Fernando Osuna, el abogado que lucha porque tu padre admita que es tu padre: "Cuesta entre 4.000 y 7.000 euros"

  • "Hay muchos hijos de personalidades muy famosas, que no han salido a la luz pública y donde, sobre todo, existe mucho secreto al respecto".

  • "Una prueba de ADN", lo primero y fundamental para los casos filiación

  • Se puede pedir la paternidad aunque tu padre haya fallecido. Si no se puede exhumar el cadáver por estar incinerado, hay que presentar pruebas como correos electrónicos, whatssaps, etc.

Cinco años lleva luchando Javier Santos, más los otros tantos que lo hizo su madre, Edité Santos, para que la justicia determine que Julio Iglesias es su padre. El tiempo acecha y su abogado, Fernando Osuna, no desespera. Ya lo consiguió con 'El Cordobés' en noviembre de 2017 aunque, Manuel Benítez, renegara de su hijo hasta hace unos meses. No han sido los únicos que buscan el reconocimiento de sus padres. El jurista sevillano ha llevado más de 800 casos de filiación.

Su carrera dio un giro en 2008 cuando decidió ayudar a un vecino de su pueblo, Écija: "Su padre era un agricultor muy rico que no lo reconocía como hijo". Ganó el caso y tuvo tanta repercusión que le empezaron a entrar multitud de casos de filiación. Unos más fáciles y conciliadores como el de Carlos Baute, donde su hijo le pidió consejo, y otros más complicados.

Su buen hacer, le ha llevado a que su nombre traspase las fronteras y haya y lleve casos "en Europa, algún país de Asia y muchos de América. De África ninguno", explica a 'Uppers' en una entrevista donde hemos querido hablar con él largo y tendido de qué hay que dar o que pasos dar si quiero saber 'quién es mi padre'. Muchos "hijos de personalidades muy famosas, que no han salido a la luz pública y donde, sobre todo, existe mucho secreto al respecto".

Eto'o, Paco Gento, el marido de la 'duquesa Roja', el ganadero Benítez Cubero, un cantante de 'Los del Río', un descendiente de un famoso escultor, el hijo de un popular compositor de música pop, la hija de un multimillonario financiero, el hijo de un banquero internacional, el nieto de un político de la Transición, el hijo de un empresario cervecero estadounidense, el descendiente de un famosos futbolista de la selección inglesa, o la hija de un Jefe de Estado Latinoamericano, son algunos de los casos que han pasado por su bufete.

No coges clientes de los que dudes: ¿cómo sabes que está diciendo la verdad?

Se nota a simple vista. Incoherencias, resistencia al ADN, escasez o pruebas endebles...

Por dónde se empieza. ¿Qué puedo hacer si dudo de la paternidad de mi padre? 

Lo primero y fundamental es tener una prueba ADN cogido por un detective al presunto padre.

¿Cómo puedo solicitar saber quién es mi padre?

Como decía, tomar una prueba de ADN conseguida por un detective es lo más aconsejable, salvo que haya muchas otras pruebas, como por ejemplo WhatsApp, e-mails, cartas... donde se reconozca por el padre que es cierto.

¿Cuáles son los trámites a seguir?

Cuando se tengan esas pruebas se presenta una demanda en el juzgado.

¿Cuánto tiempo se puede dilatar el proceso en el tiempo?

Si el padre reconoce los hechos y no hay demanda, sería muy rápido. Sin duda, sería lo ideal (como fue el caso de Carlos Baute). La cuestión económica era importante, porque el hijo tenía un trabajo muy precario. Pero hablé con mi cliente y llegamos a la conclusión que lo primordial era construir y no destruir. Le aconsejé que retirase la demanda. Le dije "puede ser que tu padre recapacite así y haya una reconciliación". No me equivoqué y así se produjo. Carlos Baute ha dado un ejemplo grandísimo de generosidad”.

Cuando tengo muchas pruebas llamo al presunto padre y le digo la realidad. A veces da resultado y reconoce al hijo y se evita el juicio. Si hay demanda, lo normal es entre uno y dos años.

¿Qué inversión se necesita para solicitar los trámites? 

Si es necesario detective porque haya pocas pruebas, entre 5.000 y 7.000 euros. En caso contrario 4.000 euros.

¿Puedo solicitarla si mi padre está muerto? 

Lo que recomiendo es coger ADN con un detective a hijos del padre fallecido. Es decir, a los presuntos hermanos.

¿Es difícil la exhumación de un cadáver para los procesos de filiación? 

No. El juez lo acuerda si no hay otras pruebas.

¿Y si está incinerado qué puedo hacer?

Coger ADN con detective a los presuntos hermanos. Correos electrónicos entre la madre y el padre, testigos, fotos, WhatsApp, etcétera.

Aunque sean pruebas adquiridas de forma 'ilegal', ¿se admiten a trámite o el juez te lo tira por tierra?

Es legal tomar una prueba de ADN con detective siempre que sea un objeto sin valor, obtenido en un lugar público. Y lo más importante, con un fin lícito: averiguar la paternidad.

Se consigue la prueba científica, se elabora esa demanda, se aportan otras pruebas para complementar... pero lo fundamental es la prueba de ADN. Se le dice al juez 'aquí está esta prueba', se ha conseguido en un lugar público, es correcto, es legal, con materia que es basura, que no es propiedad de nadie, se ha analizado, lo ha cogido un detective que está bajo juramento. Este le explica al juez cómo ha sido el procedimiento, el camino, desde el primer momento hasta el último.

¿Cómo procede el detective?

Esos restos los coge, los precinta y los manda inmediatamente a un laboratorio genético, se hace un análisis y se elabora un dossier, con ese dossier se presenta la demanda y se le entrega al juez, junto con otras pruebas como testigos o factores indiciarios de que hay verdad.

¿En qué te basas para decidir llevar un caso a Estrasburgo? 

Cuando el juez, la audiencia Provincial, el Tribunal Supremo y el Constitucional sucesivamente te lo deniegan. 

¿Hay que pasar por todos esos trámites previos?

No puedes ir directamente a Estrasburgo sin agotar todos esos pasos.

¿Por qué llegar a Estrasburgo? ¿Qué apoyan ellos que otros tribunales no?

Hay muchísimas sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Mantiene que prevalece la verdad genética frente a cuestiones de materia juzgada u otras cuestiones formales. Esto es lo que ha sucedido con el caso de Julio Iglesias. El juzgado sentenció que era una cosa ya juzgada porque la madre de Javier Santos, Edité Santos, demando en su entonces. Al presentarlo después, Javier Santos, son dos personas jurídicas distintas por lo que no se puede hablar de haber juzgado la misma cosa.