¿Qué es la PCR larga y qué la diferencia de la convencional?

  • La PCR larga tiene una sensibilidad hasta cinco veces mayor que la convencional

  • Se utiliza en aquellos casos en los que la normal aporta un resultado dudoso

Antígenos, serológico, rápido, PCR… a estas alturas de la pandemia estos tests los tenemos tan integrados en nuestro día a día que somos capaces de decir cuál es su efectividad, cómo se realizan o cuánto tardan en conocerse los resultados, sin pensar demasiado. Sin embargo, ahora sale a la luz uno nuevo que quizá, de momento, no conozcas. Se trata de la PCR larga o de cadena larga, es la que mayor sensibilidad tiene de todas las mencionadas y se utiliza casos en los que la presencia del virus no se detecta con ninguna de las demás, pero el paciente tiene síntomas compatibles con la enfermedad. Te explicamos en qué consiste y por qué es tan eficaz.

Más sensible, incluso en fases tempranas de la infección

La carga viral. Es lo que leen las pruebas de diagnóstico y gracias a lo que sabemos si estamos contagiados o no. Pero a veces esta es tan baja que ni las PCR, que tienen una sensibilidad cercana al 98%, son capaces de detectarla. Eso no significa que no seamos portadores de virus y, por lo tanto, contagiadores. Para este tipo de casos, en los que hay dudas sobre si se está o no enfermo, se utiliza la PCR de cadena larga.

Es una técnica que amplifica un fragmento de material genético, de la molécula ARN, para identificar si la enfermedad está en fase activa, hasta aquí no hay ninguna diferencia con la convencional. Sin embargo, su sensibilidad es muy superior y puede detectar cantidades ínfimas del virus en los primeros momentos de la infección.

Es decir, que su capacidad de amplificación es tan grande que otros métodos serían incapaces de conseguir los mismos resultados. De acuerdo con un estudio publicado en la revista médica Natura, es muy eficiente para secuenciar regiones genómicas en un número muy pequeño de muestras y puede amplificar las enzimas presentes en el ADN hasta 30 kb, en comparación con los 5kb de la convencional.

No es habitual, se realiza en raras ocasiones

La toma de muestras es similar a la de la PCR que todos conocemos, con una extracción nasofaríngea, lo que varía es el análisis que se hace posteriormente en el laboratorio gracias a varias reacciones químicas que consiguen una fiabilidad hasta cinco veces superior. No obstante, debemos entender que en la mayoría de las situaciones este análisis no es necesario y que basta con la convencional.

Su existencia ha salido a la luz a raíz de que el presentador de televisión Pablo Motos se la haya realizado tras estar en contacto con un positivo y dar negativo en la prueba de antígenos y en la PCR. "Los expertos me han recomendado que me hiciese también un PCR de cadena larga, que tiene más sensibilidad y en ese he salido positivo. Tanta confusión se debe a que debo de tener una carga viral tan, tan baja que algunos PCR se pueden interpretar como positivos y otro como negativos", ha explicado el propio Motos en redes sociales.