Combate el estrés sin salir de casa: tips para crear tu propio spa y relajarte

  • En estos tiempos de pandemia, sacar tiempo para nosotros mismos puede ayudarnos a mejorar nuestra salud mental

En esta convulsa época de pandemia, desconectar puede ser muy complicado. Ahora que el teletrabajo y las restricciones para frenar el coronavirus nos hacen pasar más tiempo en casa que nunca, muchas veces nos cuesta encontrar un momento para nosotras mismos y, con frecuencia, acabamos entrando en rutinas muy poco saludables que pueden aumentar nuestros niveles de estrés.

Es el momento de parar, dedicarte tiempo y olvidarte de todas las obligaciones y problemas de tu día a día. Aunque en un primer momento pueda parecer complicado desconectar desde casa, con estos trucos podrás montar tu propia sesión de spa sin esfuerzo y disfrutar de una experiencia muy relajante que te ayudará a liberar tensiones sin salir de casa.

Desconecta

Vivimos en un estado de sobredosis informativa en el que cada día recibimos todo tipo de noticias, de mayor o menor veracidad, que resultan muy difíciles de procesar y que muchas veces pueden acabar afectando a nuestra estabilidad mental. Si queremos que nuestra sesión de spa sea efectiva, lo primero que debemos hacer es mantenernos alejados de las redes sociales y los medios de comunicación para poder despejar nuestra mente, así que apaga el móvil, cierra el ordenador y no enciendas la tele: este día es solo para ti, así que céntrate tan solo en ti mismo.

Crea un espacio tranquilo

Con nuestros dispositivos electrónicos apagados, llega el momento de preparar nuestro espacio de paz y relajación. Si tienes un baño con bañera, no lo dudes: enciende velas aromáticas, apaga las luces y llena la bañera con agua caliente. En este día especial, no te preocupes por los gastos, levanta un poco la mano y añade aceites naturales y sales de baño al agua para lograr una experiencia completa.

Además, puedes pinchar tu música favorita para ayudarte a dejar la mente en blanco. ¿Y si mi baño no tiene bañera? Si es tu caso, no te preocupes: también puedes disfrutar de una sesión muy relajante en tu habitación. Para ello, apaga las luces, enciende velas aromáticas o incienso y prueba a practicar alguna técnica de relajación como la meditación, la respiración profunda o la relajación progresiva. Te ayudará a echar las malas vibras fuera.

Mima tu piel

A la hora de montar nuestro propio spa en casa, es fundamental que dediquemos tiempo a cuidar de nuestra piel, tanto la del cuerpo como la del rostro, para eliminar las células muertas y recuperar nuestro brillo natural. Para la cara, empieza tu rutina facial limpiando tu piel con los productos que tengas en casa, ya sea agua micelar, leche limpiadora o bálsamos.

Utiliza exfoliantes para eliminar los poros, impurezas y células muertas y ganar suavidad y luminosidad. Tras aclarar con abundante agua, puedes aplicar un serum para corregir algún problema de rojeces y sequedades y preparar tu rostro para el siguiente producto: la mascarilla, un imprescindible de las sesiones de spa que te permitirá hidratar tu piel y hacerte sentir como una auténtica diva.

Una vez tengas la mascarilla puesta, llega el momento de relajarse: en este momento solo existes tú, así que no pienses en nada mas. Si tienes bañera, sumérgete y disfruta del aroma de las velas y las sales de baño. Si no, túmbate en la cama y relájate con el incienso, la buena música y las técnicas de relajación. Al cabo de quince minutos, podrás quitarte la mascarilla, pero no te preocupes si te excedes.

Cuando hayamos terminado con el rostro, toca nuestro cuerpo. De nuevo, necesitaremos un exfoliante, aunque corporal, para devolverle la salud a nuestra piel. Además, tanto si puedes disfrutar de un buen baño como si tienes que usar una ducha, no lo dudes y utiliza tu gel favorito, un acondicionador y un hidratante corporal para que la limpieza sea absoluta.

Al salir del agua, date tu propio masaje usando aceites y cremas y frotando tu piel con movimientos circulares desde las piernas a los brazos. Esto ayudará a mejorar la circulación, eliminar los líquidos del cuerpo y, por supuesto, a reducir el estrés y descansar mejor, así que no te cortes y recréate a gusto.

Cuida tu cabello

El cabello juega un papel fundamental para sentirnos atractivas y con la autoestima alta. Todos hemos tenido uno de esos “bad hair days” y sabemos lo mal que se pasa. Por eso, en este día de dedicación a nosotras mismas, no te olvides de tu melena. Además de tu champú y acondicionador favoritos, dos imprescindibles que nunca pueden faltar, utiliza aceites y mascarillas para nutrir tu pelo y conseguir una melenaza suave, bonita y brillante.

Arregla tus uñas

Toda sesión de belleza que se precie termina con una buena manicura, y la nuestra no iba a ser menos. Primero exfolia tus manos e hidrátalas con cremas para que recuperen su suavidad. Tras esto, elimina los restos de pintura que puedas tener en las uñas, recórtalas, límalas y elimina las cutículas para conseguir que tus dedos tengan una forma atractiva. Hecho esto, tan solo queda pintar las uñas, pero recuerda: siempre de abajo arriba y de izquierda a derecha y utilizando base y esmalte.