¿Pelo envejecido tras el verano? Cuatro consejos para rejuvenecerlo

  • El pelo no tiene arrugas ni flacidez, pero sí es sensible a la pérdida de densidad y de volumen, un fenómeno que se da cuando las células del cabello producen menos keratina

  • Los especialistas estiman que el 25% de las mujeres sufren la mayor caída de pelo durante la menopausia

  • El verano es malo para el cabello: los rayos UV y el calor secan el pelo y lo hacen más frágil

Al igual que la piel, el cabello se ve afectado por el envejecimiento. Es cierto que no tiene arrugas ni flacidez, pero sí es sensible a la pérdida de densidad y de volumen. La razón es que cuando envejece, las células del cabello producen menos keratina, su principal proteína. Menos keratina significa menos volumen, brillo y belleza. La fibra capilar es más fina y menos resistente a las agresiones exteriores.

Peor durante la menopausia

En el climaterio, con ciclos más irregulares, y durante la menopausia, con el desequilibrio hormonal, la caída del cabello se acelera. Los especialistas estiman que el 25% de las mujeres sufren la mayor caída de pelo en ese momento de sus vida. Incluso, aunque no haya caída, lo habitual es que el folículo capilar se debilite y que comiencen a darse zonas donde se ve menos pelo.

La perspectiva de perder cabello o de tenerlo en mal estado no es agradable, sobre todo si se une a un aumento de arrugas y, en general, a un mal aspecto de la piel. Pero hay maneras de detener este envejecimiento o, al menos, de paliarlo. Antes de ponernos manos a la obra, lo primero es ver qué es malo para nuestro pelo.

¿Qué le sienta mal al cabello?

Algunos factores externos acentúan el envejecimiento capilar. De hecho, hay gestos simples que pueden propiciarlo.

  1. Sol y calor. Los rayos UV y el calor secan el pelo y lo hacen más frágil. El pelo entonces se muestra débil, poco manejable y sin brillo. La solución es protegerlo del sol todos los días (y no solo en la playa) con sprays que contengan filtros UV. Además, el champú puede ser un aliado. Hay champús enriquecidos con anti-oxidantes, vitaminas y minerales, que funcionan como un escudo contra los radicales libres. Otros contienen elementos nutritivos que benefician su salud. En caso de cabellos muy secos, es bueno utilizar aceites desde la raíz. Lo mejor es aplicarlo, a lo largo de todo el cabello o solo en las puntas, dejarlo que penetre durante 15 minutos (incluso toda la noche si el problema es grave) y lavar después el pelo.
  2. Contaminación. Es mala para la salud, pero, en el caso del pelo, lo deja frágil y lo predispone a la caída. Utilizar champús exfoliantes para eliminar esta contaminación y las siliconas de ciertos productos capilares puede ser muy beneficioso. Si se practica natación de manera regular, siempre hay que utilizar gorro de baño y humedecer antes los cabellos con un chorro de agua mineral. Esto hará que el propio cabello se proteja del cloro.
  3. Permanentes, coloraciones y tratamientos agresivos. Aunque las fórmulas de estas técnicas se han mejorado para minimizar los efectos secundarios, cada tratamiento químico que trate la estructura capilar, seca el pelo y lo hace más frágil. Los cepillados continuos agravan el problema, así como determinados peinados. Para evitarlo, optemos por un corte de pelo que respete el tipo y el movimiento del cabello y que no necesite secadores, rulos o pinzas. Nuestro pelo nos lo agradecerá y nuestra agenda, también, porque ganaremos tiempo y energía.
  4. Tabaco. Un cigarrillo contiene más de 2.500 sustancias químicas, algunas tan perjudiciales como cadmio y arsénico, además de pesticidas. El pelo almacena todo lo que nuestro cuerpo absorbe, incluida la nicotina. Además, el tabaco reduce la circulación de la sangre por el cuero cabelludo y la absorción de aminoácidos, vitaminas y oligoelementos que intervienen en su crecimiento.

¿Qué es bueno para el pelo?

El pelo es un barómetro extremadamente fiable de la salud general. En el caso de la menopausia, el desequilibro hormonal entre estrógenos y andrógenos (que, a su vez, interviene en el hirsutismo) puede desencadenar la tormenta perfecta capilar. ¿Hay manera de impedirla? Sí, y no se trata de costosos tratamientos.