Cada vez sabemos más: los 48 efectos secundarios de la Covid

Recuperarse de la Covid 19 es algo más que pasar la cuarentena, salir del hospital o tener anticuerpos. Un estudio realizado por un grupo de investigadoras, entre ellas la española Sandra López-León, de varias entidades norteamericanas y europeas, como la universidad de Harvard, el Instituto Karolinska o el laboratorio Novartis, revela que el 80% de los contagiados por coronavirus desarrollan al menos uno de los más de 50 efectos secundarios descritos en el trabajo.

El estudio se ha realizado entre casi 48.000 contagiados por coronavirus después de estudiar más de 82 publicaciones sobre los síntomas de covid que persisten en el organismo. La mayoría de los síntomas se corresponden con los experimentados en la fase más aguda de la infección. El trabajo habla de 55 efectos secundarios, aunque documenta 48 y no descarta que pueda haber más aún no descubiertos. El resultado del metaanálisis puede verse en la plataforma MedRxiv.

Los cinco efectos secundarios más importantes por número de afectados son la fatiga (58%), el dolor de cabeza (44%), los desórdenes de atención (27%), la pérdida de cabello La fatiga o cansancio se produce hasta tres meses después de superar la enfermedad e incluye otras patologías relacionadas con el Síndrome de Fatiga Crónica como las dificultades cognitivas, dolores incapacitantes o la pérdida de sueño. Las dificultades respiratorias pueden darse hasta un año después del contagio.

Las otras disfunciones más habituales son la pérdida del sentido del gusto (23%), el aumento de la frecuencia respiratoria (23%), la pérdida del olfato (21%), la tos (19%) y el dolor en las articulaciones (19%). Afortunadamente, las enfermedades más graves como la hipertensión, el ictus, la insuficiencia renal o la diabetes mellitus se dan porcentajes más bajos. Lo mismo ocurre con los desórdenes psiquiátricos, con los episodios paranoicos (0,3%) como el efecto secundario menos frecuente.

Según las investigadores, la mayoría de esta patologías colaterales son similares a las de otras enfermedades provocadas por el coronavirus, como el el SARS-COV, causante en 2003 del síndrome respiratorio agudo que se dio en el sudeste asiático, o el MERS, la variante de Oriente Medio.