Cuántas horas hay que dormir a los 50 para ser más feliz

Dormir se ha convertido en un problema para muchos españoles, la gran mayoría. Con el paso de los años es cierto que el propio organismo tiende a necesitar menos horas de sueño y se duerme menos. Ahora bien, esa no es excusa alguna para no tener un sueño totalmente reparador, que es justo lo que le falta a la mayoría de la sociedad, que a pesar de dormir, no descansan. Entonces, ¿cuánto debería dormir un adulto de 50 años para estar descansado e, importante, ser más feliz?

Al final no dormir bien no solo significa estar más cansados y tener unas ojeras más marcadas, va más allá y afecta a nuestra salud a largo plazo. Poco a poco ese efecto se va notando y la falta de sueño y el insomnio pueden provocar problemas cardiovasculares e incluso de hipertensión. ¿Cuánto deberías dormir a los 50?

¿Cuánto dormir según la edad?

Los niños más pequeños, los bebés, pasan gran parte de su día durmiendo, hasta 16 horas al día en los primeros meses. Poco a poco ese sueño va menguando hasta que los niños duermen entre 9 y 12 horas diarias, mientras que para los adolescentes es suficiente con unas 8 o 10 horas. A partir de ahí, el tiempo va menguando, pero necesitamos unas horas mínimas que dormir.

Un adulto de 45 o 55 años, por ejemplo, debe dormir lo que necesita, pues hasta los 64 años lo más recomendado es dormir cada noche entre 7 y 9 horas, algo a lo que muchos no llegan. Eso sí, a partir de ahí, de los 65 años, lo ideal sería dormir unas 7 u 8 horas diarias.

Pautas para lograr un sueño reparador

Más allá de dormir las horas que se requieren, hay que fijar una serie de pautas para lograr que ese sueño sea reparador y amanezcamos descansado y, por lo tanto, más felices para afrontar lo que nos tenga deparado el día.

Entre esas pautas hay que intentar fijar una hora rutinaria para irse a dormir cada día, intentando cumplirlo también los fines de semana. Además, es mejor evitar las pantallas, ya sea la del móvil o la de la televisión, un rato antes de irnos a dormir. Otros aspectos a tener en cuenta son evitar la cafeína o el alcohol, intentar no hacer ejercicio físico en un horario muy cercano al nocturno o mantener una buena iluminación y temperatura de nuestra habitación. Y por si acaso, siempre es mejor un buen colchón y una buena almohada.