¿Cuál es el pueblo español conocido como 'el pequeño Vaticano'?

Pequeño Vaticano. Ese es el nombre con el que muchos se refieren a Hornillos del Camino, un modesto pueblo de menos de cien habitantes situado en la comarca de Arlanzón (Burgos) que tiene el curioso honor de ser el lugar con más religiosas de toda España.

Este pequeño municipio rural, por el que pasa el Camino de Santiago francés, tiene tan solo 60 personas censadas, aunque en los meses de invierno el número de residentes no supera la quincena, y la gran mayoría de ellas son monjas y sacerdotes.

Su apelativo, tal y como explicó su edil, Pedro Mayor, en una pequeña entrevista con la COPE, nace precisamente del número de religiosos que alberga. “Recibe el nombre de ‘pequeño Vaticano’ porque hace sesenta o setenta años, de las 300 o 400 personas que había en el pueblo había unos sesenta religiosos”, explicó. “Somos el pueblo con más curas por habitantes de España”.

Para el alcalde, esta alta proporción de religiosos se debe, principalmente, al Camino de Santiago. Hornillos del Camino es un pueblo íntimamente vinculado con la ruta jacobea, tal y como se aprecia en sus escasos negocios, muchos de ellos enfocados a los peregrinos que año tras año deciden hacer el camino francés. De hecho, su vinculación es tal que muchos de sus escasos habitantes son extranjeros de distintas nacionalidades, peregrinos que, al pasar por el pueblo, quedaron prendados y decidieron instalarse aquí.

Este fenómeno, claro, no es nuevo. “Con el Camino de Santiago, la gente de la época encontraba su espiritualidad, o quizás fueron a buscar los estudios en tiempos con menos recursos económicos y encontraban aquí su vocación”, señala Mayor a la COPE. Así, el alcalde explica no solo la fuerte presencia extranjera, sino también el gran número de religiosos que habitan en el pueblo.

Además de su carácter religioso, Hornillos del Camino es un pueblo muy vinculado al campo. A pesar de que hoy en día cuenta con varios negocios, como albergues y bares, esta pequeña localidad sigue viviendo del campo, en el que trabajan incluso algunos religiosos después de colgar la sotana.

Pese a su reducido tamaño (Hornillos del Camino tiene tan solo una calle central que se bifurca en varias callejas), en el pueblo podemos encontrar algunos monumentos de interés desde un punto de vista meramente turístico, como la emita o la iglesia parroquial de Santa María de Hornillos del Camino, una construcción de estilo gótico que data del siglo XVI. Además, también cuenta con un yacimiento arqueológico del antiguo asentamiento romano que se asentó en la zona.

Como todo pueblo que se precie, Hornillos del Camino también tiene sus fiestas, siendo la más destacada la del Gallo, una celebración que conmemora la Guerra de la Independencia Española. Celebrada durante el último fin de semana de julio, la Fiesta del Gallo se basa en una antigua leyenda local que cuenta cómo los franceses, durante la Guerra, robaron todas sus gallinas. En noviembre, a su vez, se tiene lugar la Fiesta del Santo Román, en honor al santo local, y cada 25 de julio se celebra la Fiesta del Peregrino, con verbenas, juegos, música y, en definitiva, todo lo necesario para disfrutar.

Hornillos del Camino se encuentra a unos 25 kilómetros en coche de Burgos, aproximadamente. Para llegar, hay que salir por la A-23 en dirección al Oeste, hasta el núcleo de Villanueva de Argaño. Una vez aquí, se debe coger el desvío BU-406. Al cabo de unos minutos, llegaremos a nuestro peculiar destino.