Dónde degustar las mejores ensaimadas fuera de Mallorca

La ensaimada es uno de esos dulces que no necesitan presentación dentro y fuera de nuestras fronteras. Aunque muchas veces la duda surge a la hora de saber si se trata de una comida dulce o salada, pues ambas cosas que pegan. La ensaimada se ha convertido en todo un icono de Mallorca, como no podía ser de otra manera. 

Una ensaimada es una masa dulce elaborada a base de harina de trigo, azúcar, huevos, y el ingrediente que le da nombre, la manteca de cerdo, que en catalán se llama “saïm”. Es la reina por excelencia de desayunos, meriendas, comidas y cenas con amigos o en familia. Las ensaimadas no tienen límites, son como un lienzo en blanco sobre el que añadir todo tipo de productos. Aunque las originales tienen su origen en Mallorca, muchas son las pastelerías en la península que se han puesto las pilas para ofrecernos las mejores ensaimadas de Mallorca fuera de la isla. ¡Nuestra selección!

En 1956 y directo desde Mallorca se abrió el primer horno de ensaimadas en Madrid, en pleno Barrio de Salamanca, llamado Formentor. Este genuino “forn mallorquín”, que ahora regentan los hijos del fundador es toda una seña de identidad. Desde entonces hasta ahora, cuentan ya con varias pastelerías en la capital donde disfrutar de este dulce. 

Con nata, cabello de ángel, que el natural y artesanal se hace con calabaza y azúcar, con crema tostada, con chocolate, con frutas y hasta con sobrasada de Santanyí, la oferta es amplia y deliciosa. 

Corría el año 2020 cuando David y su mujer decidieron echar la imaginación a volar y crear uno de sus dulces más espectaculares, 'les maretes'.  “La ensaimada del amor, de la nostalgia, de la maternidad, del sentimiento, la ensaimada que también hace un guiño al nombre de mi hija Mar”, asegura el propio pastelero. Desde entonces no ha dejado de innovar y de fermentar masa de ensaimada.

Abrió las puertas en 1965 y desde entonces locales y turistas se asoman a sus puertas para probar una verdadera joya mallorquina. Su secreto es tratar las cosas a la antigua, tenerlo todo muy reciente y usar productos de primera calidad. De cabello de ángel, lisas, de sobrasada, nata, crema, chocolate o mazapán son su especialidad. 

Los dueños, desde hace más de sesenta años se dedican a la pastelería desde siempre. Para ellos, la calve de la ensaimada está en la fermentación de la masa, precisamente por eso, hay que reservar el dulce con al menos 12 horas de antelación. Entre sus especialidades están las ya clásicas chocolate con crema, crema catalana o pastelera, sobrasada, mazapán… no obstante, llevan años innovando con sabores como ensaimada fresh de limón y fresas o de After Eight. 

En esta cafetería se junta tradición y modernidad, pues a su bollería tradicional como son los croissants, ensaimadas, caracolas, napolitanas o cañas se le suma la bollería más innovadora como son los NY rolls, donuts rellenos de crema de pistacho, Kinder bueno o Nutella, muffin rellenos y mucho más. Para los más golosos también encontrarán crepes, gofres con Nutella, plátano o crema de Kinder bueno.

Su ensaimadas destacan por su sabor tradicional, una verdadera tentación artesanal.