El consejo de Rosa Montero contra el coronavirus que en Corea han utilizado desde el principio

  • Una vez confinados en casa, es importante seguir con la disciplina porque puede haber algún miembro de a familia que tenga el virus sin mostrar síntomas

La red se está llenando de recomendaciones, consejos, ideas... Lo que haga falta con tal de echar una mano en la ardua tarea de romper la cadena de contagio. Los más importantes, los que recomiendan las autoridades sanitarias: no salir de casa, mantener la distancia social de entre uno y tres metros, toser en la manga y multiplicar la higiene de manos lavándolas todo lo posible, especialmente tras el contacto con entornos en el que haya otras personas (salidas a comprar el pan, farmacias, etc...).

Un consejo nuevo, terriblemente sencillo -tanto que nos parece increíble no haberlo oído hasta ahora- es el que ha propuesto la escritora Rosa Montero en sus redes. Usar la mano no dominante para tocar partes de la casa o de nuestro entorno que hayan sido contactadas por otras personas. Es decir, picaportes, cajones, correas de persianas, grifos, telefonillos, barandillas de escaleras, botones de ascensor... Esa 'otra mano' que no usamos para casi nada es la menos propensa a ser llevada a la cara. Una de las vías de contagio más habituales.

Tenemos muchas recomendaciones para no propagar el virus en sociedad, pero una vez confinados en casa, es importante seguir con la disciplina para no contagiarnos en el entorno familiar. Dado que el virus tiene la 'mala leche' de ocultarse en nosotros sin producir síntomas pero sí convirtiéndonos en personas contagiosas, es importante mantener esa responsabilidad incluso dentro de nuestra propia casa a fin de evitar posibles contagios 'internos' entre personas que, teniendo el virus desde antes de iniciarse la cuarentena, no han mostrado síntomas todavía.