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En las tardes de vacaciones seguro que tu máximo placer es sentarte en una terraza a contemplar la puesta de sol mientras tomas tranquilamente una copa de tu bebida favorita. Ron, ginebra, vodka o whisky, da igual cual sea, pero si eres de los que bebe esta última seguro que tienes un paladar particular, capaz de detectar cientos de matices en cada sorbo de tu bebida. Saber cuál es mejor es algo subjetivo, pues cada uno tiene sus sabores predilectos, pero por su aroma, sus años de envejecimiento en barricas o por cómo se ha producido, se puede saber su calidad. Para que tú mismo decidas cuál es el mejor, te traemos algunos de los mejores whiskies, así podrás probar y dar tu veredicto final.
Esta marca de whisky es una de las más famosas en todo el mundo y también de las más consumidas. Se podría decir que una de sus joyas de la corona es este whisky de malta que ha envejecido 18 años en barricas de jerez. Los Cardhu acostumbran a ser bebidas suaves, pero esta en especial es bastante dulce, con sabores en el paladar que pasan por el chocolate, el caramelo o la miel, aunque también tiene un punto picante que le da ese toque rompedor que necesita.
Entre los whiskies de malta de 12 años difícilmente se encontrará una versión como esta de Macallan, una bebida envejecida en barricas de roble americano pero que cuentan con un toque a jerez que es lo que hace este whisky tan especial. Sus sabor es suave, aunque algo picante al final con ciertos toques a vainilla en su degustación, que también se perciben en su aroma junto a algunos cítricos como el limón o frutas más dulces como el melón.
El whisky japonés es una de esos placeres para el paladar que muchas personas desconocen, por eso esta botella de Hibiki no podía faltar. Está hecho a partir de la mezcla de más de 12 whiskies de malta en las destilerías de Yamazaki y Hakushu. Es una bebida ligera y fresca, que ha envejecido en barricas de roble japonés, por lo que es normal esas notas aromáticas a pino o flores que perciben en su aroma y que contrastan con ese final algo picante en el paladar.
Este whisky es para paladares ya algo experimentados, un auténtico malta escocés de la isla Islay con ese toque ahumado. Durante 16 años, el caldo de cada una de sus botellas ha envejecido en barricas de roble dando ese sabor a humo y la sequedad que le caracteriza, un sabor muy distinto a los otros whiskies más dulzones. Es un sabor intenso, por eso, si te estás iniciando en el mundo del whisky puede que no sea la mejor opción para empezar, pero para los más apasionados es, sin duda, una de las opciones favoritas.
Este whisky es uno de los más especiales de la marca por su origen, siendo un whisky puro de malta escocés originario de la isla de Skye. El envejecimiento de este caldo se lleva a cabo en barricas americanas tostadas con una combinación entre maltas más maduros y otros más jóvenes para conseguir ese sabor ahumado, que mezcla el humo de leña con el agua de mar y ese final algo picante al paladar. Sin duda, una botella de este Talisker es un regalo perfecto para cualquier amante de esta bebida.
Esta marca de whisky es una de las más famosas en todo el mundo por sus distintas categorías, pero si hay una que destaca sobre las demás es la Blue Label, un whisky elaborado a partir de algunos escoceses de malta y de grano maduro. Su sabor es toda una experiencia sensorial, con ese toque ahumado al principio pero que según pasa por el paladar se convierte en algo más dulce, recordando a la miel para terminar con un punto picante que se combina con madera.
Y para terminar, un whisky que ha madurado durante 18 años, siendo una mezcla de algunos de los whiskies más raros y especiales de Escocia, de ahí que sea tan particular y con el que se pueden percibir hasta 85 notas de sabor distintas. Es muy distinto a otros, con un aroma a chocolate negro y frutos secos que en boca se convierten en un sabor ahumado con un final algo más dulce de lo que se espera.