Le gusto a la pareja de uno de nuestros amigos y es incómodo: ¿cómo actuar?

  • "Nunca hay que hablarlo con la pareja de la otra persona: nos vería como un roba-maridos o roba-mujeres"

  • Lara Ferreiro, psicóloga: "Hablarlo en grupo puede ser como dejar caer la bomba de Hiroshima"

  • "Hay que sacar el tema de manera indirecta y decir que uno quiere respetar la amistad y las parejas creadas"

Lo hemos notado e incluso lo hemos vivido. Ese interés de un miembro de tu grupo de amigos por otra persona del grupo, cada uno con su pareja. Hay una corriente de admiración mutua, que en el caso de uno de ellos quiere ir más allá. Estas historias de atracción por las parejas de los amigos son frecuentes. Y pueden ser muy incómodas para el que no tiene un interés romántico. También pueden ser letales para el grupo de amigos. Estamos ante uno de los temas más complejos de las relaciones personales. Pero, antes de ver cómo 'atacarlo', es necesario confirmar que hay más que amistad en esa relación.

Señales de fuego

En un tema de tal complejidad es importante poner nombre a lo que nos pasa. ¿Esta persona a la que le interesas tanto es solo simpática y atenta o tiene otros objetivos? Para la psicóloga y terapeuta de pareja Lara Ferreiro hay siete señales significativas.

  1. Se fija mucho en ti. Tiene la típica mirada depredadora.
  2. Te manda mensajes-excusas para saber de ti.
  3. Se salta a su pareja por whatsapp en temas comunes.
  4. Quiere quedar contigo a solas. Intenta propiciar encuentros a dos.
  5. Es demasiado galante. Lanza demasiados piropos.
  6. En broma, propone algunos temas de cariz sexual.
  7. Sondea continuamente si se está dispuesto a vivir una aventura

La escala de la incomodidad

Plantear o no el tema a la persona involucrada, depende de tu nivel de incomodidad. "En una escala de 0 a 10, siendo 10 el máximo, cada persona debe pensar en qué tramo está. Si siente que está en el 5 y que lleva con esa sensación de tres a seis meses, debe hablar con el interesado", señala Ferreiro.

Y ahí comienza el problema: ¿cómo hacerlo? "Siempre de manera inteligente e indirecta. Por ejemplo, se puede empezar con eso de "He leído que después de unos años de matrimonio, se puede sentir atracción por otras personas, ¿te ha pasado?", sugiere la experta.

Si la respuesta es que sí, nos situamos en la posición contraria: no es tu caso, tú aprecias a tus amigos, pero nada más. Puede ser que la conversación dé lugar a otras variantes y se quiera ir más allá. En ese caso, hay que ser más contundente. "Ahí hay que decirle que quieres respetar las parejas y respetar la amistad. Es mejor que se olvide del tema porque te tiene idealizada o idealizado, no te conoce como pareja", asegura esta psicóloga, para quien puede ser normal que haya cierta atracción y confundir amor y amistad, siempre y cuando se establezcan las fronteras. "Está bien validar las emociones del otro poniendo límites", explica.

¿Hablar del tema directamente?

Si la persona no ha dicho explícitamente que se siente atraído por ti, hablar del tema en base a las señales es una de las líneas rojas que no hay que traspasar. "Nunca hay que decir directamente eso de "sé que te gusto". Lo va a negar, la persona afectada va a quedar mal y se va a creer mal ambiente. Siempre hay que hacer preguntas inversas para que esa persona no se sienta atacada y esté a la defensiva", asegura Ferreiro.

¿Hay que hablar con la otra pareja?

Es otra de las líneas rojas. "Tampoco hay que hablar con la pareja de la persona que siente el interés por ti. Posiblemente no te crea y te vea como una roba-parejas o una persona celosa. Hay que hablar con la persona en concreto de una manera sutil", señala Ferreiro. La psicóloga también establece una distinción entre los amigos íntimos o no. "En ese caso hay que valorar la parte ética. Si no está entre tu entorno próximo, es mejor hablarlo solo con la persona que tiene idealizada. Si amplías el círculo, es como dejar caer la bomba de Hiroshima: el grupo puede disolverse", argumenta la experta.

¿Y nuestra pareja? "Los manuales dicen que hay que decir la verdad, pero puede crear muy mal ambiente. Es mejor tener una conversación tranquila para reestructurar los sentimientos y hacer ver que sois buenos amigos, pero solo eso", resume esta psicóloga.