{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Reino Unido y el mundo entero está de luto. El puente de Londres ha caído a los 96 años y Carlos ya es rey. El hijo más polémico de Isabel II llevaba toda la vida esperando este momento. Casado por primera vez con Lady Di, en lo que ella calificaba como “un matrimonio de tres”, tras su divorcio y muerte de su exmujer, oficializó su relación con Camila Parker, su gran amor. Odiada y querida a partes iguales, hay muchos detalles desconocidos de su vida anterior, por ejemplo quiénes son sus hijos. Te lo contamos.
Camila, la ya reina consorte, tiene dos hijos de su primer matrimonio con Andrew Parker Bowles. Laura y Tom siempre han mantenido un perfil bajo, en un segundo plano, pese a que ambos mantienen muy buena relación con su madre y también con sus hermanastros, los príncipes Guillermo y Harry.
Laura tiene 44 años y es una de las expertas en arte más reputadas de Inglaterra. Se licenció en la universidad pública de Oxford Brookes y tras pasar unos meses en la Peggy Guggenheim Collection de Venecia, trabajó en una revista británica como corresponsal de automovilismo. Después, en 2005, fundó y dirigió una galería de arte londinense, Eleven Fine Gallery, donde permaneció una década. Ahora, con su renombre, se dedica a la conservación de obras y a la promoción de artistas emergentes.
Está casada con Harry Lopes desde 2006, un importante ejecutivo de energías renovables inglés, que también fue modelo de calzoncillos de Calvin Klein, y es madre de tres hijos a los que presentó públicamente. Discreta desde un primer momento, se la ha llegado a conocer como “la hija fantasma de Camila” y decidió, por voluntad propia, al igual que su hermano, renunciar a estar vinculados a la Familia Real Británica.
Cinco años mayor que su hermana, Tom Parker Bowles es un reputado crítico gastronómico que comenzó su carrera profesional escribiendo en la prestigiosa revista Tatler. Graduado en periodismo en Eton y Oxford, ha publicado una decena de libros y participa asiduamente en programas de cocina como Masterchef. De su madre heredó la pasión por la cocina y es una de las caras más conocidas de Reino Unido.
Sacudido por la tragedia, el año pasado perdió a su novia a causa de un cáncer, la periodista Alice Procope, con quien mantenía una relación desde hacía dos años. Ahijado del rey Carlos III, ya había estado casado durante 12 años con Sara Buys, también periodista y madre de sus dos hijos, Lola y Freddy.
Su nombre también se ha asociado con algún que otro escándalo, como el relacionado con una empresa de cortezas de cerdo que había fundado con dos amigos y que supuestamente elaboraba sus productos solo con cerdos británicos de granjas que no hacían daño a los animales, pero que, al parecer, utilizaba también animales de varios países europeos. La prensa se le echó encima y aprovecharon la jugada también para perseguirle por una supuesta adicción a las drogas.