Con la hipoteca al cuello: cómo pagar menos cuota, según la OCU

La nueva subida de de los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) inevitablemente conllevará un nuevo incremento del euríbor y, con ello, un aumento de las cuotas de las hipotecas a tipo variable que obligará a muchas familias a hacer malabares financieros para llegar a fin de mes.

Es muy posible el índice al que están referenciadas la mayoría de las hipotecas se sitúe en diciembre en torno al 3%, lo que no ocurría desde la crisis hipotecaria de 2008, lo que provocará que las cuotas que se revisen en los próximos meses podrían incrementarse en más de un 30% de media. En este sentido, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) tiene muy claro qué habría que hacer si hay dificultades para cumplir los pagos.

Alargar el plazo de amortización

Su alternativa recomendada es ampliar el plazo de devolución, es decir,  alargar el plazo de amortización de la hipoteca. "Tardarás más tiempo en pagarla, pero conseguirás reducir la cuota mensual y será más fácil de asumir", subraya.

Hay que tener en cuenta que la rebaja de la cuota gracias a la ampliación del plazo de devolución de la hipoteca no es siempre la mejor opción para todos, ya que es menor cuanto mayor sea el plazo pendiente y en el caso de hipotecados recientes es posible que no tengan la posibilidad de ampliarlo.

Para ilustrar las ventajas de la ampliación, la OCU pone este ejemplo: un préstamo hipotecario con un capital pendiente de 80.000 euros y un interés del 2%, cuyo plazo se amplía 5 años sin cambiar ninguna otra condición:

  • Si quedaran pendientes 10 años, la cuota sería de 736,11 euros. Ampliando el plazo cinco años, "la cuota se reduciría hasta 514,81 euros, lo que supone una rebaja de 221,30 euros al mes", subraya la OCU.
  • Si quedaran pendientes 15 años, la cuota sería 514,81 euros. Ampliando el plazo cinco años más, "la cuota se quedaría en 404,71 euros, por lo que la rebaja sería solo de 110,10 euros al mes".

Riesgos y sorpresas

La OCU también recuerda que alargar la hipoteca puede conllevar riesgos y sorpresas, ya que el banco podría aprovechar para modificar, a peor, las condiciones del contrato. ¿Cómo? Cambiando el tipo de interés o el diferencial que tienes contratado, o obligándote a contratar un producto adicional como un seguro de vida.

"Pan para hoy y hambre para mañana"

Aunque prolongar el plazo supone rebajar el importe de la cuota mensual, al aumentar el número de años y pagar durante más tiempo el préstamo, a la larga, se acaban abonando más intereses. Es decir, supone incrementar la deuda de los consumidores. En ese sentido, Asufin, la asociación de usuarios financieros, considera que alargar el plazo de las hipotecas, con carencia o moratoria temporal de intereses, es "pan para hoy y hambre para mañana".