Separarse cuando uno quiere y el otro no: claves para hacer el menor daño posible

  • Si tienes claro que quieres separarte, escoge el momento para decirlo: solos y en un ambiente tranquilo

  • Evita los sentimientos de culpabilidad y trata el tema de manera positiva: se trata de un cambio de etapa

  • Para el reparto económico, es necesario que ambos miembros de la pareja estén en plenas facultades

Poco a poco, se va sabiendo algo más de la separación de Gerard Piqué y Shakira. Al parecer, él quería separarse hace algún tiempo y ella se resistía. Como en tantas parejas, la ruptura amorosa no se vive de igual manera. La discrepancia en el momento del adiós da lugar a momentos duros. ¿Cómo actuar? ¿Cómo hacerlo sin causar daño?

El timing propicio: un momento tranquilo

Aunque parezca una obviedad, antes de comunicarle formalmente a tu pareja que te quieres separar, tienes que tener claro que es una decisión irrevocable. A partir de ahí, busca un momento propicio. Claramente, no hay que sacar un tema así antes de un momento complejo o delicado: ni horas bajas, por ejemplo, por la enfermedad de alguien ni en puntas de trabajo o antes de un evento familiar o social.

El momento oportuno debe ser aquel en el que estéis tranquilos y receptivos para escucharos. Hacerlo dentro de casa, puede hacer que el drama se desborde, así que puede funcionar estar en un espacio público, donde debamos estar necesariamente más serenos.

Escoger las palabras: sin culpabilidad

Al expresar el deseo de separación hay que dejar claro que no se trata de una decisión frívola, sino que está meditada y pensada. Si no se hace así y se deja una puerta abierta a la reconciliación, estaríamos dando falsas esperanzas, lo que implica el sufrimiento de la otra parte.

En esta tesitura, es probable que la otra persona se sienta culpable o crea que ha hecho algo mal en la relación. Hay que dejar claro que se trata de un cambio de etapa vital para no buscar culpables. El objetivo es dejar la autoestima alta y practicar la escucha activa, sin incurrir en lenguajes o comportamientos violentos.

Explicárselo a los hijos: siempre seréis una familia

Es probablemente la parte más delicada. Es fundamental que a los hijos les digamos que vamos a seguir siendo una familia Es también importante que los niños y adolescentes que compongan la familia estén juntos y que se les comunique la noticia a la vez y al mismo tiempo. Es de la misma manera fundamental decirles a los hijos que ellos no tienen responsabilidad alguna en el divorcio.

En cuanto a la familia, se puede escoger al miembro que sepamos que lo va a procesar mejor para que haga de 'sherpa'; es decir, vaya comunicando al resto de miembros. También hay que pensar que algunas personas pueden querer despedirse de su familia política o bien establecer nuevas dinámicas de relación para seguir viendo a sus yernos y nueras o nietos.

Con los amigos, depende del tipo de vínculo. Lo normal es que cada miembro de la pareja se lo comunique a sus amigos. En este caso, es normal que quien se resiste a la separación evite el momento, pero la realidad sentimental terminará imponiéndose.

Reparto económico: respetar los ánimos

Es otro tema complejo por lo que implica. Cuando un miembro de la pareja se resiste a la separación, hablar de dinero es aún más complicado. Lo ideal es que se llegue a un acuerdo antes de solicitar el divorcio. La idea es primero intentar la conciliación. Y si no se llega a un acuerdo, hay que solicitar la ayuda profesional de un abogado.

Normalmente, la parte económica es la última en abordarse porque requiere que la pareja esté en plenas facultades. Cuando las dos partes han asumido que la ruptura es inevitable, puede hablarse del reparto económico. Pero si se está en las primeras fases del duelo, cuando aún hay negación e intentos de reconciliación, lo razonable es no hablar del tema en ese momento porque el más débil puede sufrir.