¿Qué hay que hacer si te encuentras con un incendio en la carretera?

Casi 7.000 incendios se producen en nuestro país anualmente y más del 80% de los denominados forestales los causa el hombre debido a un descuido o a una negligencia, como tirar una colilla o basura por una ventanilla. Las carreteras casi siempre se ven afectadas y los conductores deben saber actuar ante tales situaciones. Desde Uppers vamos a explicar cómo reaccionar ante un incendio en la carretera y qué debes hacer si ves un incendio desde tu coche. Son recomendaciones para evitar que nos veamos rodeados por las llamas.

En las cunetas se acumula basura y puede haber restos de cristales que hagan de lupa con el sol y prendan la vegetación. Lo habitual es percatarse de que algo sucede y hay un posible incendio cuando desde la distancia se distingue una columna de humo. Ya es peligroso si directamente se ven las llamas o al coche le envuelve una nube de humo.

Por tanto, lo primero que se debe hacer si desde el coche alguien se percata del primer indicio es cambiar el rumbo y circular buscando una ruta alternativa en dirección contraria al incendio. Es evidente que en ningún caso se debe intentar atravesar con el coche un área que se encuentra en llamas o con un humo muy denso si es demasiado tarde o no se ha podido dar la vuelta.

Como pautas básicas para cambiar de rumbo con respecto al incendio es aconsejable no circular a favor del viento, porque las llamas avanzarán en esa dirección, al igual que no es recomendable conducir hacia zonas altas de montaña debido a que el fuego también suele propagarse hacia esas localizaciones.

El humo es como la niebla que reduce la visibilidad de los conductores con lo cual se tienen que encender los faros de niebla e incluso si es necesario las luces de emergencia. De este modo, se consigue que otros vehículos se percaten de la presencia de más conductores y de que hay un peligro inminente.

En cuanto sea posible se debe alertar al servicio de emergencias llamando al 112 del suceso, de ahí la importancia de llevar siempre el móvil cargado o disponer de una batería de repuesto cuando se está en carretera.

Por otra parte, aunque ante un incendio dan ganas de salir corriendo, lo recomendable es no abandonar el coche; con él se avanza con mayor rapidez en dirección contraria al incendio y además es más seguro porque sirve de protección. Habría que subir las ventanillas, cortar el sistema de ventilación para evitar la entrada de humo en el habitáculo interior y que cada integrante del coche se cubra las vías respiratorias con un pañuelo.

La velocidad de circulación debe ser muy baja y hay que avanzar hasta una zona segura como aquella sin vegetación para volver a llamar a las autoridades y consultar hacia dónde dirigirse o cuáles son las zonas donde ya no hay riesgo.

En ocasiones extremas, las autoridades solicitan que se abandonen los vehículos, ya que puede que esté cortada la carretera y haya una mejor vía de escape andando. En este caso, hay que recopilar prendas de lana o de algodón del coche y cubrir totalmente el cuerpo con ellas para prevenir lesiones por la propia radiación calorífica del incendio. Lo que no se debe utilizar como protección son tejidos sintéticos ni llevar mochilas de este material ya que prenden rápidamente y pueden provocar quemaduras.