Hacer deporte en casa es posible: trucos para montar tu propio gimnasio sin hacer una gran inversión

Hacer deporte es fundamental si queremos disfrutar de una buena salud física y mental. Sin embargo, muchas veces nos cuesta sacar tiempo para hacer ejercicio. Ahora que las restricciones sanitarias contra el coronavirus nos obligan a pasar más tiempo encerrados con nuestros pensamientos, es un buen momento para plantearse montar un gimnasio en casa que nos permita mantenernos activos físicamente y reducir nuestros niveles de estrés y ansiedad. Pero ¿qué necesitamos?

A la hora de montar nuestro propio gimnasio en casa, lo primero que necesitamos es un espacio libre en el que poder practicar ejercicio. Es importante que la zona que elijamos sea lo suficientemente amplia como para que nos podamos mover con comodidad y que disponga de luz natural. Si disponemos de una habitación extra que no utilizamos con normalidad, como un cuarto de invitados, una sala que usamos como trastero o sencillamente un dormitorio que se ha quedado sin uso, lo mejor es que la vaciemos e instalemos ahí nuestro espacio de trabajo. No obstante, considerando el actual mercado inmobiliario, es probable que tu vivienda cuente con el espacio justo para que tu y tu familia hagáis vida normal, pero no te preocupes: siempre puedes despejar un rincón del salón o del dormitorio para instalar tu material de deporte y recogerla cuando hayas terminado los ejercicios.

Una de las ventajas de contar con nuestro propio gimnasio en casa es que podemos equiparlo con los materiales que más se ajusten a nuestros gustos y necesidades. En las tiendas de deportes encontramos máquinas y accesorios de todo tipo y a distintos precios, por lo que tendremos la máxima libertad a la hora de elegir. Aun así, independientemente del tipo de gimnasio que quieras montar, un elemento imprescindible es la esterilla, una colchoneta muy asequible que nos protegerá de la dureza, frío y suciedad del suelo y en la que podremos practicar cualquier tipo de deporte. Además, ocupan muy poco espacio, ya que se pueden enrollar.

Si no cuentas con mucho espacio para montar tu gimnasio, un accesorio muy recomendable son las mancuernas ajustables, ya que son muy fáciles de desmontar y transportar. Con ellas, podemos crear todo tipo de ejercicios para aumentar nuestra fuerza y musculatura, y siempre en función a nuestras capacidades físicas. Otra opción son las bandas elásticas, con las que podemos ejercitar todo nuestro cuerpo en cualquier lugar, o los discos deslizantes, también conocidos como sliders, con los que mejoraremos nuestra coordinación y equilibrio.

Por el contrario, si tu vivienda tiene los techos lo suficientemente altos, no dudes en hacerte con una cuerda de saltar: aunque pueda parecer difícil de creer, saltar a la comba es un ejercicio de cardio muy completo que nos ayuda a quemar grasa y a mejorar nuestra resistencia y musculatura, así que no lo pienses dos veces. Además, si tu gimnasio cuenta con una habitación propia y tu economía te lo permite, puedes instalar una máquina de cardio, como una cinta de correr o una bicicleta estática. Una barra de dominadas te permitirá fortalecer los músculos de tu tren superior, mientras que una pelota fitball nos ayudará a fortalecer nuestro core y abdominales.

Con la llegada del coronavirus, han sido muchos los entrenadores que se han animado a subir rutinas de ejercicios y clases a internet. Si acabas de empezar en el mundo del deporte y te sientes un poco perdido, estos videos pueden ayudarte a aprender a hacer algún ejercicio, por lo que no dudes en utilizar tu móvil, ordenador o tablet para consultarnos. Además, siempre puedes aprovechar para poner música que te ayude a motivarte.

Mantener una casa limpia y ordenada ayuda a mejorar nuestra salud mental, por lo que, cuando termines de hacer ejercicio, no te olvides de recoger. Puedes decantarte por un armario o estantería o, si no tienes espacio, con unas cajas de plástico donde almacenar tus utensilios. Así también te aseguraras de que no pierdes de vista ninguno de tus materiales.