El pelo no solo sufre en verano con el sol, la sequedad, el cloro, y la sal del mar. El invierno tampoco es la mejor época para el cabello, ya que también se estropea. El frío, la lluvia, la nieve y la humedad del ambiente provocan lesiones en el pelo que hacen que se abran las puntas, se seque, se encrespe y no luzca brillante y sano.

En esta época del año el pelo tiende a estar deshidratado, más débil, se rompe fácilmente y que parece más apagado, sin brillo y mustio. A esto hay que sumarle los cambios bruscos de temperatura, el calor en interiores por la calefacción, los gorros, que nos duchamos con agua muy caliente o que usamos más el secador, las agresiones son continuas durante toda la estación. 

El viento, la nieve, la humedad y la lluvia podrían contribuir a que tu cabello se debilite y pierda hidratación, elasticidad y brillo. Contar con una buena rutina de cuidado y utilizar productos recomendados ayuda mantener la melena cuidada. Es fundamental saber cómo cuidar el pelo correctamente para que siga estando sano, flexible, hidratado y bonito.

Estos son los 8 aspectos que tienes que tener en cuenta para proteger el cabello en invierno:

Los expertos de Olistic recomiendan “optar por champús suaves, sin sulfatos y específicos para tu tipo de cabello. Tanto si tienes un cabello seco o graso, como un cuero cabelludo sensible, hay que buscar fórmulas hidratantes que contrarrestan la sequedad invernal. Por otro lado, sería recomendable evitar o reducir la frecuencia del champú seco.

El champú seco se presenta como una solución práctica durante la temporada estival para eliminar la acumulación de suciedad y grasa en el cabello sin recurrir al lavado tradicional con agua, sin embargo, al estar formulado para absorber el exceso de aceite, especialmente en las raíces y el cuero cabelludo, su uso puede resultar más propenso a causar deshidratación y rotura en el cabello en invierno durante los meses más fríos.

Tras el lavado con los productos correspondiente para cada tipo de cabello, llega otra de las preocupaciones, el secado, tan importante como el lavado. Hay que evitar frotar con fuerza o envolverlo en la toalla. Lo mejor es presionar suavemente con la toalla para absorber el exceso de agua, esto minimiza la fricción y evitar que se rompa. Además, los expertos recomiendan secar el palo al aire, evitando la exposición excesiva al calor, reduciendo la probabilidad de daño térmico. 

Si no tienes la posibilidad de secar el pelo al aire libre, lo mejor es utilizar un protector térmico justo antes del secado. Esto es fundamental para evitar que el calor del secador dañe la cutícula del cabello. El producto se debe aplicar de manera uniforme, pero sobre todo en las puntas.

El calor excesivo del calor es uno de los mayores enemigos del pelo, por eso los expertos recomiendan ajustar la temperatura a niveles moderados.  “El calor excesivo puede despojar al cabello de su humedad natural, haciéndolo propenso a la fragilidad y la rotura”, aseguran desde Olistic. 

La distancia del secador de pelo con secador también es básica. “Lo recomendable sería una distancia de al menos unos 15-20 centímetros. Esto previene el contacto directo y minimiza el riesgo de daño térmico”, aseguran desde la empresa de cuidado capilar. 

Durante el invierno, la hidratación el cabello es el gran aliado. Existen aceites y sérum que aplicados antes de dormir aportan una capa adicional de hidratación a tu cabello en invierno. Aceites como el de argán o coco pueden ser beneficiosos, especialmente en las puntas, para cuidar el pelo en invierno.

En el caso de las mujeres y los hombres con pelo largo, el mayor enemigo invernal en la calle es el viento, pues la batalla contra los nudos está perdida. Los enredos generan la rotura de la fibra capilar al intentar deshacerlos. Recoger el pelo puede ser la solución y lo mejor es utilizar gomas de pelo elásticas suaves como las de terciopelo, seda o tela para evitar enredos. 

“La generación de electricidad estática en el cabello ocurre cuando la humedad no logra penetrar en la fibra capilar. Mantener el cabello hidratado es la mejor manera de lidiar con la electricidad estática. Una opción para evitar la electricidad estática y cuidar el pelo en invierno es usar un humidificador para rehidratar el aire de tu hogar”, afirman desde Olistic.