La foliculitis de la barba es una afección dermatológica que puede resultar incómoda y, en ocasiones, dolorosa para quienes la padecen. Este problema se caracteriza por la inflamación de los folículos pilosos en la zona de la barba, lo que puede causar picores, enrojecimiento, e incluso la aparición de pústulas. Se produce cuando los folículos pilosos no son verticales, sino oblicuos, por lo que los pelos no salen por sus canales habituales, sino a través de la piel, provocando una reacción. 

A pesar de que puede ser una condición persistente, existen múltiples tratamientos y medidas preventivas que pueden contribuir a controlar y, en muchos casos, erradicar la foliculitis de la barba más allá de no afeitarse nunca (que es siempre una opción). A continuación exploraremos algunos de estos tratamientos y repasaremos las principales recomendaciones para mantener a raya esta molesta condición.

Seguir una rigurosa higiene adecuada es una de las primeras líneas de defensa contra la foliculitis de la barba. Lavar la zona afectada por este mal con agua fría y jabón suave o antibacteriano regularmente es crucial. Además, mantener la piel limpia y seca posteriormente también puede ayudar a prevenir y tratar la foliculitis. También puede ser beneficioso utilizar toallas limpias cada vez que se seque la cara para evitar la reintroducción de bacterias en la piel.

Existen varios medicamentos tópicos que pueden ser efectivos para tratar la foliculitis de la barba. Entre ellos podemos destacar la clindamicina al 1%, que se puede presentar tanto en loción, como en gel. Puede aplicarse en la zona afectada dos veces al día durante 7 a 10 días. Además, otra buena medida sería lavarse la zona afectada con jabón de peróxido de benzoilo al 5% durante la ducha por 5 a 7 días consecutivos para que haga efecto. Los antibióticos tópicos, como la mupirocina, también pueden ser recetados por un dermatólogo como remedio contra este problema.

Los tratamientos exfoliantes es otra de las alternativas que pueden ayudar a estimular los folículos pilosos de la barba y, con ello, ayudar a eliminar las células muertas que podrían estar obstruyendo los poros de nuestra piel. Un masaje previo, aplicando un poco de crema exfoliante puede ayudar a eliminar capas de piel seca, lo que a su vez también contribuye a estimular los folículos pilosos y ayudar a que el pelo salga sin obstrucciones. También es una buena opción el uso de ácidos exfoliantes como el ácido salicílico o el ácido glicólico, que pueden ser muy beneficiosos a la hora de luchar contra la foliculitis.

Tratar de seguir una técnica de afeitado correcta es crucial para prevenir la foliculitis de la barba, especialmente si la condición es causada por pelos encarnados debido a un afeitado incorrecto. Debemos evitar afeitarnos demasiado cerca de la piel, utilizar una rasuradora eléctrica en lugar de una navaja, afeitar a favor de pelo y aplicar un gel o crema de afeitado suave, como posibles medidas preventivas efectivas. Es clave no cortar el vello apurando el afeitado.

Si ninguno de los tratamientos y recomendaciones anteriores no proporcionan alivio, es aconsejable buscar la ayuda de un dermatólogo. Los tratamientos médicos profesionales pueden incluir antibióticos orales, tratamientos con láser o terapia de luz pulsada intensa para eliminar la infección y prevenir futuros brotes de foliculitis en la zona afectada. Además, el dermatólogo también es capaz de proporcionar una evaluación precisa de la condición y, con ello, sugerir un régimen de tratamiento personalizado que resulte mucho más efectivo para cada individuo.

Además de los tratamientos mencionados, hay varias otras consideraciones que pueden ser útiles. Por ejemplo, evitar la ropa ajustada que cause fricción en la zona de la barba, y mantener una dieta saludable y equilibrada para apoyar la salud de la piel también puede ser beneficioso.