'Tortilla de patatas fit', una receta para seguir disfrutando de tu plato favorito sin sumar tantas calorías

  • Una tortilla tan rica como las tradicionales pero con menos calorías.

  • Esta receta es totalmente fit, y muy reducida en calorías, simplemente por evitar los fritos, pero al llevar patata, cubre una buena porción de nuestros hidratos de carbono diarios.

La tortilla de patatas es uno de esos platos tan típicos en España y que nos encanta, pero que cuando nos toca hacer dieta no podemos disfrutar por la cantidad de calorías que contiene. Si te gusta la tortilla de patata tradicional pero, además, quieres cuidarte un poco y consumir menos grasas, tenemos la solución: la receta para hacer una tortilla de patatas light o baja en calorías. ¿Qué os parece si nos hacemos una tortilla en la que cada trozo solo va a tener 43 calorías? Suena bien, ¿verdad?

La elaboración es prácticamente la misma que la tortilla de siempre, solo que esta vez, no freiremos las patatas en aceite y así evitaremos toda la grasa que ello conlleva. En su lugar, vamos a cocer las patatas en agua hirviendo, un proceso bastante más saludable y sencillo.

¡Son todo ventajas! A penas se mancha la cocina, es más rápida de hacer que la tortilla tradicional, se usa poco aceite con lo que se digiere mejor y en cuanto al sabor, no es lo mismo que la que hacemos friendo la patata pero se le parece mucho y la diferencia, compensa.

Esta tortilla acompañada de una buena ensalada puede ser el almuerzo perfecto de cualquier día, si de postre tomáis una pieza de fruta tendréis una comida equilibrada y saciante.

Ingredientes

- 400 gramos de patatas

- 3 o 4 huevos grandes

- Aceite de oliva virgen

- Sal

Preparación

Ya que no podemos usar ingredientes "light" para hacer la tortilla de patatas, vamos a emplear un modo de preparación que haga que el resultado final de la receta tenga menos calorías que la receta tradicional. En este caso lo conseguimos sustituyendo las patatas fritas por patatas cocidas, que tienen muchas menos calorías, pero dan buen resultado en cuanto al sabor de la tortilla una vez hecha.

Pelamos y lavamos las patatas. Después las cortamos en trozos en forma de cuadraditos del mismo tamaño aproximadamente. Cuando las tengamos ya listas, las echamos sobre un recipiente apto para microondas, que sea amplio, para que podamos extenderlas bien. Las sazonamos un poco y echamos un chorrito de aceite de oliva por encima y cubrimos el recipiente con papel transparente, pinchando por encima varias veces para que el vapor vaya saliendo.

Metemos ese recipiente ya preparado en el microondas y horneamos a 750W durante unos 8-9 minutos más o menos. Las patatas estarán tiernas pasados esos minutos, aunque si crees que necesitan algún minuto más, vuelve a ponerlas a la misma potencia, ya que puede variar de un microondas a otro y, sobre todo, de una patata a otra. Cuando estén listas, sácalas del microondas y quita el papel transparente.

Vamos a batir los huevos y cuando las patatas se enfríen un poco, los añadimos a las mismas y mezclamos bien. Ponemos la sartén con la que prepararemos la tortilla de patatas a fuego lento y con un poco de aceite de oliva en el fondo, y cuando se caliente vertemos las patatas y el huevo en la misma y comenzamos a hacer la tortilla.

Una vez que esté lista por debajo, con el huevo cuajado pero sin quemarse, vamos a darle la vuelta para hacer la otra cara, ayudándonos con un plato llano y grande o bien un girador de tortillas, un utensilio ideal para estos casos. Dejamos que se haga bien por fuera y por dentro y servimos en caliente para disfrutar de esta rica tortilla de patatas light, con muchas menos calorías que la de toda la vida.

Trucos para hacer una tortilla jugosa

  • Añadirle la medida de ½ cáscara de huevo de agua a los huevos a la hora de batir y no batirlos en exceso, ya que si se baten demasiado y sale mucha espuma queda una tortilla más seca.
  • No añadir nunca leche a los huevos, ya que con el contacto con el huevo y el calor, se cuaja demasiado y el resultado es un huevo seco, no meloso.
  • Se le puede añadir un poco de calabacín a la patata cuando la estamos cocinando, aportará color a la tortilla, no se notará su sabor pero la tortilla gana en jugosidad. Si añadimos mucho, suelta tanta agua que es imposible cuajar la tortilla.

El mito del sándwich saludable para cenar

Muchas veces podemos pensar que con un sándwich ligerito para cenar nos va a ir mejor que tomarnos un pincho de tortilla de patata 'fit' que hagamos en casa, pero nada más lejos de la realidad. Como puedes ver en este vídeo, la opción del sándwich puede ser más perjudicial que beneficiosa si lo que quieres es perder peso.