Son muchos, tanto dirigentes como aficionados, los que añoran tener una piloto en el Mundial de Fórmula 1. Ha habido algún caso en el pasado, donde lograron competir en alguna carrera: Giovanna Amati, Desiré Wilson, Divina Galica, la única que logró puntuar, en 1975, con un sexto lugar, Lella Lombardi, y la pionera, la italiana María Teresa de Filippis, en 1958. Todas pasaron sin pena ni gloria por un campeonato en el que, tradicionalmente, lo masculino es la nota predominante.
En otras disciplinas de cuatro ruedas, incluso más exigentes físicamente, sí ha habido campeonas del sexo femenino, como la piloto de rallies Michelle Mouton o la ganadora del Dakar con Volkswagen Jutta Kleinschmidt. En una competición muy parecida a la F1, la Indy americana, Danica Patrick no sólo logró participar, sino ganar una carrera.
Los actuales dueños de la F1 y la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) saben perfectamente del gancho que tendría el campeonato con una piloto entre los 20 elegidos de la parrilla. Es por ello que no han dudado en ponerse manos a la obra en la creación de un campeonato sólo para mujeres jóvenes en las que descubrir a las más talentosas al volante y potenciar sus capacidades para ver si es posible que en un futuro no muy lejano alguna de ellas pueda participar en un gran premio.
En 2023 habrá cinco escuderías en parrilla, con tres coches cada una. Serán 21 carreras en total, tres en cada uno de los siete circuitos que tendrá el calendario. En al menos una de las fechas, coincidirán con el Mundial de F1 en el mismo trazado.
Las cinco escuderías que pondrán en liza tres monoplazas cada uno tienen una amplia experiencia en diferentes categorías. Llama la atención que uno de los cinco será español, el Campos Racing, un habitual de la F2, con diferentes trofeos y victorias en sus vitrinas. Junto a Campos Racing, otros viejos conocidos de las carreras como Art Grand Prix, Carlin, MP Motorsport y Prema Racing.
El monoplaza, que tendrá idéntico chasis y neumáticos para las 15 pilotos, es un Tattus T421 con un motor turbo de 165 CV de potencia, coche que ya ha sido protagonista en la Fórmula 4 de 2022, incluido el campeonato español de la misma categoría. Las gomas de competición serán Pirelli, igual que en la F1.
La Fórmula 1 no se queda ahí y ha anunciado subvenciones de 150.000 euros para cada piloto, siempre y cuando cada una de ellas aporten una cantidad similar. El resto del presupuesto correrá a cargo del propio equipo. Stefano Domenicali, ex de Ferrari y actual presidente y CEO de la Fórmula 1, es uno de los mayores defensores de este campeonato que comienza en apenas unos meses.