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Se acerca el verano y, con ello, las playas empiezan a recibir cada vez a más visitantes y los deportes acuáticos viven sus meses de máximo fervor. Las playas se plagan de tablas de surf o windsurf, entre otros. Pero puede que progresivamente empieces a ver a alguien sobre la tabla que no es una persona, sino un perro. Como lees. El surf para perros ha llegado a España y parece que para quedarse. Este fin de semana se celebra en la playa de Salinas, en Asturias, el II Campeonato de Europa Dingonatura Surf Dog. ¿Cómo es el surf para perros? ¿Qué beneficios aporta a los canes? Hablamos con Manuel Calvo, director de la Fundación Dingonatura y organizador de la competición.
Desde su Fundación, Calvo asegura que pretenden “promover el bienestar animal, la adopción o la tenencia responsable, pero también la práctica de deportes con perros junto al humano, algo que consigue que no tenga problemas de comportamiento gracias a la disciplina que establece”. El surf con perros no está muy popularizado en España, pero sí en otras zonas del mundo, como en California, que fue donde Manuel lo vio y decidió traerlo a España.
“Los perros cogen olas medianas o pequeñas, no tan grandes como las personas. Hay dos modalidades, una en la que el perro y el humano van juntos en la misma tabla, y otra en la que va el perro solo, pero en ambas es la persona la que elige qué ola coger y toma el impulso”, explica Manuel Calvo. No obstante, destaca que lo básico siempre es que “el perro disfrute, no se le puede forzar a meterse en el agua o a subirse a una tabla”.
“El deporte te lleva a conocer mejor a tu perro, tienen manías, igual que las personas y hay que saber qué les gusta y qué no. El surf aporta disciplina, lo que repercute en un mejor comportamiento y convivencia en casa. Hay que educarlos desde cero, pero todo sin humanizarlos”, sostiene.
¿Y qué hay de los requisitos? El organizador mantiene que no los hay, pero sí unas normas, ya que todos los perros deben “hacerse controles veterinarios para cotejar que están bien, además de que todos llevan chaleco salvavidas”.
La facilidad que tienen los perros, y no tanto las personas, es que tienen mucho más equilibrio porque “tienen cuatro patas y un centro de gravedad más bajo”. Calvo considera que no todos los perros tienen las mismas capacidades, ya que cuanto más grandes y más peso, más complicado. Por ello, cree que “un perro mediano, tipo border collie, es el perfecto. Hemos tenido desde un pastor alemán, un chihuahua, e incluso varios yorkshire. Imagínate a uno con un chaleco salvavidas, mojado y subido en la tabla. Un espectáculo”.
Es consciente que más de uno puede sentir curiosidad cuando vea el campeonato en la playa, por lo que anima a cualquier persona que tenga perro a practicar surf juntos, siempre que al perro le guste el agua y no muestre rechazo. “Lo mejor es no forzar, empezar con el mar en calma, sin muchas olas y progresivamente. Es como las personas, si el primer día le da un revolcón una ola, quizá no quiera volver a intentarlo”.
El surf no es, ni de lejos, el único deporte que se puede hacer con un perro. Está el canicross (correr con tu perro atado a tu cintura) o el discdog (tienen que coger discos voladores o hacer determinadas piruetas). Aunque lo que tiene claro Manuel Calvo es que de “lo más bonito y gratificante es salir con tu perro al monte a pasear”.