Llega el 'coronasutra': posturas sexuales seguras y cómodas para evitar el contagio

  • El coronasutra habla de siete posturas en las que se mantiene una distancia de más de un metro y medio entre las bocas

  • En Uppers, además de las que son óptimas para reducir el contagio, destacamos las más cómodas

  • El 68% de los españoles afirma haber practicado algún tipo de juego erótico online durante la cuarentena

Distancia de seguridad. Mascarilla. Guantes. Higiene extrema. Son las recomendaciones para evitar contagiarse con el Covid-19 pero, ¿qué pasa cuando hablamos de sexo? Placer. Cercanía. Complicidad. Tres cosas que parecen ser incompatibles con la situación actual. Si hablamos de sénior, hablamos además de una población especialmente preocupada en no contagiarse por ser la más afectada por la pandemia.

En un momento en el que, a priori, los casados están disfrutando más del sexo que los solteros, la imaginación se ha disparado y ha surgido en redes sociales una adaptación del Kamasutra a estos tiempos de pandemia. Hablamos con un sexólogo sobre este denominado 'coronasutra'.

Qué propone el coronasutra

Una de las grandes incógnitas del coronavirus es si se trasmite a través del fluido vaginal o del semen, lo que sí queda claro es que lo hace fácilmente a través de la saliva por lo que los besos son una vía fácil de contagio. Para evitarlos, el coronasutra habla de siete posturas en las que se mantiene una distancia de más de un metro y medio entre las bocas.

El 'perrito', la 'amazona' o la 'profunda' son algunas de las que más evitan el contacto de la saliva de la pareja. Sin embargo, "parece poco realista que no haya besos en ningún momento del coito, ya sea antes, durante o después. Se pierde la esencia, el olor, el aliento, yo diría que es como ver una película en tu casa o verla en el cine, no es lo mismo", reconoce el sexólogo Raúl Padilla.

Salvando honrosas excepciones, a nadie se le escapa que la elasticidad y la flexibilidad a los 20 o 30 años no es igual que a los 50 o los 60. Por eso en Uppers hemos dado un paso más, y hemos sombreado aquellas posturas que, además de ser óptimas para evitar el contagio, pueden practicarse sin otro tipo de riesgos como romperse la espalda o alguna extremidad.

El coronasutra, tiene un origen desconocido, pero ha tenido una gran aceptación en redes sociales. Incluso algunas organizaciones, como la Escuela Latioamericana de Medicina Sexual y Sexualidad Humana, recomiendan estas posturas para mantener relaciones durante la pandemia y añaden la importancia de utilizar mascarilla y mantener una higiene óptima.

Placer individual, la otra cara del sexo en el confinamiento

"El principal problema que le veo al coronasutra es su practicidad. Realmente ahora mismo no podemos quedar con nadie externo y si convivimos con alguien, probablemente no respetemos la distancia de seguridad y nos demos besos y abrazos", apunta el sexólogo. Puede ser útil de cara a un futuro, en la desescalada.

Mientras tanto, el sexting y la masturbación siguen siendo las opciones más seguras. Según una encuesta publicada por Sexplace, el 68% de los españoles afirma haber practicado algún tipo de juego erótico online durante la cuarentena y de esos, el 71% asegura no haberlo hecho nunca antes.

"En situaciones como esta debemos volver a los orígenes del sexo, disfrutar del placer solo o acompañado, pero no necesariamente hay que pensar en el coito. Conversaciones subidas de tonos, el hecho de tontear, de seducir, quedarnos a las puertas... Este es el momento ideal para ello, para redescubrir el sexo en toda su magnitud", expone Padilla.

Practicar el proceso completo del Kamasutra

Quizá no lo sepas, pero el Kamasutra, base del actual coronasutra, es mucho más que un listado de 64 posturas más o menos imposibles. El libro consta de 36 capítulos que versan sobre temas diferentes: el sexo en general, la elección de esposa, las conductas sexuales, la seducción, cómo atraer otras personas… Y el apartado del acto sexual, de hecho, no es de los más extensos.

"Según el Kamasutra las parejas tienen que pasar diferentes fases y la crisis del coronavirus puede ser el momento idóneo para llevarlas a cabo. La primera semana las parejas pueden hablar pero no tocarse, la segunda solo caminar juntos, la tercera darse la mano y así progresivamente hasta que se llega al cito. Es un proceso de aproximación e intimidad. No es un ejercicio gimnástico, tiene un background detrás para generar un placer mayor”, concluye Padilla, que nos anima a que practiquemos el proceso íntegro para alcanzar altos niveles de placer, incluso confinados.