytona de Paul Newman que el actor lució en su muñeca durante años y que se caracterizaba por sus tres esferas negras dentro de una blanca donde se podía leer Daytona en rojo con una caja de acero inoxidable. La cifra de su subasta llegó a los 17.752.500 dólares, es decir, más de 15 millones de euros en solo 12 minutos de puja. De esta manera el Rolex del actor se convirtió en el reloj más caro vendido en una subasta.

El reloj fue un regalo de su esposa, el cual utilizó en numerosas carreras hasta que en los años 80 se lo regaló al novio de su hija. Tras meditarlo, lo sacaron a subasta junto a la casa Phillips Auction House con el fin de donar parte del dinero a la fundación de caridad que el actor fundó en su día.

El mundo de la relojería de lujo es apasionante ya no solo por las novedades que las firmas más top traen al mercado, también por todas esas joyas legendarias que llegan a las casas de subastas y por las que los millonarios pujan parte de su fortuna para ampliar su colección de joyas míticas de gran valor que seguro que son únicas.

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