¿Por qué le llamaban Pelé? El origen de un apodo que no le gustaba
¿Por qué llamaban a Pelé así? Su origen está en su infancia y al principio no le gustaba este apodo
Todo fue por sus problemas de dicción propios de un niño pequeño
Muere Pelé, el rey del fútbol: sus siete hijos reconocidos y sus tres matrimonios
Hace solo unas horas que se conocía la muerte de Pelé, uno de los mejores jugadores, si no el mejor, de la historia del fútbol, a causa de un cáncer de colon a los 82 años. Su salud en las últimas semanas había sido delicada, lo que no ha borrado la tristeza de su familia, se casó tres veces y tuvo siete hijos reconocidos, y de todos sus seguidores. Pero, aunque todos lo conocían como Pelé, ese no era su verdadero nombre. ¿Por qué le pusieron ese apodo?
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Bilé, su ídolo de la infancia
Pese a que todos lo hemos conocido como Pelé, nunca ha sido su nombre real. Él nació como Edson Arantes do Nascimento y, su apodo, nada tiene que ver con su nombre, al contrario, su origen se remonta a sus primeros años de vida, en los que ya se interesaba por el fútbol, y problemas de dicción propios de la edad.
En su infancia Pelé tenía un ídolo, José Lino da Conceiçao Faustino, conocido como Bilé, el portero del Vasco de Sao Lourenço, equipo donde también jugaba el padre de Pelé. Durante aquellos años, el que luego se convertiría en uno de los mejores jugadores de la historia, era llamado por su familia como Dico, por lo que aún no había rastro del nombre por el que luego todos lo conoceríamos.
Así, siendo un niño de unos cuatro años, cuando iba a los entrenamientos intentaba meterse en la portería para hacer de portero y, cada vez que conseguía parar la pelota, gritaba algo parecido a “¡Bien, Bilé!”.
No le gustaba
Sin embargo, al ser tan pequeño, no pronunciaba correctamente Bilé, de su boca salía algo parecido a Pelé, un apodo que fue cuajando entre sus compañeros y amigos, que empezaron a llamarlo así pese que al entonces pequeño jugador no le hacía ninguna gracia que se refiriesen así a él, dicen que hasta llegó a meterse en alguna pelea por ello.
El resto es historia, no le quedó más que aceptarlo y, al final, llevó Pelé en su espalda durante años, coronándose con ese nombre tres veces campeón del mundo con la selección brasileña. Un nombre que hoy diferentes generaciones recuerdan y lloran su pérdida. Un nombre que gran parte de la afición al fútbol asocia al que, para ellos, es el mejor jugador de la historia.