¿Qué hay de cierto en que puedes contagiarte de covid por los ojos?

  • El ojo es una potencial vía de entrada para el coronavirus

  • Estudios más recientes indican que, aunque la transmisión es factible, su posibilidad real es muy baja

  • Las gafas reducen el riesgo de contagio más de un 10%

La vía respiratoria es la principal fuente de contagio de covid. Eso lo tenemos claro. Sin embargo, según pasan los meses, encontramos cosas todavía inexplicables. Hace un año, cuando todo esto comenzó, se pensó que la comida podía ser portadora del virus, una idea que se desterró al tiempo. No obstante, se sabe que también puede ser trasmitido por fómites. Pero ahora los expertos hablan de un nuevo mecanismo que podría explicar algunos positivos: la lágrima humana. Te contamos si es posible contagiarse por medio de los ojos, cuáles son las manifestaciones oculares de la covid-19 y si las gafas pueden ser determinantes como barrera.

Aerosoles: los culpables del contagio

La transmisión del coronavirus se produce a través de un receptor que está presente también en las células oculares, no solo en las del aparato respiratorio, por lo tanto, el contagio a través de la superficie ocular y la lágrima es totalmente factible. Si algún aerosol infectado roza estas zonas, es posible que entre al sistema respiratorio posteriormente, ya que los ojos, la nariz y la garganta están conectados por el sistema nasolagrimal (por eso cuando lloramos, la nariz gotea).

"El virus podría ingresar al cuerpo por las membranas mucosas que cubren la parte blanca de nuestros ojos", ha explicado el director médico de respuesta a la COVID-19 del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, John Brooks. Sin embargo, los estudios recientes indican que la posibilidad real es baja, diciéndolo de otro modo: el ojo no parece ser el órgano preferido de la covid-19 para entrar a nuestro organismo.

Pero ¿y si estoy contagiado puedo transmitir el virus a través de mis lágrimas? La teoría dice que sí. Si nuestra carga viral es alta y alguien entra en contacto directo con ellas, podría tocarlas, llevárselas a la cara y de ahí que pasen a las vías respiratorias y se contagien.

Manifestaciones oculares causadas por la covid-19

Pese a que la mayor parte de las investigaciones hablan de las manifestaciones respiratorias del virus, los oftalmólogos alertan del creciente número de problemas oculares asociados a este virus. La Academia Americana de Oftalmología asegura que "muchos otros virus, como el virus de la influenza, pueden causar síntomas respiratorios y síntomas oculares", y aquí estaríamos en el mismo caso. Estas manifestaciones pueden ser de dos tipos: por un lado, las provocadas al contraer la enfermedad en sí misma y, por otro, las derivadas de la pandemia como el uso de mascarilla obligatorio o los largos periodos de confinamiento que han provocado un aumento de la incidencia de ojo seco y otras enfermedades de la superficie ocular.

La más frecuente es la conjuntivitis que puede considerarse hasta un signo para la detección precoz de la enfermedad. La prevalencia de esta infección ocular en casos de covid es baja, pero una investigación publicada en el 'Journal of Medical Virology' asegura que se puede asociar a formas graves de la enfermedad e incluso acabar en una parálisis de los nervios oculares. Más allá de estas dos afecciones, las manifestaciones provocadas por el virus en los ojos incluyen también epiescleritis, ojo seco, sensación de cuerpo extraño, picazón, desenfoque de la visión y fotofobia.

¿Si llevo gafas corro menos riesgos?

Parece evidente pensar que, si tenemos una barrera de protección delante de nuestros ojos, le complicamos el camino a los aerosoles portadores del virus. Es más, un estudio reciente publicado en la revista médica JAMA asegura que la gente que utiliza gafas es mucho menos susceptible de contagiarse que aquellos que no las llevan, exactamente el riesgo real de contagiarse con gafas es casi diez veces menor.

Es más, cuando comenzó la pandemia, hace un año, el presidente de la Sociedad Oftalmológica italiana, Matteo Piovella, alertó de que "el material de la lente permite que el virus sobreviva durante cinco días y que el contacto con los ojos es una puerta de entrada privilegiada para contraer la infección. Otra alternativa es usar lentes de contacto diarias de un solo uso y evitar lentes de contacto reutilizables". Además, el experto hizo hincapié en la necesidad de lavarse las manos con mucha frecuencia y evitar tocarse los ojos y frotárselos.