Un exmarido violento y dos hijos muertos: Tina, la mujer que supo renacer de las tragedias

  • Tina Turner vivió durante años en un matrimonio lleno de violencia hasta que a finales de los 70 decidió separarse

  • Fue ya con más de 40 años cuando logró el éxito en solitario mundial que la colocó como reina del rock

  • Tras años de tranquilidad y ya retirada, en los últimos tiempos tuvo que sobreponerse a la muerte de sus dos hijos

Ayer, a primera hora de la noche, el manager de Tina Turner confirmaba en las redes sociales de la artista su muerte a los 83 años en su casa de Suiza. “Hoy decimos adiós a una querida amiga que nos deja su mayor obra: su música. Tina, te echaremos mucho de menos”. Más de 50 años de carrera y unos 200 millones de discos vendidos han colocado a Turner como la indiscutible reina del rock. Una carrera esplendida que le ha ayudado a sobreponerse a las tragedias y malos momentos vividos a lo largo de los años.

La violencia y adicción de Ike

Tina Turner dio comienzo a su carrera en los años 50 tras haber pasado por el abandono de sus padres de la mano de Ike Turner, su primer marido y con quien empezó en la música. El matrimonio no fue feliz. La propia artista lo ha contado a lo largo de los años, una relación marcada por la adicción a la cocaína de su esposo que desembocó en diferentes episodios de violencia que la cantante tuvo que soportar.

El primer hijo de Turner fue Craig, a quien tuvo con 18 fruto de su idilio con el saxofonista Raymond Hill del grupo The Kings of Rhythm. Tras dar a luz, vivió en la casa de Ike, con el que solo tenía una relación de amistad, pero tras la separación de este, comenzaron una relación y se casaron en 1962. Craig adoptó el apellido de Ike y más tarde tuvieron a Ronald, además de que la artista adoptó a Ike Jr. y Michael, los hijos de la anterior relación de su marido.

El propio Ike afirmó en sus memorias que sí, que habían tenido peleas y que “claro, abofeteé a Tina”. No fue hasta 1976 cuando Tina tomó la decisión y se separó de él pese a las consecuencias. "Viví un matrimonio infernal que casi me destruye, pero seguí adelante. Sé que mi adventura con mi salud no ha terminado, pero sigo aquí", relató la cantante.

Renacer en solitario

Entonces Tina Turner quiso emprender su carrera en solitario por la que nadie apostaba, pero en 1984, a los 45, su disco ‘Private Dancer’ fue un éxito en todo el mundo y consiguió despegar la carrera por la que todos la conocemos como la reina del rock y un icono de este género musical en mundo. Una vida en el escenario, ese lugar que consideraba "una explosión de vida".

Un éxito que la llevó a colaborar con Eric Clapton, Mick Jagger o David Bowie e incluso a ponerle banda sonora a la saga James Bond en 1995. Un prestigio indiscutible con el que se recompuso de la tragedia de su matrimonio. En 2013, ya con una relación más que asentada con Erwin Bach, se casaron, solicitaron la nacionalidad suiza donde ya vivían y se retiró oficialmente de la música y de la esfera pública, resguardándose en su castillo. “La ayuda ha sido esencial para mi bienestar, mi alegría y mi resiliencia, es mi vida espiritual”, escribía en su biografía.

En 2016 padeció un cáncer intestinal que, por los problemas del tratamiento, la llevaron a probar algunos remedios homeopáticos que le provocaron un fallo de riñón. En ese momento crítico, Erwin, su marido, le donó el riñón que Tina necesitaba. “A pesar del tiempo que llevamos juntos, hay gente que sigue pensando que se casó conmigo por la fama y el dinero”, revelaba.

La muerte de sus hijos

La última década de la artista fue tranquila hasta 2018, cuando todo se torció. En julio de ese año, su hijo Craig, que se dedicaba al sector inmobiliario y siempre se mantuvo alejado de cualquier foco, se suicidó a los 59 años, un momento que la artista definió como el “más triste como madre”.

Hace solo unos meses Tina Turner vivía un nuevo revés. Ronald, su segundo hijo que sí que se dedicó a la música como bajista, murió en diciembre de 2022 a causa de un cáncer que padecía.