Tu boca habla más de lo que crees: los problemas de estómago que delatan tus dientes

  • La salud bucodental puede ser una manifestación de lo que pasa en nuestro intestino

  • Algunos problemas orales están directamente relacionados con las Enfermedades Inflamatorias Intestinales (EII)

  • Si padeces la enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa hay que estar atento a varias manifestaciones, como las llagas o las caries

Nuestra boca no solo sirve para comer, sonreír y hablar, también es un signo que nos puede alertar de que otras partes de nuestro cuerpo no están bien, convirtiéndose en un indicador más de nuestra salud, especialmente en la digestiva. Desde hace años, algunos estudios científicos han relacionado las lesiones bucodentales con algunas enfermedades digestivas, por eso mismo Sermade, clínica odontológica especializada en la salud bucodental de personas mayores, ha querido señalar estos problemas en la cavidad oral con motivo del Día Mundial de la Salud Digestiva.

A ello también se suma la Confederación ACCU Crohn y Colitis Ulcerosa, desde donde apuntan que "la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa también se pueden manifestar en la boca", no solo con síntomas estomacales. En concreto, alrededor de un 80% de los pacientes que tienen una de estas Enfermedades Inflamatorias Intestinales (EII), se estima que en España hay unas 120.000 personas afectadas, puede presentar algún tipo de manifestación en la cavidad oral de su problema digestivo, pudiendo ser el síntoma inicial de la enfermedad antes de que estos se produzcan en la zona intestinal. Por tanto, estar atento a la boca puede ayudar a conseguir un diagnóstico precoz en pacientes con enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa.

La boca y las enfermedades intestinales

Existe multitud de manifestaciones bucales relacionadas con la salud digestiva que están directamente asociadas a la EII, entre ellas la estomatitis aftosa recidivante, también conocida como las molestas llagas, que suelen aparecer en la cara interna de los labios o en la encía. A pesar de que puede aparecer por múltiples causas, su presencia puede deberse a un brote de la enfermedad intestinal que se padece, donde también cabe la posibilidad de que sea celiaquía (gran parte de los diagnósticos se producen a partir de los 50 años).

Por su parte, la granulomatosis orofacial, que es una especie de inflamación de labios y parte de la boca, se ha visto, según la Confederación ACCU, presente en alrededor de un 15% de los pacientes que presentan enfermedad del Crohn.

No obstante, en personas con colitis ulcerosa es posible que se dé una mala absorción intestinal o un estado anémico deficiente, lo que puede provocar queilitis angular, más reconocidas como boqueras, que pueden llegar a manifestarse durante un mes entero, ya que suele aparecer por un brote o un mal estado digestivo. ¿El problema? No comienza a desaparecer hasta que se revierte la situación intestinal a mejor.

Ojo a las caries

¿Y las caries? ¿Tiene alguna relación su aparición con el estado de mi estómago? A pesar de que faltan estudios más concisos, sí que apuntan a que la bacteria que causa las caries está más presente en aquellos pacientes con EII, algo a lo que también se suman otras patologías bucodentales: la gingivitis o la periodontitis, mucho más frecuentes en este tipo de pacientes. Cabe recordar que algunas investigaciones han relacionado los focos de infecciosos dentales con la alopecia.

Entre otras manifestaciones están las lesiones en adoquín, parecidas a las llagas, que aparecen en la cara interna del carrillo. No es muy frecuente que aparezcan, pero puede ser una lesión molesta a la hora de comer. ¿A qué estar atento? Especialmente al colon si se padece alguna EII.

Higiene y revisiones continuas

La digestión comienza en la boca, por eso es clave mantener su higiene tras cada comida, en especial aquellas personas que padezcan o bien la enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa, pues la patología puede manifestarse fácilmente en la boca siendo realmente molesta. Por su parte, además de los cuidados básicos para mantener una boca y dientes sanos, es clave acudir con frecuencia, al igual que al digestivo, también al dentista para revisar que la cavidad oral está en orden y no hay problema alguno.