Hematuria: ¿Qué problemas esconde la presencia de sangre en la orina?

  • La hematuria, presencia de sangre en la orina, puede tener varias causas, desde una infección hasta cáncer de vejiga o riñón.

La presencia de sangre en la orina es algo muy común, que puede ser un síntoma sin importancia como puede suponer algo más grave. Conocida como hematuria, indica la presencia de una fuente de hemorragia en el tracto urogenital. La hematuria puede presentarse como un episodio aislado o ser recurrente y, como decíamos, su causante puede deberse a un proceso benigno o a una patología maligna. Por este motivo, para hacer un diagnóstico preciso, es muy importante visitar a un urólogo si se presenta este tipo de patología. Existen dos tipos de hematuria:

  1. La hematuria microscópica ocurre cuando la sangre en la orina (pis) no se ve a simple vista y solo puede detectarse mediante un examen de orina. En la mayoría de los casos, los niños y los adolescentes que padecen hematuria microscópica nunca sabrán que tuvieron esta enfermedad, la cual desaparece sin causar lesiones ni complicaciones a largo plazo.
  2. La hematuria macroscópica ocurre cuando la cantidad de glóbulos rojos en la orina es tal que la vuelve roja o color té. En muchos casos de hematuria macroscópica, la enfermedad desaparece sin causar mayores problemas, pero a veces es signo de una afección más grave. En esos casos, los médicos tratarán las causas subyacentes.

Entre las causas más comunes de hematuria se encuentran:

  • La presencia de cálculos renales, uretrales o vesicales.
  • La hiperplasia benigna de próstata, la prostatitis o el cáncer de próstata
  • Traumas, como por ejemplo un golpe en los riñones
  • Diferentes enfermedades renales como pielonefritis, glomerulonefritis o nefritis crónica.
  • La presencia de un tumor en alguna parte del aparato genitourinario
  • La presencia de una obstrucción en el aparato urinario
  • Infecciones o Enfermedades de transmisión sexual
  • Infección de la vejiga o del riñón
  • Desequilibrio mineral en la orina
  • Desarrollo anormal de una parte del tracto urinario
  • Menstruación
  • Lesiones en los riñones o en el tracto urinario
  • El consumo de ciertos medicamentos, como algunos calmantes de venta libre
  • El ejercicio excesivo. Muchos atletas, en especial los corredores de maratón, padecen hematuria ocasionalmente.
  • Enfermedades sanguíneas o coagulos. En ese caso, la hematuria será por lo general uno de otros tantos síntomas.

Signos y síntomas

Técnicamente hablando, la hematuria es un síntoma. La hematuria microscópica no presenta signos visibles. La única manera que los doctores tienen de saber si alguien padece hematuria microscópica es haciendo un examen de orina. La hematuria macroscópica puede verse porque cambia el color de la orina, para lo que bastan una cuantas gotas de sangre. En muchos casos, el único síntoma es el color rojizo o color té de la orina.

En casos más graves, la hematuria puede ser uno de varios síntomas de otra enfermedad. Por ejemplo, si la hematuria es causada por una infección de vejiga, otros síntomas pueden ser fiebre, dolor al orinar y dolor en la parte inferior del estómago.

Tratamiento de la hematuria

La mayoría de las veces, la hematuria no requiere tratamiento. Si se presenta solo una vez, no hay nada de qué preocuparse. Si la presencia de sangre en la orina es el resultado de otra afección, el tratamiento para la hematuria incluirá el tratamiento para dicha afección. Esto puede implicar el uso de ciertos medicamentos, como antibióticos contra la hematuria causada por una infección del tracto urinario (ITU).

Las pruebas de seguimiento suelen realizarse después del tratamiento para confirmar la ausencia de glóbulos rojos en la orina. Si en repetidas ocasiones se detecta sangre en la orina como único síntoma, posiblemente se realizarán exámenes de orina y controles médicos cada tanto durante un año o más como medida preventiva.

  • Hematuria por infección: La cura se llevará a cabo mediante antibióticos. Los prescribirá el médico especialista después de identificar el germen causante de la infección mediante un examen de orina.
  • Hematuria por un trauma: Para el tratamiento de este tipo de problema lo mejor será el reposo. Beber al menos dos litros de agua al día puede ayudar. Si el trauma es grave, es muy probable que el paciente deba ser intervenido de urgencia.
  • Hematuria por la presencia de cálculos: Dependiendo del lugar, de la naturaleza y las dimensiones, se llevará a cabo un tratamiento u otro. Si las litiasis son muy grandes, se realizará: o bien una cirugía endoscópica, o bien una intervención mediante ondas de choque o ultrasonidos, para reducir el cálculo y permitir que sea eliminado por la orina.
  • Hematuria por hiperplasia de próstata: Si el crecimiento de la próstata es limitado, se llevará a cabo una terapia farmacológica para reducir el tamaño de la misma. Si el paciente presenta una hiperplasia importante, se deberá realizar una intervención quirúrgica para reducirla.
  • Hematuria por la presencia de un tumor: En la mayoría de casos en los que la hematuria viene causada por la presencia de un tumor (en los riñones, la próstata, la uretra y la vejiga), el tratamiento indicado será la cirugía.