Centaurus, la nueva subvariante que pone en jaque las vacunas y el verano

  • Mientras los sublinajes de ómicron BA.4 y BA.5 han disparado los contagios en España, la BA.2.75 ha hecho saltar todas las alarmas

  • Detectada por primera vez en India, se transmite cinco veces más rápido

  • Tanto personas vacunadas como aquellos que ya han pasado a enfermedad tienen más posibilidades de contagiarse

Mientras que estamos inmersos en una escalada de contagios provocados por los sublinajes de ómicron BA.4 y BA.5, que actúan de forma totalmente diferente a lo que conocíamos hasta ahora, una nueva alerta llega desde India. La BA.2.75, una nueva variante apodada Centaurus. Es cinco veces más contagiosa que ómicron y, en cuestión de semanas, podría ser la predominante en nuestro país, como ya ha pasado en ocasiones anteriores. Ya se han registrado casos en Alemania, Australia, Canadá, Estados Unidos, Japón, Nueva Zelanda y Reino Unido. Es especialmente preocupante ya que se ha observado que tiene un importante escape vacunal y una capacidad de transmisión asombrosa. 

La culpa es de Spike

Se trata de una segunda generación de ómicron que cuenta con una serie de mutaciones peligrosas. “Parece ser que la subvariante cuenta con algunas mutaciones en el dominio de unión al receptor de la proteína Spike. Obviamente esta es la llave de acceso del virus para unirse a los receptores humanos”, explica en redes Soumya Swaminatahn, la jefa de la Organización Mundial de la Salud en India.

Estas mutaciones, situadas en la membrana de las unidades víricas, concretamente las G446S y R493Q que permitirían a la variante evadir varios anticuerpos y, por lo tanto, ser más resistente frente a la inmunidad conseguida hasta el momento en la población. Esto implica que tanto personas vacunadas como aquellos que ya han pasado a enfermedad tendrían más posibilidades de contagiarse.

Lo que les preocupa a los expertos

En India ya han comprobado que esta variante representa ya el 20% de los nuevos contagios y tendría una ventaja de crecimiento de un 18%, en comparación a las otras subvariantes de la COVID-19. Por suerte, de momento no hay evidencias que muestren que causa graves síntomas en las personas contagiadas, por lo que todo apunta que sea similar a la original y produzca dolores de garganta y mocos, sumados a los iniciales desde que tenemos constancia de la enfermedad. 

Los expertos ya están aportando sus opiniones y análisis sobre esta subvariante. El virólogo del Imperial College de Londres, Tom Peackok, ha explicado en su cuenta de Twitter que ninguna de las mutaciones detectadas en esta nueva variante supone algo realmente preocupante. “Pero que aparezcan todos juntos a la vez es otro asunto”. Por su parte, el doctor en Farmacia de la Universidad del País Vasco, Gorka Orive, ha manifestado a través de sus redes sociales que “presenta hasta 8 mutaciones adicionales respecto a BA.5″, un hecho que considera como “un impacto que debe ser estudiado tanto en lo que se refiere a su infectividad como evasión inmunitaria”.