¿Qué perros tendrán que pasar un test de sociabilidad con la nueva Ley de Bienestar Animal?

El pasado jueves 16 de marzo el Congreso de los Diputados aprobó definitivamente la Ley de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales, conocida popularmente como Ley de Bienestar Animal, una nueva  normativa que busca combatir el maltrato y abandono animal y que sirve de complemento a la norma aprobada a comienzos de 2022 que determinó que los animales dejaban de considerarse legalmente como “bienes inmuebles o cosas” y que reconocía su naturaleza como “seres sintientes”. 

Esta nueva norma endurece las penas por maltrato y regula la comercialización de animales, pero también incluye importantes novedades que afectarán a los dueños y a todos aquellos que estén pensando en tener un animal de compañía. 

En este sentido, la nueva ley establece la obligatoriedad de tener un seguro sobre la mascota, prohíbe el uso de algunos collares en los canes, como los eléctricos o los de castigo, y limita el tiempo que los animales de compañía pueden pasar solos en casa a un máximo de tres días, salvo en el caso de los perros que no sean de pastoreo, en cuyo caso el límite está fijado en tan solo 24 horas.

Además, también regula la tenencia de ciertos animales de compañía a través de un “listado positivo” en el que se incluirán todas las especies que sí se pueden tener legalmente en España como mascota. Este listado aún no está cerrado, y aunque se sabe que animales como los gatos y perros sí estarán dentro de ella, se desconoce qué otras especies les acompañarán. Aun así, sus efectos no se aplicarán de manera retroactiva. 

Test de sociabilidad para animales

La nueva Ley de Bienestar Animal también obliga a algunos perros a pasar un test de sociabilidad para comprobar que no son animales agresivos. Presumiblemente, los animales que tendrán que pasar esta prueba son los canes que actualmente se consideran peligrosos en base a su comportamiento y características físicas, es decir: los pit bull terrier, los staffordshire bull terrier, los american staffordshire terrier, los rottweiler, los dogos argentinos, los filas brasileiros, los tosa inu y los akita inu. 

Esta prueba, por el momento, aún no se ha definido. No obstante, en la página web de la Real Sociedad Canina de España (RSCE) aparece un ejemplo de prueba con la que se examina el comportamiento social y el nivel de educación básica de los perros. Aunque está previsto que el test que se pondrá en marcha a partir de la Ley de Bienestar Animal sea más sencillo, esta prueba puede ayudar a los dueños de perros peligrosos a hacerse una idea aproximada sobre el tipo de examen que deberán pasar sus mascotas cuando entre en vigor la normativa. 

En concreto, la prueba de la RSCE está dividida en dos partes: en la primera se evalúa el comportamiento del animal en una pista, mientras que en la segunda se examina en un entorno urbano

En la primera parte, los animales deberán superar siete ejercicios:

  1. En la primera prueba los perros deben permanecer tumbados con distracciones durante dos minutos. Transcurrido este tiempo, los guías abandonarán la zona de manera ordenada.
  2. En los ejercicios dos, tres y cuatro el guía deberá caminar con el perro por circuitos determinados que decida el juez, donde habrá líneas rectas, giros y cambios de ritmo. En este ejercicio el perro tiene que estar predispuesto a seguir a su guía y no puede haber tirones. 
  3. El siguiente ejercicio se basa en pasear con el perro entre personas en movimiento, a las que el guía va saludando.
  4. Tras esto, el guía deberá soltar la correa y separarse unos pasos del perro. El animal, por su parte, tendrá que permanecer sentado y tranquilo.
  5. En la última prueba, el guía llamará al perro de dos maneras distintas. En la primera, el animal deberá estar quieto en posición tumbado, y el dueño deberá alejarse. A la señal del juez, el animal deberá acudir a su guía. En la segunda, una tercera persona sujetará al perro mientras el propietario se aleja. Cuando el propietario llame al perro, la tercera persona deberá liberarle y el animal deberá acudir a su guía.

En la segunda prueba, por su parte, se realizarán ocho ejercicios en un entorno urbano:

  1. Bajar y subir de un coche con correa y bozal.
  2. Paseo urbano con correa.
  3. El propietario interactuará con otras personas.
  4. El perro se cruzará con otro perro.
  5. El perro debe tumbarse y permanecer relajado en un espacio abierto.
  6. Subir y bajar las escaleras cruzándose con otros peatones. 
  7. El propietario deberá manipular con un cepillo u objeto similar al perro y este deberá permanecer tranquilo durante todo el proceso. 
  8. El perro será inspeccionado y chequeado por un veterinario. 

La Ley de Bienestar Animal, pese a su reciente aprobación, no entrará en vigor de manera inmediata, sino que comenzará a aplicarse a partir de septiembre.