La Organización Mundial de la Salud explica que el peso ideal es el que ayuda a mantenerse sano y con el que tenemos más probabilidad de vivir más y mejor. El peso ideal o saludable no depende de cánones estéticos, sino de valores asociados a la salud, así que no están necesariamente relacionados. Por tanto, el peso ideal es tu peso saludable, el peso con el que vas a sentirte bien en una horquilla que puede variar unos 15 kilos. Por tanto, no es una medición inflexible, sino que puede variar en función de la constitución de cada persona o de los momentos de la vida. No es lo mismo estar sometido a una gran presión física, estar embarazada, reponerse de una enfermedad o estar de vacaciones. Cada momento puede necesitar distintos recursos, siempre dentro de ese arco del peso saludable.

Es crucial conocer cuál es el peso más adecuado para tu salud; es decir, el peso ideal para una persona independientemente de si es hombre o mujer y más allá de una estética concreta.

No todos tenemos la misma constitución ni una persona pesa igual cada día, por eso el peso saludable no es una cifra concreta, sino un intervalo de kilos. Lo más importante es no sobrepasar el máximo. ¿Por qué? Porque numerosos estudios concluyen que una persona que supere habitualmente su peso máximo saludable va a terminar siendo obesa en pocos años.

Una de las formas más sencillas para calcular el peso ideal es a través del Índice de Masa Corporal o IMC. Este índice, ideado por el matemático belga Adolphe Quetelet responde a una fórmula que relaciona el peso de una persona con su estatura. Se caIcula dividiendo el peso por la altura al cuadrado. Por ejemplo en una persona que mida 1,60 metros y pese 65 kilos, su Índice de Masa Corporal sería de 25, resultado de dividir 65 entre 2,56 (1,60 x 1,60).

El peso saludable va entre los índices 19 y 25. Esto significa que en el caso de esta misma persona, su peso saludable estaría entre los 48,6 y los 64 kilos. Por tanto, con un peso de 65 estaría en el límite del peso saludable máximo. Realizar más ejercicio y revisar la dieta serían factores que ayudarían a mejorar la salud de esta persona.

Sin embargo, más allá del peso ideal según la altura hay otros factores como el perímetro abdominal o los porcentajes de grasa (masa magra vs. masa grasa) que repercuten seriamente en tu salud. 

Estos problemas suelen estar relacionados con una baja actividad física o no tomar alimentos saludables en la dieta diaria, como, por ejemplo, los procesados, el alcohol o las grasas no saludables.

Como vemos, la escala de peso saludable es flexible. Mientras nos mantengamos entre los valores de 19 y 25, la pérdida de peso, en líneas generales, obedecerá a parámetros estéticos. Si pasamos del índice 25, estaremos en el primer estadio de sobrepeso. Cuanto más avancemos en ese estadio, perder peso será más difícil y también tendremos más riesgos para la salud.

Numerosos estudios muestran que las personas obesas mueren más jóvenes que aquellas que tienen un peso saludable. También se ha comprobado que cuanto más pesa una persona, tiene menos esperanza de vida.

Por supuesto el grado de aumento del riesgo dependerá también de otros problemas de salud que tenga. Por eso es fundamental mantener unos buenos hábitos de vida para conseguir llegar a nuestro peso saludable y tener unos niveles adecuados de grasa.

Un estudio de la revista European Heart Journal muestra que el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular (ECV) es mayor en los casos que el IMC sea superior a 22 -23 kg/m2. El estudio revela también que las personas sanas que estaban en un IMC entre los 22 y los 23 kg/m2 tenían menor riesgo de enfermedades cardiovasculares, mientras que el riesgo se disparaba al ir aumentando este índice.