¿Y qué pasa con los enfermos crónicos? Los grandes olvidados de la vacunación

  • Pese a la actualización del Plan de Vacunación, solo una pequeña lista de enfermos crónicos se incluyen en el listado

  • Solo un grupo de 365.000 pacientes se han considerado de alto riesgo

  • El resto deben esperar a su turno de edad, pese a encontrarse en una situación de vunerabilidad

Pese a la quinta marcha metida en la vacunación de nuestro país con la llegada de dosis de Pfizer, Janssen y Moderna, que han permitido actualizar, una vez más, el calendario de vacunación, hay un colectivo que, de momento, sigue sin aparecer en él. Hablamos de los enfermos crónicos, a los que, quitando unas excepciones que ahora analizaremos, se les vacuna cuando les toque por edad. Una situación que llevan meses denunciando desde la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), al considerar que no se tiene en cuenta el mayor riesgo que estos ciudadanos tienen si contraen la covid-19. "Nos genera un profundo sentimiento de decepción, incomprensión y gran preocupación", expresan desde POP. Te contamos qué enfermos sí se incluyen dentro de los prioritarios y cuáles siguen esperando a hacerlo.

Considerados de riesgo muy alto: apenas 365.000 personas

Pese al gran número de pacientes con enfermedades consideradas como crónicas, apenas 365.000 han entrado dentro de un grupo de vacunación prioritario al entender que su situación presenta un riesgo extremo frente a la covid- 19. Forman parte del grupo 7 de vacunación y se les ha inoculado la vacuna de forma paralela que a aquellos de entre 70 y 79 años, si no les correspondía antes por grupo de edad. Para su inmunización se ha utilizado "cualquiera de las vacunas autorizadas, pero preferentemente vacunas de ARNm, manteniendo el intervalo de 21 o 28 días (según se trate de Comirnaty o vacuna de Moderna, respectivamente)", explica el documento elaborado por Sanidad.

Al tratarse de pacientes que normalmente están bajo tratamiento, el momento de vacunación estaba condicionado por la situación clínica del paciente. "En el caso de pacientes oncológicos en tratamiento con quimioterapia citotóxica es recomendable la vacunación entre ciclos para tener una mejor respuesta inmune”, apunta el escrito. Además de esto pacientes, dentro de este grupo estaban aquellos que cumplían las siguientes condiciones de riesgo:

  • Trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH). 20.000 pacientes
  • Trasplante de órgano sólido y en lista de espera para trasplante de órgano sólido (pulmonar; renal y pancreático; cardíaco; hepático e intestinal). 60.000 pacientes.
  • Tratamiento sustituto renal (hemodiálisis y diálisis peritoneal). 28.736 pacientes.
  • Enfermedad oncohematológica. 64.000 pacientes.
  • Cáncer de órgano sólido. 170.000 pacientes.
  • Inmunodeficiencias primarias. 3.000 pacientes.
  • Infección con VIH y con <200 cel/ml. 10.600 pacientes.
  • Síndrome de Down con 40 o más años de edad. 10.000 personas.

Los que se quedan fuera

Fuera de esta selección se han quedado patologías tan representativas en la sociedad como los pacientes con EPOC y que, en nuestro país, afecta a más de 2,9 millones de personas. Desde La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) se ha pedido a Sanidad que estos enfermos se les incluya como de alto riesgo ya que "está claramente demostrado que la evolución de la Covid es peor en los pacientes con alguna enfermedad pulmonar crónica. Desarrollan una Covid más grave".

Otro de los colectivos excluidos han sido los diabéticos que también son, de acuerdo con la Sociedad Española de Diabetes, de alta vulnerabilidad. "La vacunación es una medida preventiva en nuestro caso para evitar complicaciones, tanto en la evolución de la Covid-19, en caso de infección, como de la propia diabetes". Es especialmente importante que se consideren de alto riesgo aquellos pacientes que, además de padecer diabetes, tengan otras patologías o comorbilidades como puede ser la obesidad.

Personas con problemas cardíacos, enfermedades respiratorias o neurológicas, fibrosis quística, enfermedades raras, sometidos a tratamientos inmunosupresores…también quedan fuera de los grupos prioritarios, pero se trata de pacientes que han tenido que acudir con asiduidad a consultas médicas o que, simplemente, han dejado de salir de casa horrorizadas por las consecuencias del contagio, lo que los ha llevado a padecer trastornos mentales serios como ansiedad y depresión.

La decisión de que pacientes de este tipo se queden fuera de los grupos vulnerables no es comprendida ni dentro del sector médico ni fuera de él. En el mes de abril el Ministerio de Sanidad reconocía la vulnerabilidad de los inmunodeprimidos, pero no les ha incluido como de riesgo extremo. En Cataluña, por ejemplo, los profesionales de la salud han pedido que estos pacientes crónicos se les vacune con prioridad, aunque no estén dentro del grupo de edad actual.

Estudio del impacto de covid-19 en las personas con enfermedad o trastorno crónico

Para hacer visible la realidad de estos enfermos crónicos, la POP ha desarrollado un informe que aporta datos muy significativos sobre la vida de estos pacientes desde que comenzó la pandemia. La media de los encuestados era de 51 años y el 86,5% de ellos vivían acompañados, ya que uno de cada cuatro reconoce no poder vivir solo y necesitar ayuda de un familiar o cuidados para realidad actividades básicas como higiene personal, alimentación o movilidad. Casi la mitad han tenido que seguir acudiendo asiduamente al centro de salud durante el estado de alarma, pese a que al 25% el seguimiento se le ha podido hacer por vía telefónica.

Este mismo porcentaje de encuestados olvidaba tomar la medicación con cierta frecuencia y el 15% lo hacía 'a veces'. Cuando se les preguntó si habían recibido información específica para cuidar mejor su enfermedad, solo uno de cada tres respondió afirmativamente. En conclusión, la crisis del coronavirus han provocado un aumento de preocupación en estos pacientes y se les notaba más nerviosos, irritables y con dificultad para controlar la situación.