Píldoras antidesempleo: los cinco pasos de experto para buscar bien trabajo después de los 45

Después de casi 20 años trabajando en medios de comunicación, a José Luis Bezanilla le dieron la noticia que nadie quiere oír: estaba despedido. Con 41 años se enfrentaba no solo a volver a encontrar trabajo en un sector ya complicado de por sí, sino hacerlo con una edad que las empresas y los departamentos de Recursos Humanos ven con recelo. Lejos de derrumbarse, se reinventó como profesor de un certificado de profesionalidad para personas desempleadas y, además, ahora, ha escrito el libro 'Píldoras Antidesempleo tras la Cuarentena: Cómo buscar trabajo en 4 pasos'. Este es su caso y sus consejos.

"Primero no te lo crees, luego sientes rabia, a la que le sucede la tristeza y finalmente terminas por aceptar tu situación y es cuando comienzas a tomar las riendas, dejas de ser una víctima y empiezas a hacer todo lo que está en tu mano para salir de esa situación", dice.

"Los dos primeros meses fueron muy duros. Mi edad, 41 años, y el sector de la comunicación en crisis, no eran precisamente factores que favorecieran mi 'vuelta al ruedo'. Superé el duelo postdespido con mucha ayuda del entorno y sobre todo con mucho esfuerzo. Realicé mi propio trabajo de autoconocimiento, localicé mis fortalezas, mis áreas de mejora y sobre todo mi objetivo profesional, hacia dónde quería ir. Decidí volver al mundo de la enseñanza que había sido mi primera experiencia laboral, y concretamente me formé en la docencia para el empleo", continúa.

Después de un año y medio de formación, Bezanilla consiguió empleo y desde entonces trabaja en diferentes programas como formador y orientador laboral, acompañando a personas desempleadas en su búsqueda de empleo facilitando herramientas para mejorar su empleabilidad. Y por eso, ahora, nos puede aconsejar para volver a la rueda del empleo una vez pasado el Rubicón de los 45.

Lo primero que hay que hacer, según Bezanilla, es "sacar brillo a la edad". Porque sienta fatal, como si de una patada te quisiera echar del mercado laboral. "En mi caso yo creía encontrarme en mi mejor momento laboral. Joven, con ilusión y sobre todo con mucha experiencia. Además nadie podía reprocharme que estaba obsoleto puesto que nunca he dejado de estudiar, de formarme y actualizarme, siempre trato de mantenerme 'fresco'", nos dice.

Por eso, cuando te sueltan un "eres mayor", lejos de verlo como una debilidad o una amenaza hay que ponerlo en valor y convertirlo en fortaleza. "La edad es experiencia, conocimiento, con los años se crean contactos que son fundamentales en cualquier trabajo y tenemos más tiempo para entrenar competencias como el trabajo en equipo, el liderazgo o la creatividad. Nos permite aprender de los errores para no volver a cometerlos y sobre todo podemos enseñar mucho a los más jóvenes. En el libro 'Píldoras Antidesempleo tras la Cuarentena' dedico precisamente un capítulo a cómo sacar brillo a la edad", explica.

"Sobre todo no perder la motivación y la ilusión. Es duro enviar currículums y que un algoritmo nos descarte sin conocernos solo por los dígitos de la casilla 'Edad'. Es por lo que tenemos que probar otras fórmulas, probar otras 'Píldoras Antidesempleo' que nos permitan llegar a la entrevista y que conozcan todo lo que podemos ofrecer con nuestra experiencia a las empresas", continúa Bezanilla .

"Los que tenemos una larga trayectoria profesional también contamos con una extensa lista de contactos. Lo primero que hice al quedarme en desempleo fue recurrir a mi agenda e informar a quienes creía que me podían ayudar mi situación en desempleo y mis ganas por trabajar. Hay que practicar el networking, acudir a talleres, charlas, jornadas o foros de empleo donde están las empresas de nuestro sector y a las que me puedo presentar directamente. Cuando tenemos una edad ganamos en las distancias cortas. También es muy importante tener competencias digitales, practicar la formación continua y estar al día de lo que se pide en nuestros puestos de trabajo, que nadie pueda reprocharnos que estamos obsoletos", explica.

La pandemia ha acelerado sin duda todo lo que tiene que ver con la digitalización. Buscar trabajo sin contar con estas competencias se ha convertido en misión imposible.

"La búsqueda se ha vuelto más tecnológica. Es fundamental contar con competencias digitales no solo para gestionar nuestra marca online en redes sociales. Los procesos de selección se han digitalizado, portales de empleo, webs corporativas a los que hay que subir los currículums, videoentrevistas, videocurrículums. Hasta la era Covid solo hacían entrevistas por videoconferencia puestos altos, directivos o personas que iban a trabajar al extranjero. Ahora las empresas están utilizando esta tecnología para entrevistar cualquier perfil. Es fundamental dominar programas de comunicación online", reflexiona el experto.

"Por otra parte, hasta la pandemia nosotros recomendábamos practicar networking acudiendo a foros de empleo, charlas, talleres o congresos afines al sector del candidato o candidata, puesto que el 80% de las ofertas de trabajo están ocultas y emergen en las relaciones y los contactos. Ahora eso es imposible. La única forma de relacionarnos con profesionales de nuestro sector son las redes sociales. Es por lo que debemos dar mucha importancia a la presencia en redes profesionales como Linkedin".

En un mundo en el que destaca el ámbito digital, nuestro experto incide en que hay una competencia que está por encima de todas: la capacidad de adaptación y de aprendizaje. La resiliencia. "En el momento actual en el que nos encontramos con un mercado laboral tan disruptivo, donde los trabajos cambian, las empresas evolucionan y las exigencias profesionales varían en poco tiempo, las empresas buscan profesionales que sean capaces de adaptarse lo antes posible a las nuevas funciones que requiere el puesto. También que se adapten lo antes posible a nuevos entornos y equipos de trabajo ya que cada vez más los proyectos se realizan de manera colaborativa donde la empatía, la comunicación, el liderazgo y la inteligencia emocional es fundamental".

Otra de las competencias más demandadas actualmente es la curiosidad. "Profesionales que innoven, que no teman lo desconocido y que quieran aprender cosas nuevas", nos chiva el autor de 'Píldoras Antidesempleo tras la Cuarentena: Cómo buscar trabajo en 4 pasos'.

Por último, las empresas también buscan, ante todo, "profesionales motivados y con ganas de aportar. 'Mándame una persona que sepa y que sea maja', nos piden a menudo a los que nos dedicamos a la orientación y selección".