Cuando Fernando Alonso deja el F1: los coches que le gusta conducir por placer

  • Han pasado por sus manos Renault, Mercedes, McLaren, Ferrari y Alpine, entre muchos otros

  • El piloto español suele conducir coches para la marca que corre

  • Seguro que en estos días ya está decidiendo qué Aston Martin “pedirse” para Reyes

Fernando Alonso, el bicampeón del mundo de Fórmula 1, es famoso por su habilidad en la pista con un volante en las manos para sacar el máximo partido y rendimiento al coche que esté pilotando en ese momento. Pero llega un momento en el que el “meteorito asturiano” ve la bandera a cuadros, se baja del coche y, tras las entrevistas de rigor, se pone a los mandos de un coche de calle para dirigirse al hotel.

Una vez en casa, generalmente por contrato, Fernando Alonso debe desplazarse en coches de la marca que le paga en semana de Gran Premio o para los distintos actos promocionales que los patrocinadores disponen, también por contrato.

Pero de finales de noviembre a primeros de marzo no hay carreras. Sin descuidar la forma física, Fernando Alonso tiene una vida privada en la que se dedica, principalmente, a descansar, viajar, salir en bici, gimnasio y, por supuesto, pasarse por Asturias y ver a familia y amigos a los que siempre tiene presente, no en vano, Alberto Fernández, “El Galle”, su amigo de la infancia y para el que fue mecánico en campeonatos nacionales de karts cuando eran pequeños, le acompaña en cada gran premio a lo largo y ancho del mundo junto a sus inseparables preparadores físicos, Fabrizio Borra y Edoardo Bendinelli, alternándose estos dos últimos los viajes a cada GP.

Es en los momentos de asueto y entre temporada cuando el bicampeón del mundo es libre para conducir el coche que le de la gana. Habitualmente su residencia está asentada en Suiza, un lugar tranquilo para vivir, lejos del mundanal ruido, y en un entorno natural fuera de toda duda. Sin embargo, se le ve a menudo pasar pequeñas temporadas tanto en Mónaco como en su Asturias natal, donde no deja pasar la oportunidad de ponerse el mono y cuidar su talento en la pista de karts que tiene a su disposición en su Museo.

Será difícil elegir sólo un Aston Martin de calle

Hasta el 1 de enero de 2023, por contrato, debería seguir usando su Alpine 110, un coche de calle con adn de rallies que, a pesar de su potencia y diseño, ha sido un terrible desastre en ventas. Ningún año desde que está a la venta ha vendido más de 40 unidades en España. Es más, nos atreveríamos a decir que ha tardado nada y menos en deshacerse de él y empezar a elegir su próximo coche de calle, un flamante Aston Martin. Vantage, DBX, DB11, DBS… incluso los exclusivos Valhala y Valquiria. Con gusto nos quedaríamos con el peor de todos, todos deportivos y con cientos de caballos listos para galopar en cuanto se pise el pedal derecho.

El caso es que Fernando no se conforma con cualquier coche, lo mismo que en su vida privada: tras muchos años con la modelo italiana Linda Morselli, esta temporada se le ha visto con la periodista austriaca Andrea Schlager. Llamó mucho la atención durante este 2022 cuando se les vio juntos una noche ir a cenar a un restaurante. Fernando Alonso conducía un flamante Ferrari LaFerrari.

Ferrari sigue estando en su corazón, incluso tras perder dos títulos en la última carrera con ellos

A pesar de haber vestido los colores de “La Scuderia” de 2010 a 2014 e, incluso, haber perdido un par de campeonatos mundiales en la última carrera del año, en 2010 y 2012, el piloto español apuesta por este “cavallino” para sus desplazamientos más personales. Parece ser que la unidad que pertenece a “Nano” cuesta más de 4 millones de euros. Cuenta con un motor de 6,2 litros y desarrolla casi mil caballos de potencia, en concreto, 963, prácticamente los mismos que los F1 que está acostumbrado a pilotar cada fin de semana de carreras.

La ficha técnica de este bólido de ensueño no deja lugar a dudas: acelera de cero a 100 km/h en menos de 3 segundos y pasa de los 350 km/h de velocidad punta. La unidad que pertenece a nuestro campeón está acabada en un negro mate que hace que sea imposible que pase inadvertido.

Mientras esperamos a ver cómo le queda el verde Aston Martin al ovetense y vemos si se confirman los rumores que le sitúan en la próxima película de James Bond, donde Aston Martin es un protagonista más en la saga 007, esperamos que Fernando Alonso recargue pilas y se ponga a punto para sacar el máximo partido a su coche en 2023 y poder luchar por podios y por victorias en un Mundial de F1 que, un año más, se presenta apasionante.

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