Los pistachos, grandes aliados frente al envejecimiento celular

Los frutos secos son un tipo de alimento que nos dota de grandes aportes nutricionales y energéticos. La gran variedad que existe hace que su consumo sea recomendable para la mayoría de la población si quieren regular o mantener muchas de sus vitaminas o minerales en los valores indicados. Pero puede que uno de los más infravalorados sean los pistachos, un fruto seco que aporta grandes beneficios a la salud si se consume de forma moderada. Uno de ellos, aunque sea uno de los más desconocidos, es su efecto para retrasar el envejecimiento celular.

Este fruto es más que reconocible gracias a su color verdoso y la cáscara que lo cubre -porque lo mejor siempre es comprarlos sin pelar-, que proviene de países de oriente, dónde mayor es su producción, aunque España también cuenta con una producción considerable, principalmente en zonas de Castilla-La Mancha y Andalucía.

Según un estudio de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona la ingesta de pistachos en pacientes prediabéticos puede ayudar a ralentizar el envejecimiento celular. La muestra recoge un estudio con 49 adultos que tienen predisposición a padecer diabetes, incluyendo en la dieta de parte de ellos durante varias semanas los pistachos. Con esta investigación se ha demostrado que gracias a estos frutos secos hay una menor pérdida de telómetros, los cuales protegen los cromosomas y controlan la cantidad de repeticiones que puede tener una célula. ¿Por qué es importante no perderlos? Pues debido a que es una de las principales características del envejecimiento.

Una vida saludable contribuye a reducir la pérdida de telómetros, pero tras la investigación se ha logrado saber que en pacientes con predisposición a sufrir diabetes los pistachos provocan un daño menor en el ADN de esas personas y una mayor protección de los telómetros. Aún así, este estudio ha sido basado en personas prediabéticas, por lo que todavía queda por saber si los pistachos también ayudan a retrasar el envejecimiento celular en personas sanas o en aquellas que ya han sido diagnosticadas con diabetes.

Por supuesto, el pistacho no solo puede contribuir al retraso del envejecimiento celular, sino que gracias a sus múltiples propiedades es capaz de aportar otros beneficios distintos a sus consumidores. Una dieta equilibrada siempre es buena para el control del peso ideal, pero los pistachos pueden ser un gran complemento para esa alimentación de forma que pueden ayudar a reducir el índice de masa corporal. Así mismo, al ser un fruto que está dentro de una cáscara ayuda a dar sensación de saciedad y a comer menos cantidad.

Como decíamos al principio, al igual que cualquier otro fruto seco, los pistachos cuentan con un gran poder nutritivo al ser uno de los frutos secos que más fibra aporta al organismo. Por su parte, también son ricos en varios tipos de vitamina, como la B1, la B6, la K o la E. Además, contiene altas dosis de ácido fólico y de algunos minerales totalmente necesarios para el cuerpo, como el potasio, el hierro o el zinc.

Gracias a su aporte en vitaminas y minerales los pistachos son bastante buenos para combatir la anemia, para reducir el nivel de estrés e incluso tiene beneficios en la salud sexual de quienes lo consumen, pudiendo mejorar la función eréctil en hombres con problemas de erección. Además, las grasas que contiene permite la reducción en sangre del colesterol LDL, el malo, por lo que ayuda a mantener una buena salud cardiovascular si se consume con constancia pero sin abusar de ellos.

Sin embargo, si antes se hablaba de sus beneficios en el envejecimiento celular de las personas con predisposición a padecer diabetes, el consumo del pistacho también ayuda a reducir los niveles de glucosa en sangre, disminuyendo las posibilidades de sufrir diabetes de tipo 2 y pudiendo ayudar a quienes ya la padecen regulando, además de la glucosa, la producción de insulina.

Si te gustan los frutos secos debes añadir a tu dieta o a tus snacks los pistachos sin ninguna duda, pues tienen grandes aportes nutricionales que afectan de forma positiva a distintos aspectos de la salud, en especial a aquellos que tienen predisposición a padecer diabetes en algún momento.