Inquietud entre las gasolineras por la rebaja de 20 céntimos por litro de los carburantes para los ciudadanos en todas las estaciones de servicio que entrará en vigor este viernes, 1 de abril. 15 céntimos provendrán de las arcas del Estado y otros 5 de la empresa, pero las pequeñas y medianas gasolineras dudan de que tengan capacidad financiera para adelantar con sus fondos los descuentos anunciados.

"No sabemos el mecanismo y es importante. Merecíamos saber si ese dinero será adelantado por el Gobierno o lo tendremos que poner de nuestro bolsillo o si bien vamos a tener acceso a un mecanismo de compensación", ha denunciado la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES), que defiende los intereses de más de 4.000 estaciones de servicio españolas de las algo más de 11.000 que hay en todo el país.

Hasta ahora, las principales empresas del sector como BP, Cepsa y Repsol, habían anunciaron descuentos a sus clientes a través de su aplicación o tarjeta de fidelización, pero ante la nueva situación desde CEEES avisan muy seriamente: "Si lo que pretende el Gobierno es que sean las pymes y micropymes del sector quienes financien la iniciativa, la realidad es que ésta quedará sin efecto. No porque las estaciones de servicio no deseen contribuir al éxito de la misma, sino porque directamente no pueden hacerlo".

Por ello, la Asamblea General de la organización ha acordado por unanimidad solicitar al Gobierno que aclare con la mayor celeridad posible cuál será el mecanismo de ejecución del descuento. "La pretensión del Gobierno será absolutamente ineficaz si no se articulan mecanismos que, al igual que se ha hecho en otros países de nuestro entorno, garanticen que las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros tengan un impacto positivo en los bolsillos de nuestros clientes", remarcan.

Desde la patronal de las estaciones de servicio proponen una serie de medidas coordinadas a fin de reducir la cantidad que tanto empresas como particulares han de destinar a los carburantes. La principal, es la reducción temporal del IVA que se aplica a los carburantes del 21% al 10%, similar a la que adoptó el Ejecutivo el pasado verano en relación al precio de la electricidad.

Asimismo, proponen la reducción del Impuesto de Hidrocarburos al mínimo permitido por la UE y el incremento de la cuantía de devolución del gasóleo profesional, que pasaría de los 4,9 céntimos por litro a 19,9 céntimos por litro. Este mecanismo ya lo utilizan mayoritariamente los transportistas.

También proponen la exención temporal de las diferentes obligaciones medioambientales que han de cumplir los operadores mayoristas y la puesta en marcha de una línea ICO de liquidez para las empresas con CNAE 4730 (comercio al por menor de combustibles de automoción), teniendo en cuenta que el 70% de las estaciones de servicio están en manos de pymes y micropymes, mayoritariamente de carácter familiar.

Coincidiendo con el anuncio del Gobierno de extender la ayuda de 20 céntimos, el precio de los carburantes en algunas estaciones de servicio low cost españolas registraron incrementos de entre 15 y 30 céntimos el litro. No fue un encarecimiento generalizado, sino en algunas estaciones concretas. Fuentes del sector aseguraron que la subida no era consecuencia de la medida anunciada por el Ejecutivo y que posiblemente se trataba de un ajuste de márgenes, negativos en las últimas semanas.