¿Por qué Karlos Arguiñano perdió su única estrella Michelin?


Karlos Arguiñano recibió la única estrella Michelin de su carrera en 1982 por su trabajo en su restaurante de Zarautz, pero le fue arrebatada en 1998
Durante uno de sus programas de cocina, el popular chef vasco afirmó que el motivo por el que perdió la estrella fue por su trabajo en televisión
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Karlos Arguiñano es uno de los chefs más populares y queridos de nuestro país. Desde su debut en televisión en la década de los 90 en la ETB, la cadena pública del País Vasco, el guipuzcuano ha acompañado a multitud de familias con sus exitosos programas de cocina, en los que cada día deleita a su fiel audiencia con nuevas recetas y su personalísimo sentido del humor.

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La popularidad televisiva que Arguiñano ha conseguido le ha abierto también la puerta al mundo editorial, donde se ha convertido en un auténtico fenómeno de ventas gracias a sus libros de cocina, que ya acumulan más de 400.000 ejemplares vendidos. Además, a lo largo de su carrera también ha aparecido en multitud de anuncios y ha llegado, incluso, a hacer sus pinitos en el cine, donde ha aparecido en tres películas de finales de los 90 y principios de los 2000. Sin embargo, en su exitosa carrera profesional hay una pequeña gran ausencia: la estrella Michelin, un galardón que tuvo y que le fue arrebatado poco después de empezar a trabajar en televisión.
¿Por qué Arguiñano perdió su estrella Michelin?
Aunque a Karlos Arguiñano se le conoce más por su faceta mediática, la realidad es que al inicio de su carrera el chef, que está considerado como uno de los impulsores de la nueva cocina vasca, también pudo presumir de haber alcanzado uno de los grandes logros del sector de la gastronomía: la estrella Michelin.
Este premio, que la Guía Michelin lleva otorgando a los restaurantes más destacados del mundo desde 1936, le fue entregado en 1982 por su trabajo en su restaurante de Zarautz, el actual Hotel Restaurante Karlos Arguiñano, uno de los locales mejor valorados por los usuarios según un estudio elaborado recientemente por la agencia Data Comunicación.

El restaurante, que abrió sus puertas en 1979 (once años después, en 1990, el negocio se amplió con la apertura del hotel), mantuvo esta estrella Michelin durante más de quince años, hasta que en 1998 se la quitaron de manera inesperada. Desde entonces, el famoso chef no ha vuelto a ser reconocido con este prestigioso galardón, y tiene claro el motivo: por su trabajo en televisión.
Así lo expresó hace unos años durante la emisión de uno de sus programas de cocina. Mientras cocinaba, el chef recordó el momento en el que él y Ramón Roteta, otro de los precursores de la nueva cocina vasca, obtuvieron la estrella Michelin y apuntó al motivo por el que no ha vuelto a recibir una en más de veinte años de carrera.
Mensaje claro de #Arguiñano “ Me quitaron una estrella Michelin por envidia “ pic.twitter.com/7NJhP4gZcY
— MASPITV (@TVMASPI) 3 de noviembre de 2020
“Ramón Roteta y yo llegamos a tener una estrella Michelin”, recordó, “y luego nos hicimos muy famosos y empezamos a trabajar en televisión y así y nos la quitaron”, añadió. “Qué envidias tiene la gente, sales guapo y no te aguantan”, ironizó con su particular sentido del humor.
El vasco, que tiene claro que el motivo por el que perdió la estrella fue por su trabajo en televisión, continuó compartiendo una reflexión con sus espectadores, en la que habló de lo extraña que le resultaba la situación. “Yo siempre pensé, jo, ¿cómo puede ser que me den en el 83 o 84 una estrella Michelin y, hala, cuando empiezo en el 90, 91 en televisión me la quiten? ¿Es que se me ha olvidado cocinar o qué?”, se preguntó, y acto seguido respondió: “¡Para nada!”.
A pesar de sus palabras, el cocinero ha manifestado en otras ocasiones que no le interesa conseguir una estrella Michelin. Lo hizo en una entrevista de 2018 con el periódico Cinco Días, en la que también afirmó que había perdido la estrella por su carrera televisiva. Durante la charla, el chef declaró que al principio le dio rabia la situación, pero que ahora no le gustaría recibir una. “Ya es tarde y no la necesito”, declaró. “Me ha compensado más la gente que Michelin, además de la presión que tienes por tener una estrella”, continuó. “Te puede hacer daño”.